Algo que nunca olvidaras

¿Que fue lo que paso?

Hola:
Bueno esta es la segunda historia que Nate y yo escribimos juntos, esperamos que sea de su agrado. Que la disfruten.

Cap.1. ¿Que paso?

Había despertado gracias al olor del mar y el ruido que producían las olas al chocar con las piedras, espera espera dije ¿mar? ¿Yo que carajos estoy haciendo en la playa? Me levante rápidamente provocando que el dolor de cabeza aumentará, mire hacia todos lados hasta que note que no solo estaba en la playa sino que también me encontraba dentro de un auto, un auto que no era mio....

Rápidamente baje la vista para comprobar que mi cuerpo estuviera intacto, al hacerlo me asuste enormemente ya que únicamente llevaba una sudadera de chico, revise bajo esta encontrando que llevaba mi ropa interior por lo que me relaje un poco. Baje del auto mientras sostenía mi cabeza y me quede recargada en el auto a esperar a que mi bendito dolor de cabeza pasara. Al notar que el dolor no desaparecía decidí entrar al auto para buscar una aspirina.

-¿Que diablos estas haciendo?- escuche que alguien preguntaba a mis espaldas por lo que decidí voltear.

-¿Que haces tu aqui?- pregunte fastidiada.

-Te recuerdo que fuiste tú la que me busco anoche.

-¿De que hablas?- pregunte confundida.

-¿No recuerdas que paso?- pregunto Aiden molesto- ¡Maldición Scarlett!

-Oye oye cálmate, no es mi culpa.

-¿Como no va a ser tu culpa? Tu fuiste la que pidió que te sirvieran más.

-¿En serio?

-Ven vamos te llevo a tu casa.

-Espera.

-¿Ahora que?- pregunto Aiden dándose la vuelta, parecía molesto.

-¿Me dirás como es que termine aquí contigo?

-Si pero primero te llevare a tu casa, tus padres deben de estar preocupados por ti.

-¿Mis padres?- pregunte desconcertada ya que recordaba haberles pedido permiso para quedarme a dormir en casa de Carter.

-Realmente no recuerdas nada ¿cierto?

-Para serte sincera no.

-Bueno enana muévete.

Me acomode en el asiento del copiloto ya que Aiden tenía las llaves del auto y no quería conducir hasta casa, en primera porque no sabía en qué playa nos encontrábamos y en segunda porque ni siquiera traía zapatos.

-Oye- dije sin siquiera mirarlo.

-¿Porque estoy usando solo esta sudadera? ¿Y porque no llevo zapatos?- pregunte claramente molesta.

-Bueno, cuando empezaste a beber aun llevabas tu vestido pero cuando salimos de la fiesta por alguna extraña razón empezaste a quitártelo y lo dejaste tirado en el jardín.

-Bien eso explica porque no tengo mi vestido pero ¿Porque llevo solo una sudadera? ¿Y donde están mis zapatos?

-No planeaba llevarte en ropa interior a todos lados así que te di mi sudadera- puse cara de asco al saber que esa sudadera le pertenecía sin embargo no me queje.

-¿Y los zapatos?

-Esos te los quitaste cuando llegamos aquí, dijiste "me duelen los pies y no planeo que los tacones se atoren en la arena"- Aiden trato de imitar mi voz sin embargo fallo- antes de que me reclames, tus zapatos están en la cajuela.

-¿Y mi celular?

-En la guantera.

-Otra cosa.

-¿Que?

-Tu y yo.....

-No Scarlett no tuvimos sexo, solo te saque de esa fiesta ebria más no te viole.

-Gracias.

Después de haberme enterado de algunas cosas que habían pasado anoche y de donde se encontraban mis cosas el viaje fue tranquilo.

Ninguno de los dos hablaba, únicamente nos dedicábamos a escuchar la radio hasta que comenzó una canción que realmente me gustaba y a él también por lo que comenzamos a cantar juntos.

Aiden podría parecer el típico chico engreído, superficial, narcisista y poco amable pero la forma en la que se había comportado conmigo en la playa era muy diferente del Aiden que yo había conocido en la escuela.

-Scarlett- susurro sin voltear a mirarme.

-¿Que pasa?

-Aun te duele la cabeza ¿verdad?- Aiden parecía preocupado por lo que asentí- Toma- dijo entregándome una pastilla.

-¿Que es esto?-pregunte tomando la pastilla con mis dedos.

-Una pastilla ¿no es obvio?- respondió con sarcasmo.

-No gracias, no consumo drogas.

-¿Drogas?- Anden soltó una pequeña risa lo cual me desconcerto- Solo es una aspirina.

-Lo siento, creí que era.....

-¿Que clase de persona crees que soy?

-No se, tu dime. Me secuestraste ¿Que clase de persona crees que aparentas ser?- respondí con los brazos cruzados en mi pecho.

-Yo no te secuestre.

El auto se detuvo repentinamente llamando mi atención ¿Que es lo que acababa de pasar? Voltee a ver por el cristal dándome cuenta de que ya estábamos en mi casa, abrí la puerta y baje del auto rápidamente. Aiden hizo lo mismo que yo y me acompañó hasta la puerta ganándose una mirada de fastidio de mi parte.

-Ya te puedes ir- respondí cortante.

-No, tengo que ver a tus padres.

-Bien- abrí la puerta de la casa con la llave que se encontraba dentro de una de las macetas, al entrar pudimos notar que todo estaba destruido.

El árbol se encontraba completamente quemado al igual que los regalos, los platos estaban rotos al igual que la mesa, las sillas y algunos muebles se encontraban tirados por todos lados, no entendí que pasaba aquí, ambos nos adentramos todavía más en la casa en busca de alguien y al no encontrar a nadie decidí sentarme el la sala.

-¿Que fue lo que paso?- me encontraba realmente confundida.

-¿Que es lo ultimo que recuerdas?- pregunto Aiden bastante serio, era la primera vez que lo veía así.

-Solo recuerdo que les pedí permiso a mis papás para salir a la fiesta a la que me invitaron, me dijeron que tenia que llevarte y eso es todo.

-Bueno al menos ahora sabes que no te secuestre.

-Pudrete.

-Y antes de eso ¿que recuerdas?

-No mucho realmente.

Bueno hasta aquí este capítulo, esperamos fuera de su agrado.

Gracias por leer.