El Mas Alla

Capitulo 4

Jack Frost principe de Burguess ahora revajado a sirviente se encontraba limpiando la cubierta del barco hasta que practicamente se podria ver el reflejo.

Asi que principe Jack Frost eh?

Una voz femenina lo distrajo de su lista de maldiciones hacia Hiccup, levanto la vista y encontro a una chica pelirroja rizada totalmente despeinada, vestida con pantalones verdas oscuros, chaleco con arco y flchas en su espalda.

Quien eres?-Jack no encontro maldad en los ojos azules de aquella chica parecia simpatica-

Me presento majesta, soy Merida Dumbroch-giro sus brazos de forma graciosa intentando ser elegante haciendo reir a Jack-

Merida? eh escuchado de ti, estas en la lista de los mas buscados piratas, eres la mejor arquera de todo el mar - Jack contenia una extensa memoria de quienes eran los mas peligrosos piratas de todos los reino, su padre lo habia obligado  a estudiarlo-

Asi que soy popular- se miro las uñas en un gesto presumido- Y dime principe Frost que le parece nuestro humilde barco?

Perfectamente escalofriante -respondio con una sonrisita-

¡Que cruel! El Furia Nocturna es calido y perfecto- Merida abrazo dramaticamente el mastil del barco restregando su mejilla contra la gruesa madera negra-

Jack rio ante el acto de la chica apoyandose contra la madera atras de su espalda. Por un momento olvido donde estaba y el por que.

Y dime Merida como terminaste aqui? -doblo su rodilla para poder apoyarse en ella-

Merida solto el mastil y lo rodeo cruzandose de brazos- De verdad quieres saber? -miro al albino que asintio con la cabeza- Bien por donde empiezo? Hace tres años yo era hija de Fergus y Elinor Dumbroch er-fue interrumpida por el albino-

FERGUS Y ELINOR DUMBROCH!? Los reyes del bosque escoces?!

Si ellos mismos, yo no era la princesa que mi madre deseaba que fuera ella queria que fuera perfecta, refinada, delicada, perfecta-Merida avanzo hasta sentarse junto al albino- claro yo no era ni queria ser asi, yo era mas como me vez ahora pero ahora soy mas madura y se controlarme, un dia mi madre quizo forzarme a un matrimonio para unir a los clanes yo no queria ugh osea boda,matrimonio iuu eso no es para mi -hizo un gesto de asco- pero mi madre no escuchaba que queria ser libre, entonces escape del castillo, me escondi en el bosque por semanas,me sentia feliz y libre pero extrañaba a mi padre y a mi madre fue entonces que decidi volver-solto un suspiro pesado- cuando volvi...todo estaba echo cenizas...no habia ningun sobreviviente, al parecer mi huida causo una guerra entre los clanes y ambos clanes perecieron en la guerra...entendi que una accion egoista puede llevar a cabo una consecuencia. Regrese al bosque y no comi por dias ni semanas entonces un oso enorme me ataco, no tenia fuerzas para pelear y espere mi destino, cerre los ojos y escuche el golpe de una espada, abri los ojos y Hiccup estaba peleando contra el oso, yo solo lo miraba pelear sus movimientos eran tan agiles y veloces como una serpiente acechando su presa, mato al oso y me miro tendiendome la mano, el me dio esta oportunidad -sonrio dejandose caer contra el hombro de Jack- El me salvo, el salvo a todos en este barco, nos entreno, nos educo ademas de cuidarnos, no tiene mucha paciencia per-fue interrumpida por el albino-

Noooo en serio? Si no me dices no lo noto!-exclamo con sarcasmo haciendo reir a Merida-

Pero es buena persona, aveces da miedo y todo pero es buena persona.

Ya quisiera creer eso -por acto de reflejo se sobo su mejilla donde habia un moreton-

Oye por lo que escuche lo mordiste!

Fue defensa!-se escuso Jack-

Por que? Te golpeo mas aparte de eso-señalo su mejilla-

Emm..nop.

Idiota.

Oye! -Jack hizo un puchero que hizo reir a la peliroja-

Bien ire por un poco de ron, te apetece principe Jack? -Merida se levanto estirandose-

No estoy bien- se despidio de la peliroja y siguio limpiando el barco hasta el atardecer donde por accidente se quedo dormido apoyado contra unas cajas y la escoba en la mano-

Hiccup que estuvo todo el dia en su camarote leyendo un libro y mapas salio a verificar como hiba todo afuera, se sorprendio al ver toda el barco brillante y reluciente, no habia ni una mota de polvo en ningun lado que viera, ese albino habia echo un gran trabajo. Lo busco con la mirada sin exito, camino por el barco buscandolo hasta que lo encontro profundamente dormido, sintio un poco pena por el debia de estar exausto, limpiar todo el barco no era trabajo facil. Lo cargo como una princesa dejando por ahi la escoba y lo llevo a su camarote, con cuidado lo acosto en su cama quitandole las botas, admiro su rostro dormido unos momentos, de verdad que era lindo ese chico, joven, paso su mano por la mejilla del albino sintiendo la suave piel fria de porcelana, quito su mano y se alejo dejandolo descansar.

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Holaaaa