LOYALTY and maybe something more (Mello x Matt, DEATH NOTE)

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Ah, los vicios de la adolescencia... Y pensar que los dos seguíamos con los mismos de la infancia, vídeojuegos en mi caso y en el tuyo el chocolate. A pesar de que a los trece años yo agregué uno a mi lista de vicios que no era nada sano y que hacerlo me costaba un castigo tremendo en la Wammy's House.

Fumar.

¿Recuerdas la primera vez que lo hice, me pillaste y eso conllevó nuestro primer...?

Un día como cualquier otro, yo estaba en el patio de la Wammy's House, muy cerca de la calle... en la acera logré divisar una cajetilla de cigarros nueva y sin abrir junto a un encendedor, escalé la cerca solamente para tomar los dos objetos y dirigirme a un lugar escondido del patio, detrás de los árboles para satisfacer mi curiosidad que se convirtió en un vicio en poco tiempo.

Tú me estuviste buscando por horas porque de la nada me había desaparecido y yo no solía ir mucho al patio, y cuando me encontraste, me pillaste justo cuando me ahogaba con el intoxicante humo. De inmediato me hiciste notar mi horrible falta hacia las reglas de la casa, los daños de salud que me estaba proporcionando y que me acusarías con Roger...

Y bueno, situaciones desesperadas a meritan medidas desesperadas.

Antes de que siquiera te fueras, me levanté del pasto con rapidez y te robé un beso en los labios mientras soltaba el humo de manera incómoda por mis fosas nasales, el humo que salía del cigarrillo iba directo a tu ropa y ahora tu aliento olía a tabaco también, igual que yo.

Me gané una bofetada de las gordas.

Pero valió la pena, porque no me pudiste acusar y de ahí seguí fumando el resto de mis días, poniendo de amenaza que te besaría cada vez que me intentaras acusar.

Y fue efectivo, nunca me delataste, gracias por eso, brother.

Aunque no negaré que después de ese día fui dándome cuenta que para dónde iban mis sentimientos, que no era lo común y corriente que te pasaba en la adolescencia... seguía encontrando a las chicas repulsivas.

Pero a ti... Dios, ahí supe que no había vuelta atrás con esta extraña atracción.

Y todo por un simple cigarro.