Autismo ↠ Rubelangel ↞

s e i s

Luego de que Miguel se vaya, dejándolo pensativo, volvieron las voces.

↠No le vas a creer, ¿o sí?↞  

¿Por qué no creerle? 

↠Rubén, nos conocemos. ¿Por qué le gustarías?↞  

¿Por qué no? 

↠Tiene una novia, seguramente muy guapa. Ha de saber cuantos años llevan. ¿En serio crées que la cambiaría por tí?↞  

Repito, ¿por qué no? 

↠La novia de Mangel no es una puta enferma, por ejemplo. No tienen que estar pendiente por si se quiere suicidar, como tú.↞ 

No tiene nada que ver...

 ↠¡Claro que sí! ¿Piensas que la dejaría por un puto enfermo suicida como tú? ¡Por favor, Rubén! ¡Ni siquiera sabes hablar sin tartamudear!↞

No se dió cuenta cuando comenzó a tirar las cosas de sus estantes, tiró sus figuras de colección, los juguetes de su gata, sus comics, todo. Comenzó a tirar una vieja pecera que tenía en una de los estantes, vacía claro esta. Ésta se rompió al impacto, creándose un montón de cristales en el suelo. 

↠¡Hazlo! ¡A ver si tantos cojones tienes!↞ 

Tomó uno de esos cristales y lo pasó por su muñeca, creando un corte, para repetir esa acción repetidas veces.

↠¿Ya ves cómo nunca le podrías gustar?↞

La sangre caía al piso, dejando un camino de gotas hasta llegar al baño, donde limpió su muñeca y la envolvió en una gasa. 

↠Estás malditamente loco.↞

Se miró al espejo, con asco, con odio. Nunca había visto a alguien que se odiara tanto. Comenzó a llorar, de nuevo. Se tiró del cabello, arrancándose algunos de la raíz.

Las voces pararon. Logró sentarse en su cama, calmado, esto era lo que necesitaba, soledad, que su madre no esté ahí. 

''¿Por qué no puedo ser normal?'' Pensó Rubén, para después de unos minutos de seguir sollozando, dormirse. 

~

-''¡Rubén! ¡Despierta!'' Exclamó. ''¡Tío que son las tres de la tarde!'' Lo despertó Mangel.

-''Déjame.'' Rubén estiró el brazo hasta Miguel, para acallarlo.

-''Rubén, ¿qué es esto?'' Comentó temeroso Mangel, mientras le tomaba el brazo suavemente.

-''N-nada. Déjame.'' Trató de alejar su brazo. 

-''Siéntate.'' Se sentó en la punta de la cama, llevando con él a Rubén. ''Déjame ver.''  Le descubrió los cortes, sacó la gasa y la puso a un lado. ''R-rubén...'' Pasó las yemas de sus dedos por los cortes.

-''D-dejalos. N-no son nada.'' Miguel aflojó el tacto. Lo miró sorprendido.

-''¿P-por qué?''  Tomó de nuevo su brazo. ''¡Explícamelo! Porque no lo entiendo.''  

-''¿T-tu sabes l-lo que es t-tener una maldita e-enfermedad? ¿Q-que en la escuela t-te traten como m-mierda por ser diferentes a e-ellos? ¿No? ¡E-entonces nunca l-lo entenderás!'' Mangel, sorprendido por sus palabras, y por su frase más que nada, comenzó a darle delicados besos a su muñeca, rozando los labios con la pequeña cáscara que se estaba formando. ''¿Q-que haces?''

-''Prométeme que no lo volverás a hacer, no quiero, no.'' Siguió dándole besos en esa zona, hasta que se incorporó y lo miró. ''No quiero que te hagas más daño, ¿me oíste?''  Rubén medio asintió, casi no se notaba. ''Vale. ¿Que quieres hacer?'' 

-''N-no lo sé.'' Levantó los hombros. 

-''Vé pensando en algo mientras yo hago otra cosa.''  Sacó su pequeña libreta y su boli, para comenzar a anotar.

''Se ha cortado. Es la primera vez que lo veo con cortes. Supongo que no lo ha hecho nunca. ¿Qué lo ha llevado a eso? No lo sé. Me ha dicho que no lo hará más. No sé si lo cumplirá.

Sus frases son cada vez más largas, y deja que me acerque a él. Creo que es un avance.''

Cerró su libreta, y posó los ojos en Rubén, quien tenía una sonrisa de niño, cómo cuando quieres convencer a alguien. 

-''¿Ya decidiste?'' Le sonrió.

-''¿P-pelis?'' 

-''Lo que tu quieras.'' Puso el DVD a funcionar, y puso la primera película que vió. En este caso, un viernes de locos. 

Se acostaron uno en cada lado de la cama, y comenzaron a ver la película, hasta que se quedaron dormidos, ambos.

~

Rubén despertó a eso de las 10 de la noche, y notó que Miguel lo abrazaba de la cintura, apegándolo a su pecho.  De a poco se giró hacia él, mirándolo cara a cara. ¿Por qué este chico estaba durmiendo con él y no con su novia, como debería ser? O peor, ¿por qué se sentía tan bien con él en sus brazos? 

Pero no duró mucho, comenzó a sentir pánico, se apartó rápidamente de los brazos de Miguel y se tiró al suelo, escondiéndose en una esquina y abrazó sus piernas con sus brazos.

↠¡Ni se te ocurra enamorarte de él! ¡No te corresponderá!↞ 

¿Cómo lo sabes? 

↠¿Estás de coña? El chaval está aquí sólo porque tu madre le paga. ¿Y si te suicidas de una vez así le sacas un peso de encima al pobre tío?↞

-''¡Haz que pare!'' Para... Por favor.

↠Hazlo, nadie lo notaría.↞ 

-''¡P-para, por favor!'' ¡Déjalo! Mangel se levantó asustado, y corrió hacia donde estaba él.

-''¡Cálmate Rubén!''

↠¿Crees que a él le importara? ¡JAJAJAJA!↞ 

-''B-basta, ¡basta!'' Tapó sus oídos.

↠No puedo creer que te tragues la historia de el tipo que deja a su novia por alguien que se daña a sí mismo. ¿Que tan retrasado crees que es Mangel?↞  

-''Por favor... M-me haces daño.'' Comenzó a sollozar más fuerte, hasta que sintió sus labios chocar con otros, mientras  Mangel movía sus labios, las voces se hacían más lejanas, más inentendibles. 

-''Rubén, escuchame. Siempre voy a estar aquí, ¿sí? No temas, no los escuches. No tienen razón.''

Rubén lo miró por unos segundos, que en realidad parecían minutos, y lo abrazó. Lo abrazó porque quería y porque lo sentía necesario. 

-''¿P-podrías...'' Enrojeció. ''besarme o-otra vez?'' Mangel sonrió, por la escena tan tierna que tenía delante de sus ojos. 

-''Eso no se pide, Rubén.''

-''L-lo sient...'' Lo interrumpió, pero no con palabras, sino con sus labios, formando otro beso, de aquellos que volvían cada vez un poquito más loco a Miguel. 

Rubén sonrió. Sonrió porque Miguel valía la pena, valía la pena superar su enfermedad por él.

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En este capítulo me ayudo una amiga, llamada Julieta :).

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Un besoooo, y feliz navidad!