Capítulo 3

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***

BaekHyun giraba sobre su silla mientras leía los reportajes que habían ido a parar a su despacho esa mañana, en un acto sumamente infantil. KyungSoo lo observaba desaprobando sus acciones, pero sin decir nada al respecto. Su jefe finalmente se había tranquilizado y sabía que la última plática que había tenido con ChanYeol había influido bastante en eso.

La semana había estado tranquila, no había ninguna noticia nueva de plagio y eso mantenía tranquilo al castaño. Quizá ChanYeol se había rendido y por eso había desistido de robar sus preciadas noticias, quería creer eso y que el bastardo lo dejaría en paz nuevamente. Aunque la verdad no sabía cómo se sentía al respecto, una parte de él estaba más serena pues podría seguir su vida tal como lo había estado haciendo, pero otra parte de él, seguía afectado por haber visto a ChanYeol y haber reaccionado de la misma manera como lo había hecho en el pasado.

BaekHyun ciertamente recordaba al gigante a diario, cuando bajaba la guardia y se permitía ser débil. Su relación con el peligris resultó ser un tanto confusa, porque nunca supo si realmente se pudo considerar aquello como una relación, pero le había marcado significativamente.

En aquel entonces, ChanYeol llevaba su cabello al natural, en un color negro que no dejaba de sentarle bien, aunque BaekHyun debía admitir que el plateado cabello que el alto llevaba en la actualidad lo hacía verse mucho más atractivo.

La sonrisa del alto era algo que siempre le hacía temblar y no tardó mucho en caer en las redes de ChanYeol. Claro que BaekHyun no era estúpido y también tenía sus encantos, de los cuales el pelinegro no pudo escapar tampoco. De alguna manera, ambos se complementaban y a pesar de ser de televisora contrarias, siempre buscaban la manera de ayudarse mutuamente.

ChanYeol resultó ser una persona bastante intensa, con pensamientos profundos y lleno de sorpresas. BaekHyun supo que el tipo seguía trabajando en el sector del río Han por voluntad propia, habiendo rechazado un ascenso bastante atractivo como reportero de noticias. No era que a ChanYeol le molestase estar enfrente de la cámara, solamente no le interesaba aquel mundillo televisivo.

Era estúpido, ambos lo eran porque ninguno de los dos se percató que ambos eran los dueños y herederos de las televisoras para las cuales decían trabajar. BaekHyun se dio cuenta de eso de mala manera, y por ende, no supo manejar la información.

BaekHyun se encontraba trabajando en altas horas de la noche en la comisaría, mientras corría detrás del inspector para que le diera detalles sobre el asesinato que había ocurrido un par de horas atrás cerca de un suburbio de la región, ganándose una ostia con la puerta cuando se cerró justo enfrente de su rostro. Escuchó unas voces provenientes del pasillo, las cuales reconoció casi de inmediato.

No planeaba escuchar la conversación ajena, tampoco planeaba esconderse por detrás de la máquina de sodas que yacía unos centímetros por detrás de ambos individuos. Realmente no lo hubiera hecho si no hubiese escuchado aquella frase que ganó toda su atención y curiosidad.

—¿Así que piensas hundir a BHB Corp.? —dijo YiFan, uno de los subordinados de ChanYeol.

—¿Tendría por qué? —preguntó desinteresado.

—Pues deberías.

—¿Con qué motivo?

—Es tu mayor competencia. Deberías empezar a pensar como el jefe. —criticó.

—Deja ya tú esa mierda. —comentó con un movimiento de mano, restándole importancia.

—En serio, ChanYeol. Eres el heredero menos competitivo que conozco.

Siempre Implícito [ChanBaek / BaekYeol]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora