Lienzos en Blanco 🌹HunHan

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Algunos minutos más tarde la puerta del ático se abre y un Lu Han con la cara llena de lágrimas mantiene la mirada fija en la pintura de Sehun, quien colapsa junto a él y seca las mejillas de Lu Han con sus pulgares.

— Tú, — dice lentamente, mientras busca las palabras correctas. — Me haces sentir extraño. Dibujas imágenes mías y hablas de cosas que no entiendo y vives en un mundo diferente y me siento tan extraño a tu alrededor. Es frustrante porque y-yo quiero tocarte todo el tiempo pero estoy asustado de que huyas y no me sermonees mas sobre cosas estúpidas, como sombras fucsia o alguna mierda como esa de nuevo. — Sehun cierra sus ojos y traga, y se escucha el sonido bajo y gutural de su garganta. — Quiero besarte

Antes de que Lu Han se dé cuenta del torbellino robando aire de sus pulmones o cuando pudo haber empezado a considerar que sus sentimientos eran correspondidos , Sehun lo atrae cerca y lo besa. Sus labios están agrietados y ásperos en contra de los de Lu Han, pero ninguno se preocupa. Ellos permanecen así por lo que parece una eternidad, hasta que Sehun se separa.

— Me gustas, Lu Han.

Lu Han piensa que puede ver estrellas cuando responde que sí, que a él también le gusta Sehun.

  ✈ ✈✈ 

La sonrisa de Sehun se desvanece con el inicio del verano. Cubierto de pintura en un lienzo de sudor y tomando el sol obstinado, Lu Han tira de los cabellos cafés del chico tendido junto a él. Cierra sus ojos e intenta memorizar los rasgos de Sehun con las puntas de sus dedos, riendo cuando su boca es atrapada en un beso.

—Eres lindo— Dice Sehun a mitad del beso.

Lu Han sonríe. Frecuentemente no sabe que decir en respuesta a aquellos repentinos arrebatos de amor, pero esta vez el revela, tímido lejos del calor de la boca de Sehun. —Me haces feliz

Sehun se detiene, y toma a Lu Han cerca de su pecho. —Joder. Eres demasiado lindo

—¿No correrás hoy?

—No. Hoy no.

Esa misma tarde Sehun deja caer sus libros en clase. Es la tercera vez esta semana. Lu Han ha estado contando, y se ha dado cuenta de la forma en que Sehun cojea con su pierna derecha. Es un pequeño movimiento que no podría ser advertido, pero porque lo ha estado viendo él lo sabe. En la hora del almuerzo Sehun no ha tocado el arroz, y la leche que toma sale de su nariz. Sus amigos se ríen pero Lu Han frunce el ceño, enterrando sus uñas en la palma de su mano. Cuando le pregunta que le pasa, Sehun insiste que esta bien. Él está bien.

Excepto que no lo está. Algunos días después se cae en la pista, y Lu Han abandona su cuaderno de dibujo para ir junto a Sehun. Trata de ayudarlo pero es empujado lejos.

—Déjame solo— dice Sehun. — Joder, déjame solo ¿quieres?

—No — Dice Lu Han. — No lo haré. No estás bien. Puedes intentar negarlo pero yo se que no estás bien.

Sehun se ve irritado pero se deja llevar a la sombra del árbol de cerezo. Él se inclina sobre el tronco, con su respiración poco profunda. —Estoy bien— dice otra vez.

—Detente Sehun. Yo pienso-supongo, ¿Qué no nos confiamos todo?

—Solo estoy cansado, es todo. No tienes que preocuparte, ¿okay?

—¡Detente! —Lu Han grita, con los puños apretados. —¿Por qué guardas esto como un secreto?, ¿Por qué no me dices?, No me quieres, o n-no quieres que te ayude, porque-

—Estoy muriendo.

Lu Han se detiene. —¿Qué?

—Estoy enfermo— dice Sehun, con sus manos cubriendo su cara. — Estoy enfermo y me estoy muriendo, ¿sí?, ¿estás satisfecho ahora?

—¿Es un chiste? — Lu Han susurra y suelta una risilla nerviosa. —No te puedes morir, no puedes morir, Sehun, tu no puedes-

—Se llama miastenia gravis. Hace mis músculos débiles hasta que no puedan funcionar y después me matara. Últimamente se ha vuelto grave, así que no sé. Si tengo suerte viviré algunos años más, pero él doctor me ha dicho que no tenga tantas esperanzas. Los medicamentos no están funcionando. Ahora, no pongas esa cara. Dijiste que querías la verdad ¿no?, te la estoy diciendo. Estoy muriendo y no hay nada que tú o yo o todo el dinero en el mundo pueda arreglar.

De los ojos de Lu Han caen lágrimas. Sehun lo abraza , y con los dedos acaricia sus orejas.

—No llores—dice. — De cualquier manera, yo debería ser el que está llorando ahora mismo

—Desde— Lu Han empieza, pero un sollozo se escapa de sus labios. — ¿Desde hace cuanto lo sabes?

—Desde hace un tiempo.

La camisa de Sehun se empapa de las lágrimas de Lu Han. Él se arrepiente de haber preguntado- pudo haber sido mejor haber vivido cada día en la ignorancia. Su corazón se vuelve silencioso, latiendo tan lentamente que se pregunta si ya no funciona bien. Si se muere, ya no tendría que ver a Sehun sucumbir a esa enfermedad que ni siquiera puede pronunciar. Si se muere, no sentirá dolor. Pero, si se muere, no podrá sentir los besos de Sehun, no podrá contar sus pestañas, o dibujar su silueta contra el sol.

—Lucha—dice. — Puedes luchar. No te rindas, no hasta que yo lo haya hecho.

—Está bien—dice Sehun, con su voz apagada por el cabello de Lu Han. —Está bien

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Linchenme plox, pueden golpear a la traductora :'v (por tardarse en publicar y por el capitulo que publica xd) 

Bai.