Supernatural [Jarry] [Little Direction]

Ocho

Jade bajó con una maleta y Jesy con la otra, mientras que las demás chicas bajaban delante de ellas cuidando que no cayeran.

Los chicos, por otra parte, estaban sentados en los taburetes frente a la abuela Margaret, quien les contaba las fascinantes historias de su vida, historias que ya le había contado a Jade.

―Ya estoy lista ―anuncia Jade entrando a la cocina con las chicas.

―Shh ―dicen todos al unísono―, viene la mejor parte.

―... cuando llegué al parque, me encontré con el amor de mi vida ―sigue contando la abuela.

―¿El abuelo de Jade? ―pregunta Niall.

―No, con él me casé después. Con el que me encontré era con mi ídolo.

Los chicos asienten comprendiendo.

―Bueno, les sigo contando. Él estaba con su novia y yo me acerqué a él para pedirle un autógrafo.

―Al final se encuentra con mi abuelo y su ídolo les dijo que hacían una hermosa pareja pensando que eran novios siendo que ni siquiera se conocían ―termina Jade la historia y luego se va corriendo al salón al haber recibido miradas fulminantes de parte de los chicos.

La abuela se encoge de hombros y va tras Jade para despedirse de ella y de los demás, los cuales la siguieron a la sala.

―Que te vaya bien, mi niña ―le da un beso en la frente a Jade y después hace lo mismo con los demás―. Tengan, para el viaje.

A cada uno le pasa una bolsita con pastelitos y galletas dentro de ella, y, luego le pasa a Jade una caja de tamaño mediano llena de galletas. Ésta le da un último abrazo de despedida a su abuela y se va con los chicos.

Todos ya habían ordenado sus cosas, inclusive Niall, por lo que al llegar sólo cargaron el auto y, con mucho esfuerzo, subieron ellos para así ir al aeropuerto en donde los esperaba un avión privado para poder viajar a Londres.

―Wow ―dicen al mismo tiempo Niall y Jade al ver el avión.

Los demás ríen al ver su reacción, ellos ya estaban acostumbrados a ese tipo de cosas. Aunque no es que le gustaran mucho, preferirían poder vivir una vida normal fuera de los peligros a los que se exponen en su día a día. Los días que estuvieron en New York han sido los más normales de su vida, porque no se tuvieron que enfrentar a ningún tipo de enemigo o algo así, sólo a las personas de la escuela y a las diferentes materias que ahí enseñan, las cuales ya se sabían al derecho y al revés.

―Chicos, debemos subir ―les dice Liam a Jade y a Niall.

Ambos asienten como robots y siguen a los demás chicos hasta la entrada del avión.

―Que tengan un buen viaje, jóvenes ―dice la azafata a cargo cuando los chicos entran.

Todos responden con un gracias y luego van a sus asientos, los cuales son de a uno.

―¡Yo quiero ése! ―exclama Jade junto a Niall para luego correr al mismo asiento.

―¡Es mío! ―dice Jade sentándose.

―¡No! ¡Es mi...

Niall queda a mitad de la palabra.

Jade detuvo el tiempo.