Una pelirroja inesperada.

Suripanta como la tía.

Todavía estoy en mi trance después de haber visto a mi hermanita con el muy pendejo de Ari, es decir, ese tipo siempre tiene putas en sus brazos pero ahora tenía a mi Sherlyn, maldito hijo de puta. 

Bueno, pero para no ser descortés y no aclarar lo sucedido después de que encontré al hijo de perra de Ari manoseando a Sherlyn haciendo que termine en una comisaría en estos momentos y, seguramente, Ari en un odontologo.  Les diré:

*una hora antes* 

-¿¡SHERLYN!? -les grité en sus caras. Ambos están pálidos por haberme visto, pero no comparados a cómo me encuentro yo que los he visto. 

Mi hermana se levanta de las piernas de Ari y viene a mí para abrazarme, pero antes que se acerque la empujo con delicadeza lo más lejos que puedo. Observo un momento el suelo reteniendo mi ira mientras cerraba mis puños blancos de la sangre reprimida. Sherlyn intenta acercarse nuevamente a mí y esta vez que lo hace me da una bofetada haciendo que mis ojos se abran como plato de la admiración a que se haya atrevido a pegarme. 

-¿¡Qué diablos haces!? -le grito en la cara y puedo notar en la suya que está igual de furiosa. 

-¿Qué? ¿Vendrás a reclamarme ahora? ¡Por favor hermanito! No eres nadie para reclamarme después de haber ocultado a todos que tenías una... -y antes que termine la frase, cubro su boca con mi mano. 

-Calla Sherlyn, yo no oculté nada, también me ocultaron las cosas. Además sabes que este tipo es un maldito mujeriego que juega con las mujeres y nunca voy a permitir que mi hermanita sea un juguete más. -digo furioso y ella solo me miraba algo avergonzada. Lo de menos.

-Ari me gusta... -dice en voz baja. Lo que me faltaba, mi hermana enamorada de un mujeriego.

-Hermano, no pensaba jugar con ella, sólo pasábamos un buen rato juntos. Ella es muy linda y no la lastimaría. -dice Ari y las ganas de partirle la cara.

-¿Qué pensaban hacer? -pregunto intentando sonar lo más tranquilo posible.

-Pues pensábamos hacerlo, me lo pidió porque no quiere ser más virgen y es la única virgen de su grupo.

Empiezo a reír como loco, el muy hijo de puta usó su sinceridad ante todo y me confesó que se acortaría con mi hermana. ¿Acaso lo rubio lo vuelve idiota? Ni que permitiera que mi hermana perdiera la virginidad con él.

Me acerco a Ari con una sonrisa de oreja a oreja y le doy un puñetazo rompiendo su nariz.

-En tus putos sueños desvirgarás a mi hermanita. -agarro a Sherlyn del brazo con brusquedad y la saco de la fiesta. En todo el camino fui golpeando en el rostro a todo aquel que miraba a mi hermana como baboso, pero, quien diría que me pasaría esto, pero golpee a un policía.

*presente*

Bien, eso fue lo que pasó y ahora estoy tras las rejas, mi hermana está haciendo lo posible para sacarme de aquí haciendo llamadas a todo el mundo hasta que por fin logra, con ayuda de mi jefe, sacarme de aquí.

Íbamos en mi auto en un gran silencio hacia mi departamento, la verdad sigo muy molesto y no quiero dirigirle la palabra, pero me dijo que no podía volver a casa de mamá por ser muy temprano todavía. No me queda más de otra que llevarla conmigo.

Mis pensamientos me empiezan a llevar en el estado de Ally y mi curiosidad por si Cristal no incendió el departamento, es decir, es la primera vez en 5 años que la dejé sola, bueno, no está sola en realidad lo que preocupa más ya que se quedó a "cuidar" a mi hija.

Mi hija...

Llegamos al pasillo de entrada y se escucha una música fuerte proveniente de mi hogar, Sherlyn me mira extrañada y yo solo paso con frustración mis manos por mi rostro. Joder Cristal...