Paso una milésima de segundo mirando los cálidos dedos de Greyson tocando mi muñeca y quizás él lo nota porque al instante la suelta, lo sé, debo tener tremenda cara de embobada pero es que me dejó la piel electrizada.
Ay Helga eres toda una romántica. Ridícula, sólo te empujó para que no salgas corriendo al instituto. Dejame soñar despierta conciencia.
-Sabes... Menos mal que nos rateamos, tenía Historia y después Literatura y son las materias que más odio.
Greyson ríe y se recuesta junto a mi en el pasto.
-Yo no se que materias tenía pero da igual, estar aquí es mil veces mejor que estar encerrado en esa prisión.
Se me escapa una sonrisa y cierro los ojos. No escucho nada más, sólo la sensación de los rayitos de sol atravesando las hojas de los árboles.
Michi...
Michi...
Miiiiiiichi...-Shhhhhhh
-Michi, vamos, arriba.
-Qu...que?- digo en un bostezo y me incorporo.
-Te quedaste dormida.- dice entre risas y se señala el hombro y ¡Oh por dios! ¡¡Le he babeado el hombro!!
-Ay santo cielo lo lamento!!! Que vergüenza.-digo y me tapo la cara para que Greyson no contemple mi cara que ahora esta del color de una manzana.- ¿Por qué no me despertaste antes?
-Es que parecías tan tranquila y cuando no me di cuenta tenía todo el brazo empapado.- dice entre risas.¿Acaso no le daba asco? No se que es peor, haberme dormido, haberme dormido en su hombro o haberme dormido en su hombro y encima babaearlo. Todavía sigo con las manos cubriendo mis ardientes mejillas.
-Oh, vamos Michi, le pasa a cualquiera.- dice y coge una de mis manos por la muñeca y me la aparta, electrificandome todo el cuerpo.
Abro los ojos y veo su radiante sonrisa que me transmite tranquilidad. Saco las manos de la cara y vuelvo a recostarme, aún un poco avergonzada.
Estuvimos en silencio un gran rato, Greyson se había recostado junto a mi y yo jugaba con una gomita de pelo.
-Greyson...- hablo después de que la gomita de pelo terminara por irritanme.
-¿Qué?- pregunta e inclina su cabeza para verme mejor.
-¿Cual es tu color favorito?
-¿A que se debe esa pregunta?- dice entre risas.
-No lo sé, siento que no te conozco.
-¿¡Como es eso Michi!? En la fiesta tuvimos una larga charla donde hablamos de infinidades de cosas.- justifica incorporándose y sentándose como indio.
-Ya te dije que no me acuerdo de nada.- digo frustrada y también me incorporo, así quedo más o menos a su altura, sigue siendo alto a pesar de estar sentado.Nos pasamos el resto de la tarde conversando de cosas estúpidas como su color favorito, que por cierto es el azul; que su materia favorita, aunque suene muy ñoño es Literatura, sí, lo sé, es una de las materias que más odio. Ya callate Michi, que no ves que es una oportunidad para que el te ayude a estudiar?
Pfff que va, nunca le pediría ayuda para estudiar, soy demasiado orgullosa.Bueno, sigo.
También me contó que sus padres están divorciados y que al mudarse se vio obligado a cambiarse de colegio; que tuvo dos novias en toda su vida y que la última hizo un escándalo porque se mudaba y la "abandonaba" pf que ridículo.
En fin, las horas pasaron volando y yo simplemente le conté que mi mejor amiga se llama Bonnie, que por cierto él ya sabía.
-Ven, vamos a dar una vuelta.- me dice Greyson y se incorpora y seguido a eso me extiende su mano para que lo acompañe.
Damos una vuelta por el pequeño parque en el que estamos y entramos en un kiosco.
-Hola Joe, me darías...¿Que deseas comer?- se vuelve hacia mi.
-Ehhh, no lo sé, lo que sea, sorprendeme.
-Esta bien.- me mira de reojo y vuelve toda su atención a el muchacho detras del mostrador.- Dame una gaseosa de esas y una bolsa de estos caramelos.- dice y señala unos caramelos de todos colores de un frasco.
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¡Todo Es Mejor Cuando Estas Borracho!
Teen FictionSoy Helga y no soy una borracha, no se porque se llama así mi novela pero estoy aquí para contar mi historia, odio mi nombre, por eso me llaman Michi, estoy en la edad en la que todas queremos de novio al jugador estrella de futbol, nuestras hormona...