Chanyeol se sorprende al sentirlo tan cerca, pero aún así pasa un brazo por la delgada cintura del chico con fuerza para pegarlo más a su cuerpo y nunca más soltarlo. En ese mismo instante se prometió cuidarlo y protegerlo por siempre aunque esto le cueste la vida.
Juntos salen del agua despacio y sin prisa, la eternidad les espera. Su piel es suave y muy fría como si de un muñeco de porcelana se tratase, su cuerpo demasiado delgado carece de peso, lo que facilita todo a Chanyeol y a la vez le preocupa
—Todo va está bien ahora —se repite para sí mismo, a la vez que una tenue sonrisa se dibuja en su rostro.
Todo fue una conmoción cuando Chanyeol llegó al contenedor cargando entre sus brazos el frágil cuerpo del arma más temible que pudo estar sobre la tierra antes de la guerra. Todos no podían evitar dar un paso atrás cuando le veían. A pesar que este apenas se podía mantener consciente, todos le tenían miedo. Lay fue el único que nunca le temió, al contrario se fascinó por su gran poder, el hecho de que aun siguiera vivo y se esforzó por que continuara con vida.
—Chanyeol... —un dulce susurro lo saca de sus pensamientos y mira a dónde proviene la voz, topándose de frente con un su par de ojos adormilados mirándolo fijamente— ¿en que piensas? —pregunta despacio acurrucandose en su pecho.
—En ti...—responde roncamente acariciando su cabello.
Han pasado dos años desde que lo trajo al Contenedor, ya es capaz de andar, hablar fluidamente con un gran sentido del humor y lo mejor es que ya nadie es capaz de tremerle, pero aún no logra dormir bien y sufre ataques de pánico ocasionales que ponen en peligro a todos en el contenedor ya que pierde el control de sus dones creando ilusiones ópticas en todas partes. Chanyeol es el único que puede devolverle y mantenerlo en paz, es por esto que Baekhyun se niega a apartarse de él. Cada uno se juró al otro amarse por lo que les pueda quedar de vida.
Baekhyun ha demostrado ser más una maquina que un humano, nadie es capaz de descifrar su edad exacta aún, pero creen que fue creado entre los años 60 y 70, duplicando así la edad de Chanyeol. A pesar de tener la apariencia de un joven adulto y la mentalidad de un niño, Baekhyun ya ha vivido la mitad de un siglo. En las últimas pruebas demostró signos de envejecimiento lento, lo que no lo hace inmortal como todos creían, solo envejece mucho más lento que un humano. Chanyeol aún no es capaz de explicarle que no podrán estar juntos por siempre y eso le aterra.
Chanyeol lo abraza y finge dormir para evitar la típica sección de preguntas que Baekhyun acostumbra hacer antes de dormir, no por que no le guste responderlas, si no por que hay preguntas que no está preparado para responder ahora.
—Se que no duermes —dice con voz tranquila pero aún así Chanyeol sigue fingiendo
—¿Tienes un nombre? —pregunta el Chanyeol del pasado. Mas el chico sentado sobre una de las camillas del hospital con las piernas cruzadas solo lo mira sin emitir ningún tipo de respuesta— ¿Eres capaz de entenderme? —pregunta utilizando el pobre inglés que aprendió en sus años de escuela pero tampoco recibe respuestas.
Kyungsoo se encuentra a su lado leyendo la escasa información médica que han podido recopilar en unas horas.
—No es capaz de responderte a pesar de que te entienda perfectamente... —murmura Kyungsoo— él no sabe que puede hacerlo, él cree que es un objeto no algo vivo. Deja a un lado la carpeta y se dirige al chico —Hay que programarlo para que sea una persona, creo que será sencillo —Dice mirándolo a los ojos.
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Power
Science FictionKi3 es el experimento más poderoso jamás producido por el hombre y le pertenece al Vaticano que no todos conocemos. Trinidad, como es temiblemente llamado por sus cuidadores, es cociente del alcance de su poder y de las mil y un formas que tiene de...