FUTURO

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FUTURO

Hoy desperté y me tenía q meter a bañar rápido Tristán no tardaría en llegar por mi teníamos nuestra primer cita con el ginecólogo.

Después de despedirnos de Nana, salimos directamente al consultorio ya allí estábamos en la sala de espera, miraba a varias señoras ya con sus vientres abultados y me imagine como me veria yo con esa tremenda barriga, recordaba que solo hacía unos meses en que no quería saber nada de Tristán y ahora estaba con él en un consultorio y con un hijo fruto del amor que nos teníamos dentro de mi ser, el cual aún no lo conocía, ni siquiera lo sentía moverse y aun así ya tenía todo mi amor.

La secretaria nos llamó por mi nombre lo que me sorprendió es que anunciara como la señora Mendoza, nunca lo había escuchado y la verdad se escuchaba muy bonito, no pude evitar sonrojarme, me levante y tome de la mano a Tristán estaba algo nerviosa no tenía hermanas ni amigas que tuvieran niños para saber que me esperaba en ese consultorio.

Entre en el consultorio un cuarto amplio para mi sorpresa no era de color blanco como en otros lugares a los que he ido, tenía un color tipo azul turquesa pero más clarito, estaba lindo el lugar te daba algo de confianza, después de unos minutos entro el doctor, después de preguntarme mis datos personales y preguntarme cuando creíamos que habíamos quedado embarazados, sacamos la cuentas y en efecto tenía ya 6 semanas de gestación, nos hizo pasar a otra habitación que estaba contigua del consultorio me recostó en un mueble en el que íbamos a ver por primera vez a nuestro pequeño o pequeña, me levanto poco la blusa y me empezó a poner una especie de gel que estaba algo fría, y luego me puso un aparatito que fue pasando por mi vientre que aún no mostraba señas de mi estado, lo primero que mire fue una especie de circulito más bien se parecía más a un pequeño frijolito, y se le veía como latía su corazoncito, enseguida el doctor prendió las bocinas y se empezó a escuchar sus latidos, no pude más y se me empezaron a escapar las lágrimas de felicidad, sentí que Tristán me apretaba la mano y cuando gire para verlo el tenia las mismas lagrimas que yo.

El doctor nos explicó que estaba en perfecto estado, que teníamos que estar viéndolo cada mes para estar al pendiente de su desarrollo, me receto unas vitaminas para reforzar su crecimiento.

Salimos del consultorio más que contentos, lo primero que quería hacer era mostrarle el ultrasonido que nos había dado el doctor, así que le propuse a Tristán invitar a cenar a nuestros padres, estaba muy emocionada todo estaba pasando de prisa y no era la única, mi madre estaba más que encantada ya estaba casi preparando el baby shower, pero antes teníamos que preparar una boda y si quería que no se me notara la barriga tendría que hacerlo en menos de dos meses, siempre había soñado con mi boda de ensueño pero nunca imagine que el paquete vendría con un pequeño o pequeña.

El día siguiente me reuní con una organizadora porque realmente no me sentía capaz de preparar todo en tan poco tiempo,  habíamos decidido hacerlo a medio día y queríamos al aire libre, ya que me había recomendado el doctor descansar lo más posible para que no tuviera ninguna complicación.

Habíamos estado yendo a ver varios jardines no había encontrado ninguno que me hiciera sentir que fuera el lugar especial, Tristán no me había podido acompañar pero estábamos todo el día en contacto le mandaba fotos de los lugares, él me decía que con que a mí me gustara era más que suficiente, quería darme la boda de ensueño que me merecía.

Ya era de noche llegue a la casa y mi nana ya me tenía un sándwich y un vaso de leche me decía que tenía que tomar mucha leche para darle calcio a mi pequeñito, ella estaba igual o más entusiasmada que mi mamá.

Después de cenar me dirigí a tomar un baño relajante, Tristán no tardaría en llegar y aunque me gustaba   cenar con él, ahora no lo podía hacer me prohibió estrictamente esperarlo para cualquier comida me decía que no quería que me traspasara que no era bueno para mí ni para él bebe.

Después de varios días por fin encontramos un jardín muy mono, era pequeño perfecto para lo  íntimo que queríamos que fuera la recepción, también ya habíamos encontrado los centros de mesa perfectos llevaban una rosas color quemado, eran sencillos pero elegantes a la vez, el banquete todavía teníamos que ir a la prueba del menú, esa la habíamos agendado en dos días en donde estaríamos los siete, mis padres, mis suegros, mi nana y nosotros era buena oportunidad para degustar una buena comida y quería las opiniones de todos quería que ese día fuera perfecto.

 También tenía cita al día siguiente en una tienda de novias, veía en mi mente el vestido que quería llevar ese día pero sabía perfectamente que tenía que medírmelo y sobre todo vérmelo puesto para estar completamente segura.

Llegamos mi madre y yo a la tienda, allí me esperaba mi suegra y una de las empleadas, enseguida me hicieron pasar a un vestidor allí ya tenía varios vestidos  me dijo que mi suegra había pedido los modelos para que me los midiera.

La verdad no podía quejarme mi suegra tenía un muy buen gusto empecé con uno en corte de sirena  en color perla, tenía mucho tul en la parte baja, la verdad no me sentía muy cómoda con ese, sentía que no me podía mover tan fácilmente como quisiera, después de varios modelos me enseño uno de la nueva colección de la diseñadora Monique Lhuillier que era mucho mejor que el que tenía en mis sueños era un vestido increíble en color champagne era estraple con una cintilla en la cintura que estilizaba mi silueta, aun no se me notaba el embarazo y para la fecha de la boda tampoco así que eran muy pocos los arreglos que tenían que hacerle.

Ya tenía casi todo ya solo esperaba con impaciencia la hora estelar.

LA FELICIDAD NO SIEMPRE ESTA DONDE LA BUSCAMOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora