Día nuevo y espero que cosas nuevas. El fin de semana descanse bastante, como para tener fuerzas la semana que se viene por delante.
Pongo un pie fuera de la cama, y...esas supuestas fuerzas se quedaron no sé dónde y ahora mi cama me llama. No me di cuenta cuánto alcance a cerrar los ojos, pero los gritos llamándome me sobresaltaron, y me hicieron saber de mi atraso....perfecto para el inicio de la semana.
Salí de casa, sin desayunar y mis ganas de llegar dentro de buena hora al instituto eran muy pocas, y decidí por irme calmada, quizás mucho, pero no quería aparecer en medio de la clase, con todas esas miradas puestas en uno, por llegar tarde, preferible...llegar en el intermedio y hacer como si nada hubiese pasado.
Decidí sacar mis audífonos, y esta vez poner música, me percate que aún me quedaba casi media hora para deambular por las calles, y camine hasta una plaza pequeña, me tire en el pasto y disfrute de esa soledad, solo yo y mi música....
Los primeros rayos de sol de un día en su principio nublado, chocaron en mi cara, acerque el teléfono, y llego la hora de entrar al liceo.
Doblaba la esquina, y me extraño ver tanta gente del ultimo grado recién llegar al....
Mierda
¡Tierra trágame!
Olvide que los lunes los de último grado entraban recién en el primer intermedio, no quiero hiperventilarme, quisiera desaparecer ahora mismo, pero debo de entrar, el inspector noto mi presencia y yo...note la tuya.
Parecías como si trajeras la almohada pegada a ti, ese pelo tan desordenado se vería mal en cualquier persona, pero en ti era todo lo contrario.
Aparte mi mirada de ti, y mi paso aumento en su velocidad, seguí así, con la cabeza agazapada hasta pasar por la puerta de entrada, sabía que venias más atrás, pero solo hice como si nada, porque así debe de ser...creo yo.
Salude a mi grupo, hable de lo más normal, hasta que llego el toque de campana, fue hasta ahí en que me percate que tenía las manos algo sucias por la tierra, decidí ir al baño.
No me demore nada, y como es de costumbre el profesor llega algo retrasado, así que no tendría problemas con entrar a la sala. Abrí la puerta y me puse los audífonos, pero mi celular se cayó de mi bolsillo, me agache para cogerlo pero me quede congelada.
Salías al mismo tiempo que yo del baño, y por impulso agarre el teléfono rápido y me pare, en ese impulso choque contigo y tu....
