¡Todo Es Mejor Cuando Estas Borracho!

capitulo 1

-MAMÁ DEJA DE GRITARME Y DIME DONDE MIERDA DEJASTE MI COLLAR.
-HELGA DEJATE DE JODER Y BAJA A TOMAR EL DESAYUNO, LLEGARÁS TARDE A TU PRIMER DIA DE CLASES

Ya se lo que deben estar pensando, todas las novelas son iguales, todas empiezan con el comienzo de clases pero si queren saber mi historia hay que empezar desde el principio ¿verdad?

Bueno, sigamos.

-NO SE PUEDE DEJAR NADA EN NINGUN LADO PORQUE YA LO ESTAS "ACOMODANDO" Y LUEGO NO SABES DONDE MIERDA LO DEJAS.- exclamo bajando las escaleras con pasos firmes y decididos. Son las 6:30 de la mañana, todavía no ha salido el sol pero mi mal humor no tiene horarios.
-DISCULPAME POR TENER QUE ACOMODAR TODOS TUS DESASTRES, LA PROXIMA ACOMODA TU TUS COSAS Y NO ME FASTIDIES DESDE TAN TEMPRANO- escupe mi madre con su cepillo de dientes en una mano y un poco de pasta dental en la comisura de sus labios.
Suspiro.
1, 2, 3, 4, 5, vuelvo a suspirar.
Llego a la cocina y me sirvo un par de tostadas en mi plato y me como la primera en dos mordiscos

-¿Podes no ser tan desagradable comiendo, Helga?- me mira asqueado mi hermano Taylor.
-No tenés por qué mirarme comer, cerdo.- sonrio y le saco la lengua repleta de rastros de tostada.
-El único cerdo aquí eres tu.- dice y con eso se levanta de la mesa y se marcha.

No los entiendo en esta casa, todo les fastidia, mejor dicho, todo lo que hago les fastidia, no se si es que yo soy la oveja negra de la familia o todos son unos amargos conmigo.
Seguro es un poco de las dos.
Termino mi segunda tostada y me encamino a la puerta no sin antes pasar por el baño para darle un último vistazo a mi alborotado cabello que según yo y mis amigas, no tiene arreglo y ¡Dios! ¡Junto al cepillo esta mi collar!
Nunca salgo a ningún lado son el y hoy no sería la excepción.
Ahora si me dirijo a la entrada de casa y grito un adiós que se muere cuando salgo rumbo al colegio.
En la parada del colectivo me encuentro con mi mejor amiga Bonnie, que me recibe con una amplia sonrisa y un abrazo que hace que me duelan las costillas.
Conversamos de cosas estúpidas ya que nos vimos la tarde anterior para repasar la semana en la que no nos vimos y llega el colectivo que nos lleva al colegio.
Nada ha cambiado desde el año anterior, las paredes blancas con algunas manchas y rayones, los casilleros grises que usan los de primer año, que por cierto tienen mochilas más grandes que ellos mismos, callate Helga, tu eras igual.  Intento no recordar a la gordita Helga de primer año con su mochila de las chicas superpoderosas gigante. Eras fan de bellota, recuerdas? Cierra la boca conciencia.
En fin, llegamos a la última aula que se encuentra al final del pasillo y nos sentamos en la fila contra la ventana, al último, o debería decir que CASI al último debido a que la zorra Lucy y su secuas estan sentadas allí.
Las miramos con la típica cara de Te estoy vigilando zorra y seguido a eso tomamos asiento.

No les voy a contar mis aburridas clases porque no hay nada importante que contar al respecto, HELGA ERES UNA MENTIROSA, EL CHICO QUE ENCABEZA LA LISTA DE LOS MAS LINDOS ESTA EN TU CLASE Y LO CONOCISTE ALLÍ cierra la maldita boca conciencia, esta es mi historia y la voy a contar como yo quiera.
Pues si, el chico más guapo de todo mi colegio, que por cierto se llama Greyson, se sienta en el asiento de adelante, pero no es nada relevante en mi historia.
Si lo es, no seas terca.
Bueno bueno, puede ser que más adelante lo mencione pero mientras tanto las dejo imaginarselo.

Con Bonnie tenemos un cuaderno en el cual tenemos muchas listas, de las cuales los chicos más lindos y los que mejores besan son mis favoritas, allí Greyson encabeza la primera lista, como dijo anteriormente mi conciencia y de los que mejores besan... Pues, sólo les dire que el mejor besador no era quien esperaba que fuera, pero como suelen decir, las apariencias engañan.
-No sabes Michi, este verano salí con un universitario que estaba para comérselo con papas!- dice mi amiga en un susurro no tan susurro. Se estarán preguntando por que me llamó Michi, como odio mi nombre, mis amigos me llaman por mi apellido que no es precisamente Michi, sino Míchigan.
Mi amiga tiene tanta suerte con los muchachos, lo cual no es mi caso ya que mi lista de besos no es tan larga como la de ella y su lista de mejores novios es larguísima mientras que la mía todavía no tiene registrado ningún nombre.
Bastante deprimente para una chica de 16 años, lo se pero tengo la seria teoría que es porque no salgo mucho y los chicos que conozco son los de salón y ¡Ni en pedo saldría con alguien de mi salón! Imagínate que cortas con el y tenés que verlo todos los condenados días junto a ti 6 horas diarias. No no no.
-Michi me estas prestando atención?- me chasquea los dedos Bonnie en mi cara haciendo que todos a nuestro alrededor volteen.
-Si Bonnie, del universitario...
-¡NO! No me estas prestando atención Helga, en que estas pensando?
-En nada.- si supiera que estoy escribiendo un libro de mi vida mentalmente me mandaría directo al manicomio.
-Bueno, iremos a la fiesta que organiza Derek.
-Mmm ¿cuando es?
-Mañana- dice y provoca que todo mi sándwich de pollo y queso salga despedido por diversas partes de la mesa en la cual estamos almorzando.- tranquilízate Michi, es una fiesta de "bienvenida" o algo así, siempre hay excusas para poder alcoholizarse, tu sabes.- me mira de reojo y me guiña el ojo. ¿Que le picó a esta loca?
-Ni de chiste, mañana no es viernes y tenemos clases al día siguiente.
-¡Porfavor! Tienes 16 años, ya tendrás muchos años luego para preocuparte por cosas importantes, aparte, tienes que salir un poco, estas pálida, seguro te pasaste todas las vacaciones encerrada en tu habitación viendo Gossip Girl, Teen Wolf y Awkward. Esa chica es bruja ¿ cómo lo supo?
-Púes...- no se que decir, tiene razón.
-Pues nada, no tienes excusas, si el problema son tus padres entonces diles que te quedas a dormir en mi casa y problema resuelto- dice y hace un gesto con su tenedor, como si este fuese una varita mágica.

Ok Michi, preparate porque tu historia acaba de empezar.