Mi día había empezado normal, me desperté, bañé, y me fui con mi profesor al estudio. Oh, no se los dije, hace 4 años que estudio en casa. No salgo de aquí desde hace 1 año. No me parece necesario. Todo lo que necesito me lo brinda Lidia, mi nana. Mis padres trabajan todo el día, no los veo nunca y no se preocupan por mi en lo absoluto.
La verdad no me molesta, es más lo agradezco. Mi nana es como una madre para mi. Ella me cuida y me cubre con mis travesuras.Alguien toca la puerta.
-¿Quién es?.
-Soy Clara- Mi madre.
-¿Qué necesitas?.
Se escucha un suspiro del otro lado de la puerta.
-Tengo algo importante que decirte.
-Pues dilo!
-Sal y hablemos cara a cara.
Suspiro- Está bien.
Cuando abro la puerta veo a mi madre con los ojos hinchados.
-¿Qué pasa?
-A nana le dio un paro cardíaco. Ella falleció está mañana. Lo siento mucho.
Sentí como mi corazón se rompía en mil pedazos. Esto no podía ser posible.
-No, no es cierto. No juegues con esas cosas.-sentía como se formaba un nudo en mi garganta.
-Lo siento tanto.- y me abrazó.
No se que me pareció peor. Enterarme de la muerte de mi nana, o lo que vino después de eso.
- Te inscribiremos en una escuela pública, para que hagas amigos y puedas superar esto.
-Yo no necesito amigos!- grite enojada- no necesito a nadie. Quiero estar sola.-mi voz se iba quebrando conforme hablaba.
-Hija, esto te hará bien. Un cambio para mejor.
-No quiero esto.-susurre.
-Lo siento hija, pero es una decisión tomada. Mañana mismo entraras a la escuela.
Y se fue como sí nada, había perdido a la única persona que me apoyaba y entendía. No se como podré seguir después de esto.
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Niña Rata
HumorGabriela Ortiz, también conocida como niña Rata, tras la muerte de su nana se ve obligada a abandonar su zona de confort para salir al mundo exterior, ese lugar que evito por mucho tiempo.