10.- "¿Ella...?

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Aleksys.

Entro al edificio con Mackenzie tras de mi aun enfadando. ¿No se da cuenta que aún estoy enfadado?

Acabábamos de ir a desayunar todos juntos, pero todo salió mal. Collin y la tía Stephany comenzaron a pelear y este se fue sin decir nada, la tía y mamá comenzaron a discutir aún más fuerte y se dijeron muchas cosas de las que sé que después se arrepentirán, se disculparan y todo volverá a la normalidad.

Tía Steph estaba tan enojada que tomo las llaves de su carro y se fue con el tío James pisándole los talones, así que mis padres tuvieron que llevar a todos los niños en su carro y Dylan, Mackenzie y yo nos fuimos en nuestras respectivas motos, solo que nos fuimos por otros caminos buscando a Collin, además de que al parecer había un accidente en la calle principal y tuvimos que rodear el lugar. Al final después de varios minutos, o quizá un par de horas encontramos a Collin en el gimancio golpeando un saco sin parar así que lo convencimos – o quizá lo obligamos y amenazamos – a volver a casa y disculparse por su actitud de niño caprichoso.

Y ahora heme aquí.

- ¿Me dejaras correr? – Pregunta Mackenzie por milésima vez en la mañana.

- Ya te dije que no.- Le gruño exasperado, cuando quiere puede ser peor que las gemelas y Keeva juntas.

- ¿Por favor? – Repite alargando la a y yo niego.- ¿Por favorcito? – Ahora alarga la o y siento como la última gota de mi paciencia se derrama junto con esa gota de sudor que recorre mi cuello.

- ¡Que no Mackenzie! ¡Solo no! ¿¡Es tan difícil entender un "No"!? – Le grito sin pensar y al instante me arrepiento.- Solo no Mackye, perdón por gritarte pero me preocupo por ti, sabes lo peligroso que es correr ¿Y qué sería de mi sin mi pequeño dolor de cabeza pelirrojo?

Asiente un poco pero aún me mira con miedo y un atisbo de sonrisa.

- Voy para arriba, ve a ver por qué tardan tanto los chicos.

Murmura un leve de acuerdo y se encamina al estacionamiento mientras yo subo al departamento pero al llegar no me espero lo que miro.

Mamá se encuentra tirada en el piso llorando cual bebe sin su madre abrazando a papá, quien por cierto, también tiene lagrimas bajando por sus mejillas. No quiero preguntar qué es lo que pasa así que solo subo a mi habitación lo más silencioso que puedo, pero en el camino escucho llantos provenientes del cuarto de las niñas; me asomo y me encuentro con Iker que tiene la mirada perdida mientras las gemelas y Keeva juegan a las muñecas tranquilamente sin saber lo que está pasando en la sala; mi entrecejo se frunce al instante que Iker me ve y comienza a negar mientras una solitaria lagrima baja por su ojo izquierdo; regreso a la entrada, donde aún esta mamá justo como la vi segundos antes.

El ascensor suena en señal de que ha llegado al piso y sus puertas se abren mostrando a los chicos, quienes al ver a mamá fruncen el ceño al igual que yo.

- ¿Qué... Que ha pasado? – Pregunta Mackenzie acercándose a mi madre.

- Oh mi pequeña Mackye... Mi niña.- La abraza y llora aún más.

- Tía, me está asustando, ¿Qué ha pasado? – Pregunta Collin acercándose junto con Dylan.

- Su madre... ella... - Pero no termina pues solo balbuceos salen de su boca en los pocos momentos que no está sollozando.

La angustia recorre mis venas en ese momento, dirijo mi mirada hacia mi padre y creo que puede ver la incógnita en mi mirada pues solo niega y baja la mirada.

- ¿Mi tía...? ¿Ella...? – No puedo terminar las preguntas por que el nudo en la garganta no me lo permite.

Mamá solo asiente sin poder hablar y Mackenzie abre los ojos desmesuradamente mientras Collin comienza a negar lentamente.

- No, imposible.- Murmura mi primo y noto como empuña sus manos hasta dejar sus nudillos blancos.

La pelirroja comienza a llorar y niega un poco para después caer abatida al suelo llevándose las manos a la cara, sus hombros suben y bajan mientras comienza a golpear el piso con sus puños.

Yo no sé qué hacer, que sentir, ni que pensar.

- ¿Y mi tío? – Pregunto sin pensar.

- Esta grave, en coma. – Contesta mi padre y más lágrimas bajan por sus ojos.

Collin se lleva las manos a la cara y niega repetidamente para girarse y golpear con su puño la pared dejando en ella una abolladura. Llama al elevador y sale del departamento con la cara roja, sé a dónde va, pero también sé que necesita espacio y tiempo.

Mackenzie comienza a gritar como desquiciada y lanza todo lo que encuentra contra la pared mientras mamá murmura algunas cosas incoherentes.

- Se fue odiándome... No me dejo recordarle cuanto la amo... - Es lo único que logro entender de los labios de mi madre.

Al parecer Dylan es el único que permanece cuerdo ante tal noticia, toma a Mackenzie en un abrazo y la deja golpearle el pecho hasta que se cansa y termina abrazándolo.

- ¿Por qué ella? – Pregunta repetidamente.

- Porque así tenía que ser... - Le responde mi hermano mirando el suelo.- Vamos a la cocina, les preparare un té para que se tranquilicen.

Mi hermano cumple lo que dijo y pronto todos tenemos una taza de té humeante en las manos.

Pero yo simplemente sigo sin creerlo.

Esa chica sonriente que siempre estuvo para mí como una segunda madre.

La pequeña llena de vida con esos ojos hermosos.

Mi tía, que siempre estuvo junto a mi madre, sobre todo en esos momentos que más la necesitaba y viceversa.

Simplemente no lo creo, no me cabe en la cabezaque esa morena llena de vida ahora no lo está, por que Stephany está muera... 


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Capitulo muy corto, pero lleno de emociones, ¡No me odien!

este capitulo lo podran leer desde el punto de vista de Alessia en un rato, sera el segundo extra y estara en Mi hermosa estupidez, asi que si ya borraron la historia de sus bibliotecas vuelvanla a agregar para saber lo que esa cabecita rubia penso.

¡Las amo! 

Publicare el siguiente capitulo en cuanto este capitulo junte 150 votos y 70 comentarios, no mas de 3 comentarios por persona... ¡Vamos, yo se que si pueden!    




¡Estupida! #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora