Objeto 113.

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El Holder de la Rendición

En cualquier ciudad, en cualquier país, ve a cualquier institución mental o centro de reinserción social donde puedas ir por ti mismo. Antes de intentar obtener este Objeto, lleva cualquier otro que ya poseas contigo. Si no tienes Objetos, entonces cuando preguntes en la recepción por visitar al Holder, el trabajador ni siquiera te mirará, como si no estuvieras allí. Regresa e inténtalo otra vez cuando tengas contigo al menos un Objeto. También es posible que no sea el momento indicado para sobrellevar esta prueba, y tendrás que intentarlo de nuevo una vez hayas obtenido algún otro Objeto. Entonces ve al escritorio y pregunta por visitar a The Holder of the Surrender. Una mueca aparecerá en la cara del trabajador y se reirá, mientras te dice "¡Idiota. Pocos han sobrevivido a eso que quieres enfrentar!".

Después que termine de reírse, deberás ir a través de la puerta tras la recepción, una que tiene una placa que dice "Sólo Empleados". El encargado no intentará detenerte.

Luego de entrar por la puerta, te encontrarás en un pasillo muy oscuro. A medida que te adentras, deberás ir caminando a un ritmo constante. Tendrás que definir la velocidad a la que te moverás: Si vas muy rápido, deberás mantenerte rápido. Si vas más despacio, tendrás que ir lento todo el tiempo. Fallar en esto te producirá una muerte instantánea.

Al final del pasillo, habrán tres caminos. La ruta del medio te llevará ante el Holder. El camino de la izquierda te llevará de regreso a casa, pero ir por allí es experimentar un dolor más grande que cualquiera imaginable. El camino de la derecha te llevará a una muerte segura, sin embargo, será totalmente indolora y puede ser considerada como un destino más adecuado que el doloroso viaje de vuelta o el sufrimiento que considera adquirir el Objeto.

Si decides ir por el camino central, caminarás hasta ver un gran salón rectangular frente a ti. Estará un hombre sentado en una silla en medio de la habitación, rodeado de círculos dibujados con tiza en el suelo, uno por cada Objeto que tengas. Si tienes 5 Objetos, habrán 5 círculos. Si tienes 45, habrán 45 círculos.

Camina hacia el Holder. Prepárate, porque te gritará con una voz estridente y explosiva. Su exigencia es simple: deja el primer Objeto en el primer círculo. Si obedeces, y rindes el objeto al Holder, éste se irá, y tendrás que ir por él de nuevo. Si te niegas, el Holder levantará su mano e incontables, minúsculos anzuelos surgirán entre cada uno de tus poros. El dolor te hará pensar que en cualquier momento serás desgarrado completamente.

Si el dolor se detiene y no has sucumbido ante la agonía, o has clamado por que se lleve tu Objeto, él te sonreirá y podrás mantenerlo contigo. El proceso se repetirá hasta que te haya preguntado por cada uno de tus Objetos. Para aquellos que sean muy grandes, inmateriales, vivos, formen parte de ti o sea imposible llevarlos ante los círculos, el Holder te preguntará si quieres dejarlos sobre ellos. Si estás de acuerdo, el Objeto se perderá. Si no, serás torturado una vez más. Si permaneces fuerte y eres considerado lo suficientemente meritorio como para conservarlos, uno de los ganchos usado en tus muchas sesiones de tortura aumentará su tamaño hasta alcanzar el de un azuelo de pesca normal.

El anzuelo es el Objeto 113 de 538. Su único propósito es hacer que otros renuncien a Ellos.


Los 538 objetos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora