Kuroko No Basket X Lectora (Un Nuevo Comienzo)

V

Bueno aquí les dejo la quinta parte del fic, creo que esta vez quedo algo corto pero espero que lo disfruten.

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Narra Kise:

(T/N)-cchi ... sabes la primera vez que te vi quede en shock era como si tus ojos pudiesen ver en mi interior, aún recuerdo esa noche, podía ver como caminabas bajo las luces de la ciudad, siento tanta nostalgia al recordar esto pero me es imposible olvidarlo ssu, después de todo es un dulce recuerdo que atesoro y que jamás olvidare, creo soy un poco cursi al decir esto pero fuiste la primera chica en cautivar mi corazón, tan solo con una simple mirada tuya fui capaz de experimentar cosas inexplicables, era como si el tiempo se detuviera solo para que yo pudiera contemplar tu belleza. (T/N)-cchi desde que te vi, supe en ese instante que eras la persona con la cual quiero pasar el resto de mis días ¿me concederías ese privilegio? ¿Puedo? Me gustaría escuchar de tus finos labios un "Si" después de todo desde que comencé a conocerte cada vez más ese ha sido mi sueño y al igual que tu luchare por cumplir mi sueño ssu.

Te contare un secreto (T/N)-cchi, aunque creo que ya lo sabes, eres la chica más hermosa del mundo, ni siquiera las modelos con las que he llegado a trabajar se comparan contigo, pero sabes qué es lo que más cautivo de ti... pues verás fue tu mirada, tan profunda como el mar tan inocente y tan sincera eso fue lo que hizo que me enamorara de ti (T/N)-cchi~

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Apenas llegaste a tu hogar recibiste tus pertenencias y comenzaste a acomodarlas en aquel pequeño departamento tu cuerpo estaba cubierto por el sudor puesto que el haber jugado contra aquel pelirrojo no había sido fácil, ni mucho menos el arreglar tu sola cada uno los muebles, una vez que terminaste tomaste una larga ducha, tomaste algunas prendas las primeras que encontraste las cuales constaban de una camisa larga de cuadros roja y short corto negro y unas tenis negros y acodaste tus mechones hacia atrás con la ayuda de unas gafas negras, tomaste en un saco las prendas sucias tomaste tu cartera y saliste del departamento debías ir a la lavandería y de paso a buscar algún bocadillo, pues tu estomago desde hace una hora comenzaba a gruñir por el hambre, caminaste un par de cuadras y entraste a la lavandería depositaste tus prendas en grandes lavadoras e introdujiste un par de monedas para echar a andar aquella máquina, pasaron los minutos y ya habías terminado de lavar todas tus prendas, abrazaste aquel saco y disfrutabas del aroma a limpio, ahora solo restaba en ir en busca de comida, pensabas en ir a buscar algo que preparas pero estabas demasiado cansada para cocinar y que decir que tenías tarea por hacer, suspiraste profundamente y recordaste aquel restaurante de comida rápida Maji's Burger, comenzaste a caminar hasta llegar al lugar ordenaste una hamburguesa y una soda, al igual que la primera vez que habías llegado a la ciudad.

Miraste a tu alrededor y pudiste percatarte de que tanto como Kuroko como Kagami estaban sentados junto a la ventana, discutían por tonterías, pensabas en no darle importancia a la situación y sentarte un lugar antes que ellos, pero después recordaste que no estabas usando las fajas que utilizabas para ocultar tus atributos, por un momento sudaste frío a pesar de estar usando una camisa bastante holgada tus pechos aún se podían notar esto era realmente malo, tomaste la comida de la charola y disimuladamente caminaste hasta la salida, pues aquellos chicos no se habían dado cuenta de tu presencia pero por si acaso, te acomodaste las gafas y saliste despavorida del lugar si se deban cuenta de tu pequeño secretillo, pasarías lo mismo que en tu anterior colegio, caminaste un par de metros sin rumbo hasta que llegaste a un parque, viste como las madres de los pequeños infantes comenzaban a llevarlos de la mano para regresar a casa, se estaba oscureciendo y cuando caminaste hacia una banca para disponerte por fin a comer tu hamburguesa chocaste con un rubio alto de ojos color ámbar al parecer está huyendo de una despavorido grupo de chicas que no paraban de gritar.

???: -Oh lo siento, ¿estás bien?– pregunto el chico un tanto preocupado, pues te había atrapado de la cintura antes de que cayeras al piso por el impacto, pero antes de que pudieses argumentar algo fuiste arrastras hasta detrás de unos árboles, estabas tan pegada al cuerpo de aquel chico que podías sentir el latir de su corazón y la respiración agitada sobre la piel de tu cuello, era un momento bastante raro a tu parecer "¿Quién diablos es este sujeto?" pensaste por un segundo hasta que pudiste notar que los gritos de aquellas chicas se iban alejando.

Tu: -Hey ¿hasta cuándo piensas soltarme?– preguntaste un tanto molesta, pues aun estabas entre los brazos de aquel desconocido y sobre todo ahora tu cena estaba arruinada, pues esta se encontraba en sobre el césped.

???: -Ah jaja lo siento no fue mi inten... -la frase no pudo ser completada puesto que le habías dado un puñetazo en el costado, para por liberarte de aquel abrazo -¿Por qué hiciste eso? De verdad me dolió- Lloraba como si fuese un niño pequeño- Además eres una chica ¿Cómo es que tienes tanta fuerza?-

Tu: -Eso es tu culpa, mira que arrastrarme hasta detrás de unos árboles y arruinar mi cena, espera será acaso que tú eres... -hiciste una pausa, mientras quitabas las gafas de tu rostro dejando a la vista aquellos ojos (C/O) brillantes por las luces de la ciudad, dejando atónito al rubio y cuando moviste tus labios para formular la respuesta de forma unísona ambos respondieron:

Tu: -Un pervertido- El rubio: -Kise Ryouta ssu~-

Kise: -E..espera ¿Cómo que un pervertido? ¿Acaso no sabes quién soy yo?- se señalaba así mismo un poco indignado por tu respuesta.

Tu: -Ni idea~- respondiste en tono perezoso- y la verdad no me importa quién diablos seas, pero si me interesa es que me pagues mi cena, por tu culpa mi hamburguesa esta arruinada– exclamaste un tanto molesta.

Mientras tanto el rubio te mirada impresionado pues no había chica alguna que no supiera quien era el, Kise Ryouta un modelo para una de las mejores revistas de todo Tokio y sobre todo un ex-miembro de la Kiseki, era imposible que no supieran quien era el, pero al parecer tú eras la excepción.

Kise: -Jamás creí que alguna chica no supiera quien soy, eso hiere mis sentimientos ssu...- nuevamente aquel chico comenzaba a llorar, miraste un tanto extrañada a aquel rubio y comenzaste a alejarte, mientras el continuaba con su pequeño melodrama, pero cuando se percató al ver que te alejabas corrió hacia a ti y sujeto tu mano con delicadeza.

Tu: -¿Ah?- fue lo único que pudiste decir antes de lanzar otro puñetazo hacia el estómago del chico, pues realmente estabas de mal humor no habías probado bocado alguno desde el almuerzo en la escuela y ahora solo buscabas calmar tu furia y quien mejor que la persona que había arruinado tu cena, el chico se colocó en cuclillas pues con el anterior golpe habías sacado el aire de su interior -Ah~ ahora me siento mejor- Murmuraste y comenzaste a caminar nuevamente en busca de algo para cenar, dejando atrás aquel sujeto que había arruinado una hamburguesa perfecta.

Kise: Mientras tanto el sobaba la parte afectada –Que mala ssu- hizo un pequeño puchero –Por lo menos me hubiera dicho su nombre, pero algo me dice que la volveré a encontrar– sonrío y antes de darse cuenta que aquella misteriosa chica había robado su atención.

Al final terminaste yendo a la tienda de 24 horas, compraste un par de paquetes de sopas instantáneas algunas bebidas energéticas y par de botellas de zumo de fresa y sobre todo tus adorables cigarrillos, para la anochecer habías terminado tus tareas, alistaste tus cuadernos y libros tu uniforme limpio y abriste tu cartera para inspeccionar cuánto dinero te restaba pero fue ahí cuando sentiste que por un momento tu vida se acababa, pues después todo quedarte en hoteles, pagar comida rápida en restaurantes, tiendas y mini-superes tu dinero se había agotado solo te quedaban 3,000 yenes para terminar el mes, te levantaste de golpe de la cama y pensaste en ir a llamar a Yasu, pero entonces nuevamente le estarías causando problemas, suspiraste profundamente.

Tu: -Bien mañana saldré a buscar un trabajo de medio tiempo, no puedo seguir dependiendo de Yasu- levantaste tus brazos hacia el aire para relajarte y te fuiste a dormir ya que la mañana siguiente estabas dispuesta a conseguir un trabajo y seguir luchando para cumplir tu sueño.