Y si esto me gusta?

Y...que hacemos?

-Hola...

-Hola, como esta tu mamá?- creo que su tía se llamaba...Viviana o Ariana, algo parecido, creo. aun que me vio, raro, como si no me conociera, siendo que hasta tenia mi numero de teléfono, por alguna urgencia.

-Bien, bien.

-Bueno, veo que estas ocupada- me señalo y yo no entendía nada -Mandale saludos a tu mamá de mi parte.

-Bueno, yo le digo, chau.

Seguimos caminado como si nada pasaba, pero al menos una de las dos debía reconocer que, eso, fue incomodo y si explicación. Yo no me sentía incomoda, me molestaba que Ji, si se pusiera incomoda. Y eso no me gustaba.

Nosotras nos separábamos en una esquina y cada una se iba para su lado, pero cuando me estaba por despedir de Joy.

-Espera- me freno bruscamente, fue un segundo, pero yo me sentía mal, ya que siempre nos saludabamos con un beso en la mejilla, obligado de, de mi parte, ovio- voy a tu casa.

-Pero ya sabes que hoy no puedes ir-

-Y cuando iré- no quería que valla a mi casa y se encuentre con una de las típicas escenas familiares, que incluían a mi madre, un hombre y alcohol.

-Nunca-eche una carcajada

sinceramente ni siquiera yo quería, llegar a casa. Pero debía ir a buscar a Juan a la escuela y llevarlo a lo de un amigo. La verdad, creo que mi mamá pasa mas tiempo en casa que nosotros.

-Hoy no puedo tengo que ir por Juan- aun que era cierto, para mi fue una escusa.

-Oh, entonces te acompaño, y de ahí nos vamos a mi casa, a almorzar, quieres...?

-Esta bien, si insistes-dije sarcásticamente sabiendo que, si ella no me lo decía, igualmente yo iba a ir a su casa, y reímos un poco.

fuimos por mi hermano y lo llevamos de su compañero de escuela. fuimos a la casa de Joy, comimos, y ya nos encontraba nos en su habitación hablando sobre la nada misma, ok no, estábamos jugando a las preguntas incomodas, y era prácticamente obligatorio contestar. y entre una pregunta y otra siempre había algún reto o juego, salido de tema.

-Ok, bah, te toca a vos-le golpee el hombro, casi cae de la cama.

-Em...¿el momento mas incomodo de tu vida?

-No...creo que no tengo, uno como tal, o al menos resiente como para acordarme-me quede pensativa, tratando de acordarme.

-Dale, encerio. Haces un montón de estupideces por día y me vas a decir que nunca te sentís incomoda?

-Si, encerio no me siento incomoda, haciendo esas cosas.

En ese momento se abalanzo hacia mi, yo me puse a la defensiva, pero luego me calme ninguna hablaba, como si no se necesitaran palabras. Estábamos tan cerca sentía su respiración, y ella mis latidos que poco a poco se aceleraban. Me beso lentamente la frente, muy lentamente, lo disfrute "ashh". y se acerco con movimientos lentos a mi oído y me susurro...

-¡Creo, que ya tienes tu momento incomodo!- eso era mágico, y grandioso.

-Te equivocas- se me escapo, dentro de mi, savia que no tuve que decir eso.

-Te equivocas tu esto es hermoso, pero incomodo- lentamente yo le iba perdiendo el sentido a la conversación