¡Todo Es Mejor Cuando Estas Borracho!

capitulo 6

Nunca me puse en pedo, como mucho me picaba, me mareaba y ponía tonta pero nunca llegué a olvidarme de las cosas y eso es una de las cosas que más detesto.
Ya paso una semana y no recuerdo nada de la fiesta, nada de Greyson. Si, ya se, no lo besé y con eso ya tendría que estar satisfecha pero no funciono asi. Si me planteo algo no hay nada ni nadie que me lo saque de la cabeza.

-Vamos Michi, necesito pasar este parcial- dice mi amiga y me chasquea los dedos en la cara.- matemática me esta volviendo loca.- se queja y masajea sus ojos con las palmas de sus manos.
-lo siento, es que...
-...Sigues pensando en Greyson- escupe mi amiga en tono burlón y gira los ojos.
-¡Callate!- le pego en el hombro
-¡Auch! En otra vida fuiste boxeadora
-Ya callate y volvamos a las ecuaciones.

Después de 2 horas de puros números decidimos darnos un descanso y tirarnos en el sillón del living con nuestros celulares. Lo único que se escucha son los zumbidos de nuestras teclas y notificaciones, no hay nadie en casa salvo nosotras.

-Michi...
-¿Qué?
-Reserva tu viernes, saldremos.
-¿Tan rapido otra salida?
-Helga Míchigan- exclama y se pone de pie-, ha pasado ya más de una semana desde la última y creo que única fiesta a la que has ido en lo que va del año, así que dejame decirte que no ir no es una opción.
Lo único que hago es girar los ojos y sonreír, a lo que Bonnie entiende como un sí y pega un saltito de celebración.

Pensar tanto en Greyson fue mala idea, ahora estoy haciendo el parcial de matemática y no se quien se ve peor, yo o Bonnie, que se esta comiendo las uñas y el lápiz al mismo tiempo.
Al que se lo ve con las ideas claras es a Greyson porque cuando fui a preguntarle por una ecuación a la profesora miré de reojo su examen y estaba lleno de números y tachones.

Él no estuvo toda la tarde pensando en ti Michi, esa es la cruel realidad. Ya callate conciencia de mierda. Sabes que es verdad. Silencio.

Como puedo termino mi examen, aunque no se de qué tanto me preocupo si soy una de las mejores en la clase, no puedo decir lo mismo de Bonnie, que en estos momentos me esta odiando por no ayudarla con los ejercicios.

-No te vayas.- escucho que me susurran a mi izquierda. Volteo y miro a una Bonnie desesperada.- no puedo desaprobar este parcial, mis padres se pondrán como locos.

Giro los ojos y me volteo para ver a la profesora, que esta en la otra punta del salón explicándole algo a un chico.

-Pasame la hoja.- le susurro y me la pasa. Diablos, no ha hecho nada.- Burra de mierda.
-¡No me quisiste ayudar porque estabas pensando en Greyson!

Giro rápidamente hacia Bonnie con ganas de matarla y miro de reojo como Greyson se da vuelta por unos segundos, me sonrie y vuelve a mirar su examen.
Estoy roja, lo sé, mata a Bonnie, o mejor aún, no le hagas el parcial y deja que sus padres la maten. No es mala idea conciencia.

-Porfavor termina mi examen, te lo recompensaré.
-Te odio Bonnie.
-Me amas.- dice y me dedica una sonrisa.
-Ustedes dos.- se escucha la voz de la profesora y no les miento cuando digo que se me hiela el culo.- silencio porque les quitaré el parcial.- fiuf falsa alarma.

Salimos Bonnie y yo del salón y ella no hace otra cosa que asfixiarme con sus brazos mientras grita ¡gracias!¡gracias!¡gracias!

-Me debes una.- la mira con cara de orto.- UNA GRANDE.
-Ah si, sobre eso... Después me lo agradecerás

Maldita Bonnie.

No me da el tiempo de mandar a la mierda a Bonnie porque suena el estruendoso timbre que avisa el comienzo del almuerzo y el pasillo se llena de alumnos hambrientos.

-Michi, me olvidé de decirte, hoy almuerzo con Max.
-¡Hija de puta, no me dejes sola! Esas cosas no se hacen o se avisan con anticipación ¿ahora con quien rayos me quedaré todo el almuerzo?
-Oh, pues eso se soluciona- dice y empieza a mirar por todo el pasillo en busca de algo... O alguien.- ¡GREYSON!
Me abalanzo sobre Bonnie y le tapo la boca en un intento fallido de evitar que Greyson la escuche, pero para mi mala suerte la escucha y esta viniendo hacia nosotras.
-¿Me llamaste Bonnie?- pregunta con su voz ronca que me encanta.
-Si, hoy almorzaré con mi novio y como tu y Michi se conocen me gustaría que almorzarás con mi amiga.- dice Bonnie abrazandome y yo la empujo.
-Si me prometes no ponerte en pedo almorzando conmigo entonces no tengo problema.- dice y me dedica un guiño.
No digo nada, sólo me sonrojo, lo mejor que sabes hacer Michi.

-Me las vas a pagar Bonnie.- le susurro unos segundos antes de dar media vuelta y empezar a caminar con Greyson.

Estamos sentados en un pequeño parque que se encuentra a unas cuadras del colegio, en la sombra de un árbol. Yo estoy tirada con los pies descalzos y con mitad del cuerpo en la sombra y mitad del cuerpo en el sol, me gusta que el calor pegue en mis piernas.

-¿Como te fue en el examen?- me sorprende Greyson cuando es el primero en hablar después de comprar las bandejas de comida.
-No lo se, soy bastante buena en Mates pero no había estudiado para hoy.- doy un largo suspiro que no expresa otra cosa que arrepentimiento. Eres una maldita ñoña Michi.
-Tampoco te preocupes, se que eres toda una sabelotodo cuando se trata de números.
-Si, ya se, soy una ñoña.- digo y miro mi bandeja de comida como si me sintiera avergonzada de ello.
- No, es genial.- dice y hace que lo mire. Se me escapa una sonrisa boba.- No sabes lo que daría por entender esas ecuaciones de mierda. Tuve que ir a particular para este maldito examen.
Sólo le sonrio por el raro cumplido y me mando un pedazo de tortilla a la boca.
Michi no seas tonta y dile que tu puedes ser su tutora, ya sabes, como en las historias cliché en las que después se terminan enamorando. Bueno no, esta es la vida real, no un cuento de hadas así que esto no va a suceder.

Charlamos de un par de cosas más y terminamos de almorzar. La verdad es que tenía las peores expectativas para este almuerzo pero Greyson me sorprendió.
También me sorprende que hasta ahora no haya mencionado nada de la fiesta, es decir, la última vez que establecimos una conversación me dejó con muchas incógnitas en la cabeza.

-No tengo idea de que hora es...- digo y me recuesto en el pasto, junto a las piernas de Greyson. Pienso en moverme y mantener un espacio personal pero al ver que no le molesta no lo hago.
- Son las... Dos de la tarde.
-¿¡Qué!?- pego un respingo y ya estoy de pie junto a él.- deberíamos haber entrado a clase hace media hora.
-Es verdad...- dice y sigue mirando su reloj plateado.- pero es que todavía no me acostumbro a los horarios de este instituto.- me mira y puedo jurar que vi un brillo de picardía en sus ojos.
-¡Rayos Greyson! Nunca me he rateado del colegio.
-Siempre hay una primera vez para todo Michi.- dice con su voz de actor porno y me tira del brazo para que vuelva a recostarme en el pasto junto a él.