Estaba sentada junto a mi amiga violeta, tratando de descifrar la nota que me dejaron mis padres el Lunes, en el refrigerador.
- Pues no le entiendo a esta nota- dije y tire la nota al suelo, el collar soltó un brillo que rápidamente se apago. Una alarma empezó a sonar, las puertas y ventanas se cerraron de golpe, las cosas empezaron a moverse, violeta asustada me abrazo muy fuerte...
En ese momento el refrigerador se movió, dejando ver una puerta al sótano.- Nikki, ¿Tienes sótano? - pregunto aun temblorosa.
- Eso parece... ¿vamos a ver?
- No yo no iré para allá - dijo asustada.
- Anda vamos... Si pasa algo yo te protegeré.
- ¿Enserio?
- Para eso están las amigas.
- Esta bien... Al parecer que si seras una buena detective - dijo intentando librarse del miedo.
En ese momento la puerta principal se abrió y entraron mis padres, haciendo que las puertas y ventanas se abrieran y el refrigerador se cerrara. Violeta aun asustada no paraba de abrazarme.- Hola... Mamá, hola papá - intente actuar normal pero Violeta me delataba. No creo haberles convencido porque tenían una cara de preocupación.
- ¿Que te pasa Querida?, ¿Estas bien?- dijo mi madre asustada.
- Nada, estoy bien.
- Hay que tener cuidado - dijo mi padre un poco preocupado pero tenia una mirada fría y calculadora.
- Si, papá... - paso apenas medio segundo para que yo me incomodara - Me tengo que ir, tengo cosas que hacer... ¿Verdad violeta? - dije y la mire y me di cuenta de que ella seguía abrazandome.
- Si - si dijo ella ya un poco mas calmada y dijo de abrazarme.
- Bueno... Adiós - dije y tome de la mano a Violeta, empecé a subir las escaleras.
Al llegar a mi habitación solté a violeta y me deje caer en la cama, mientras ella en el sofá tratando de entender lo que paso, pasaron unos minutos cuando alguien habló.
- Oye Nikki, desde que me dijiste del sueno, he sonado lo mismo
- ¿Como?, si apenas hoy en la cafetería te dije.
-Al llegar a casa me quede dormida.
- ¿Y que soñaste?
-Estaba en una cámara de seguridad, jugando con otros niños y después todos corrían, mi padre me cargo y le tomo la mano a un niño de cabello negro y ojos azules...
- Se parece a mi sueño.
Pasamos la noche despiertas, tratando que la puerta se abriera, pero no logramos nada, pisamos cada rincón, movimos cada objeto pero sin respuesta alguna.
El día de mañana es la cita con Alex, estoy muy emocionada ¿A donde iremos?, ¿Sabrá donde vivo?.
Mejor le llamo a violeta, !!Iremos de compras!!.
Tome el teléfono y comenzó a marcarle, espere 1 minuto para que ella me contestara.- Bueno ¿Quien habla?
- violeta soy yo Nikki.
- Hola Nikki ¿Como estas?
- Muy bien, ¿Que te parece si vamos al centro comercial?
- Si estaría genial, nos vemos allá.
- Okey, te veo allá.
Después de media hora llegamos a un tienda de vestidos preciosos, no aguante mas y entramos a la tienda.
- Mira Nikki, este vestido esta precioso -Violeta me mostró un vestido plateado con un cinturón dorado y un del mismo color, el vestido me llega hasta la rodilla.
- Este es hermoso, violeta mira este vestido te quedaría perfecto para tu cita con Barnie -Dije y le mostré un vestido rojo con un cinturón negro.
-!!Es Barry!! - grito al momento en que enseñe el vestido.
- Esta bien, pero pruebatelo - dije alzando el vestido para que lo viera.
-Esta bien, pero tu este - dijo mostrando un vestido, lo tome y me fui al vestido, no tarde mucho en ponerme el vestido, pues ella salio al mismo tiempo que yo, se veía hermosa, solo que faltan unos zapatos y accesorios.
- Nikki, te vez hermosa.
- Tu también violeta, combina con tu cabello y tus ojos.
- Solo faltan los zapatos.
- Lose, vamos -fuimos al mostrador y compramos los vestidos. Salimos de la tienda y nos dirigimos a la zapatería, que estaba cerca de la tienda de vestidos, al entrar Violeta fue directo a unos tacones, en cambio yo me fui por unos zapatos con muy poco tacón de color plateado y los compre y violeta se compro unos rojos con tacón. Salimos de la tienda y nos despedimos.
-Adiós y suerte con tu cita, con Barnie - Dije despidiendome.
-Es Barry, pero gracias y suerte a ti también.
Llegue a casa y subí a mi habitación, al tocar mi cama, apague la luz y me quede profundamente dormida...