Mentirle a un mentiroso

ÉL

Y él propone ir a una fiesta.

-Jumm... Tengo un lugar mejor, uno donde nos podemos divertir a forro- me toqué la barbilla y sonreí.

-Entonces no esperemos-descansó su brazo en mi hombro- . Te sigo.

Quizás él pensaba que iríamos un lugar solos, algo silencioso y demás; sin embargo, lo que no sabía es que iríamos a uno de mis lugares favoritos. Tenía que hacer algo, para que su existencia, parezca miserable y confesara que no quería nada conmigo. De alguna manera tenía que hacerlo hablar, o al menos darle razones para que no siguiera con la farsa.

-¿No es linda la librería?

-Ahh -volteó a mirarme- por su puesto, es acogedora, supongo.

-Exacto, tan acogedora que no tendremos espacio.

"Ni para respirar, y tendrás que irte o alejarte."

-Vamos Adam.

Fuimos a mirar algunos libros. Intentó besarme y le pateé la entre pierna, y gritó.

-¡Shhhhh!- dijo la vendedora.

-Lo siento- dijo él.

"Verlo estar en ridículo me hacía sentir más cerca del final de mi tan perfecto plan. Aún que se le ve lindo cuando se disculpa. Espera no. Matt concéntrate, es un estúpido varón que al fin y al cabo te dejará, y lo peor es que ni somos nada, pero esta vez no serás tú quien se deprima."

-Vamos a seguir buscando un libro que te guste.

-Claro, vamos. Oye me tendrás que disculpar, es que un impulso.

"Esto es ridículo, él debería decir algo, intentó besarme. Bueno no sé ni porqué me preocupo."

-¿Estás bien? Te veo algo pensativa, si quieres nos vamos.

-Ahh ¿Yo? No, tranquilo sigamos buscando.

"Tengo que hacer algo para que este tipo, se canse, parece no sé. El chico acepta a cualquier loca por sexo... ¡Ah! ¡Idea!"

-Este... Adam, creo que saber que libros quiero.

-Me parece perfecto; vamos.

-Pero ¿Podrás comprarme todos?

-Claro, ni que fueras a comprar la librería.

"¡Ja! Woah! Está tratando a la chica equivocada. Yo respiro libros, como libros, por lo tanto traje muchos libros"

-¡Woah! ¿Todos esos libros quieres?

-¿Son muchos?- "Obvio que son demasiados, pero si me amas, los comprarás. Ah, verdad tu cariño no es real así que púdrete."

-Te los compraré si eso quieres.

-Jaja! Claro. ¡Espera qué! ¿Cómo dices que dijiste?

-Que compraré estos libros, por ti.

-Este... okay.

"Tengo que hacer algo, esto no puedo haber llegado tan lejos. ¡Ay! Este hombre actúa demasiado bien."

Estuve caminando en círculos por un rato. Los libros eran muchos así que la vendedora demoraría en contar y verlos y demás cosas. Estuve pensando, podía sentir como mis neuronas se iban perdiendo.

-Adam... Ven.

Lo abrasé, y fue demasiado extraño, lo hice ya que lo empezaría a intuir a que me bese, y bueno haría como que no lo conozco, y todo eso.

"Esto es extraño, no sé cuánto tengo que esperar para que este de señales de querer besarme, lo cual no conseguiría. Pero eso sí, una pena que vayan a botarlo de la librería."