31/12/11

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Querido amigo,

Los resultados salieron y pude saber que no eran buenos por los rostros de los oficiales, ellos cuchicheaban a mis espaldas mientras yo preocupada trataba de averiguar qué era lo que pasaba, al cabo de una hora llego una ambulancia o algo así, me pregunte quien estaba herido, pero mis ojos no identificaron a nadie, vagabundos y unos que otros delincuentes menores, ladrones y pandilleros eran los que me rodeaban.

Me sacaron con cuidado de la celda en la que me tenían prisionera y se acercaron unos enfermeros algo peculiares.

Ellos en vez de camillas traían una camisa...de fuerza.

Mis ojos se abrieron supongo que en busca de una explicación, pero ésta nunca llegó.

Todos me miraban con lástima, miedo ¿preocupación?.

Después de muchas luchas insignificantes me encontraba con la camisa de fuerza apretándome dentro de la "ambulancia".

En 45 minutos el carro paro y un "llegamos" inquieto mi mente, ¿a dónde?, aún no lo sabía, o no lo quería saber.

Muchos más enfermeros fueron por mi recibimiento, un pinchazo a través de la camisa de fuerza en mi brazo me dijo en un largo y profundo sueño.

*POV DE UN ENFERMERO*

Llegó la ambulancia psiquiátrica, pude escuchar gritos chillones dentro de ella pero al abrir las puertas, la chica ya estaba dormida, no puedo negar que me inquieto mucho la nueva paciente, pues era tan sólo una chica, no pasaba de 17 años.

Llevo en este trabajo 3 años y siete meses, considero que sé identificar muy bien a los locos que suelen internar por lo que se me hizo bastante extraño que aquella chica terminara aquí, definitivamente quiero tratarla, me inquietó desde el primer momento que la vi, ahora la llevo a su habitación y me dispondré a ver su expediente.

*FIN DEL POV*

Desperté en un cuarto totalmente blanco.

El suelo y las paredes blancas y algo acolchadas y una pequeña cama arrinconada blanca, y hasta la cámara ubicada en una esquina de la habitación era blanca, a excepción del pequeño lente negro que tenía, no había nada más, ni siquiera ventanas.

Inclusive yo me encontraba de blanco, pues sin saber cómo resulte con una especie de overol de una talla más grande que la mía color blanco.

¡Definitivamente esto no es un hospital, o por lo menos no uno normal!.

Grite y grite, pedí ayuda, suplique que me sacaran de aquí, pero nada, parecía que nadie me escuchaba y ahora no sé qué hacer, no tengo familia, no tengo casa, no tengo nada...


DADIVAN © [EDITANDO] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora