El 23 de febrero

284 14 0
                                    

Eran las 8 de la noche, mi hermana mayor me había invitado a los tacos, le dije "si, voy, pero primero me baño" así que entre a bañarme, al salir sentí mi cuerpo debilitado, le dije "hermana, vete tu, perdona pero no voy a los tacos, no me siento muy bien"

Aproximadamente a las 23 horas fuimos al hospital Ayala, mi madre, mi esposo y yo. Llegué al hospital, me hospitalizaron. Recuerdo en sueños que los médicos trataban de que mi cuerpo reaccionará, yo no sentía nada, me veía acostada con muchos aparatos en mi cuerpo, vi un hombre que no se apartaba de mi cuerpo, era mi esposo, por fin lo podía ver, ahí lo conocí, tal cual me lo imaginaba, mi amado esposo, mi compañero, el hombre que alegró e iluminó la oscuridad en la que vivía.

Volvi a ver a mi madrecita que nunca se apartó de mi lado, siempre conmigo apoyándome, y sufriendo en silencio.

Mi cuerpo ya no reaccionaba, había yo partido, pero volvía a ver, vi que llegaron mis hermanas, mi hermana menor y mi hermana mayor, me encontraron sin vida, cubierta con una sabana, mi esposo a lado de mi cuerpo, y yo podía ver, por fin volvía a ver, me sentía ligera, sin pesos, sin agujas, pero sobre todo podía ver!!! A lado mío había un angelito, mi hijito, que partió conmigo.

AblepsiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora