Cold Body,Warm Heart

Capitulo 30. Nada es facil

¡No era justo! ¿Por qué el hombre de la luna te hacia esto?

No sabias como decirle a la Reina de lo que te había dicho la Madre Naturaleza.

-¡10 años!- dijiste casi en un susurro- ¿Por qué nos tiene que pasar esto?- Miraste el cielo nocturno con frustración -¡¿Qué te hice?! ¡¿Por qué nos hace esto?! ¡no es justo!

Tu rostro estaba deformado por el coraje, tristeza e impotencia.

-Elsa...-dijiste en un susurro que se llevo el viento.

Te quedaste sentado en una de las ramas del árbol, pensando e imaginando ¿Qué pasaría cuando le diera la noticia a Elsa?

Observaste las últimas estrellas en el cielo ya que estaba amaneciendo; no le quitabas la vista a los rayos del sol que salía del horizonte.

Suspiraste hondo

Ya tenias una decisión....si esta sería la última vez que verías a Elsa para luego no verla por 10 años tendrías que pasarla como tu mejor sabes hacer....divirtiéndote.

Era otro día en Arendelle y tú te dirigías al hogar de tu amada, escuchaste risas entonces la viste que estaba con la niña en el patio.

Te detuviste en el árbol donde te habías escondido.

Observaste como Julianna corría riéndose traviesamente mientras unos de los sirvientas la seguía; sospechaste que la niña había hecho alguna travesura....sonreíste por eso.

-¡Julianna! Ya deja de molestar a los pobres sirvientes- dijo la reina mientras sonreía

-¡lo siento mucho mami!- dijo esta sin ningún rastro de arrepentimiento, Elsa rodo los ojos ella sabía que su sobrina no lo decía enserio.

-¡mami!

-¡dime!

-¿La princesa pudo por fin reencontrase con el espíritu del invierno?

Viste que la cara de Elsa se sorprendió para luego sonreír y agacharse a la altura de la niña.

-es verdad, esa historia aun no tiene un final....

La nina asintió

-y ¿entonces? ¿Qué paso con la princesa?

-ella...

-¡Majestad!

Observaste que unos de los sirviente apareció e informo algo emocionante ya que la niña salió corriendo emocionada así quedando Elsa sola en el patio; ahora era el momento de sorprenderla.

-¡sé que estas aquí!

Bueno eso creías, saliste de tu escondite y abrazaste a la chica por la espalda.

-¿Cómo sabias que estaba aquí?- preguntaste mientras ponía tu cabeza en el hombro de ella

-¡Porque te sentí!- fue su única explicación- ¡siempre te siento!

Tus ojos te empezaron a picar por las lágrimas....

-Elsa...-susurraste

Ella se separo de ti y cuanto te vio se preocupo

-¿Qué sucede, Jack?- dijo mientras te limpiaba la lagrima traicionera que te delato

-¡tengo que decirte algo!

-¿Qué ocurre?- pregunto ahora más preocupada

-¡aquí no!- la cogiste de las manos- ¡ven conmigo!

Elsa te miro sorprendida y extrañada...

-¡Elsa!

Ambos vieron a la mujer embarazada que venía con la niña en brazos y un hombre robusto a su lado.