Síndrome de estocolmo EN EDICIÓN (8/30)

Capítulo 8

Desperté por que tenía la garganta mas seca que un desierto. Me levanté y baje por las escaleras con mis pies descalzos, sobre el frío de la cocina por un vaso de agua. Al llegar, vi a Laughing Jack mirando hacía la luz de la luna con el torso descubierto, estaba inmóvil, simplemente plantaba su rostro en nuestro satélite natural como queriendo analizarlo, como si le quisiera decir mil cosas y a la vez, ninguna.

Algo en Él me daba la sensación de que, al mostrarse tan aterrador en realidad demostraba que estaba sufriendo, que se ocultaba en una coraza.

El ventanal se hallaba casi al final de la cocina y  al parecer no había notado mi presencia. Tratando de hacer el menor ruido, tome una botella de agua del desayunador.

—Anna. —Susurró Jack y yo fingí sobresaltarme. No respondí —¿Por que no quieres hablarme? ¿Me tienes miedo? —Jack comenzó a caminar hacía mi.

—No es eso. —Susurré tratando de evitar su mirada que analizaba cada parte de mi cuerpo. 

Jack me rodeo y se planto justo detrás de mi a una distancia moderada —¿Entonces?

—Es solo que... —Trataba de formular una frase pero tener a Jack sin remera tan cerca hacía que me sintiera incómoda.

Jack bufó —¿Puedes decirme por que te secuestre? —Me pidió Jack.

—Para salvar la vida de mi hermana —Contesté segura.

Senti como Jack me tomo del brazo para girarme. Mis latidos se aceleraron—Incorrecto, te secuestré por que estoy enamorado de ti desde la primera vez que te vi. —Acepto en un susurro mirando directamente a mis ojos. Jack estaba enamorado de mi, no puede ser. No respondí y lo mire a los ojos. Se veía tan sexy con el medio rostro alumbrado débilmente por la luz de la luna y sin camisa

—No puede ser. —Susurré 

—Si puede ser. —Respondió Jack —Yo me enamore profundamente de tu madre hace mucho tiempo cuando la conocí en el bosque. —Comenzó a narrar con los ojos llorosos. Supongo que este recuerdo le duele mucho —. Y luego. —Suspiró— Me hice su amigo y ella me bateo, dijo que no volviera a acercarme a ella —Dijo con unas lagrimas cayendo por su mejilla —Pasaron los meses, supere a Giselle y luego te vi, jugando con Aria en el patio de tu casa. Te vigile por varios meses, hasta que no aguante y te secuestré —Completo tan cerca de podía sentir su abdomen bastante marcado —Te amo —Terminó y junto sus labios con los míos. 

      Cuando me beso sentí como que el era el indicado, el era el amor de mi vida. Un suave cosquilleo que subió por mi columna vertebral y también en mi estomago. Una sensación de protección y vulnerabilidad al mismo tiempo. Una sensación tan linda que no se puede expresar 

—Jack... —Susurré sobre sus labios —Creo... que también... te amo

—Debes estar segura de eso —Dijo Jack

—¿Como? —Pregunté

—No lo se, solo lo sientes —Dijo y beso mi cabeza —Me iré a dormir —Dijo y se fue 

Me quede unos minutos observando a la nada y pensando en lo cruel que trato mi madre a Jack. El no es malo, solo que le hicieron mucho daño. Imité la acción de Jack minutos luego. Me dormí tocando mis labios y pensando en Jack.

¡Gracias por leer!