-Ashley, tenemos que hablar sobre nosotros- Suspiró el azabache mientras rascaba su nuca, miraba nervioso el rostro de la chica esperando que esta no reaccione de una manera escandalosa, pronto se dió cuenta de que su muy ruidosa y chillona novia no tomaría tan bien las palabras que él estaba a punto de decirle así que rápidamente sus pensamientos pasaron de esperar que su novia reaccionara bien a idear planes para salir de aquel lugar antes de que la fémina armara un alboroto.
-Marshy, el "tenemos que hablar" siempre es algo muy serio y conozco lo que viene después ¿Acaso vas a terminar conmigo?.
-¿Qué comes que adivinas? ¡Bingo, tenemos aquí una ganadora!- Dijo sonriente y con algo de incomodidad reflejado en su rostro.
-Marshall ¡Deja de bromear por una vez en tu maldita vida! ¿De verdad estas terminando conmigo? ¿¡Conmigo!? ¿Qué pasó? ¿Acaso te conseguiste a otra? Sinceramente eso es de esperarse viniendo de ti.
-¡Vamos, Ashley! No puedes enojarte, esto nos beneficia a ambos, tu puedes acostarte con todos los chicos que quieras sin el miedo a que yo me entere, es decir ¿No te tranquiliza por fin pensar que puedes tener sexo con un chico sin preocuparte que yo podria darme cuenta de eso por primera vez en dos años?.
-¿¡Cómo te atreves Marshall Lee, ahora me estás llamando perra!?.
-Ya no tienes porque negarlo, hasta aquí llegó lo nuestro, si quieres aún puedes ir a apoyarme en la batalla de bandas.- Se levantó de su asiento y caminó hacia la salida.
-¡Eres un estúpido!.
-¡Tal vez, ah, y tu pagas!- Corrió fuera del lugar una vez terminó aquella oración, por primera vez en dos años se sentía libre, había buscado la forma de terminar con su novia en demasiadas ocasiones, ocasiones que por algún motivo terminaban siendo interrumpidas.
Caminó tranquilamente hacia las residencias las cuales sorprendéntemente -algunas- eran mixtas.
Escuchaba el relajante sonido de la canción que llegaba a sus oídos la cual fluía gracias a los audífonos que usaba en ese momento. Se relajó un poco más y cerró sus ojos mientras mantenía aún su sonrisa.
De imprevisto, sintió un golpe en el pecho y pronto escuchó un quejido, en el suelo yacía aquel perfecto chico vestido de rosa que había conocido esa mañana. Sonrió inconscientemente.
-¿Pero qué tenemos aquí?- Ayudó al menor a levantarse, sin embargo este tambaleó por lo cual Marshal lo abrazó contra sí mismo para evitar una segunda caída del pelirosa.
-Gracias por la ayuda- Dijo separandose y sacudiendo el polvo de su bonito traje.
-¿Te han dicho que te queda muy bien ese traje? Sobretodo por detrás, se ve algo apretado- Sonrió pervertidamente mientras Gumball se sonrojaba hasta las orejas.
Un fuerte golpe resonó por todo el pasillo, seguido de esto, el de ojos rojos acarició su mejilla que en ese momento estaba roja.
-¡Eres un pervertido!.
-No esperaba que golpearas tan fuerte.
-¡Hmp!- El de ojos violetas volteó y caminó a la dirección contraria en la que se hallaba Marshall.
-¡Hey, niño bonito! Perdóname, realmente no quería, es decir, sólo tómalo como un elogio.- El azabache seguía a Gumball de cerca.
-Me parece un elogio muy inapropiado, aunque no vulgar, sin embargo, siento que me irrespetas.- El mayor soltó una pequeña risa burlona.
-¿Tu eres de una familia muy adinerada o algo similar? Tus modales son muy... Perfectos.
-Yo me esfuerzo en ser un caballero.
-Más bien una dama- Rió de nuevo.
-¡¿Acaso me estás insultando?!.
-Oh, claro que no, su majestad, pero no pareces muy... Eh... ¿Eres gay? Pareces de ese tipo.
-Soy un doncel.
-¿Doncel? ¿Qué es eso? ¿Existe esa palabra?.
-Ugh, es algo que no te incumbe, no tengo que darte explicaciones ¿Seguirás molestandome? Si es así prefiero que me dejes sólo, tengo muchas cosas que hacer.
-De hecho, princesita doncel, quería ofrecerte una propuesta.
-¿Una propuesta? ¿Cuál?.
-¡Gumball! Te he estado buscando por todos lados- Se acercó Finn corriendo hasta alcanzar al nombrado -Hola Marshall. Gumball, hay un chico que al parecer de esta buscando, no recuerdo su nombre, es alto y de cabello anaranjado.- El de cabello rosa se sonrojó, algo que no le agradó a Marshall.
-Sé quien es ¿En dónde está?-
-En la entrada del campus.
-Bien, adiós- Se despidió y caminó en busca de su amigo.
-Marshall, también te...- El rubio dejó de hablar al notar que el de ojos rojos ya se había ido así que se limitó a cortar su oración y fue en busca de su hermana.
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-¡Bonnibel!- Dijo mientras abrazaba a la chica de cabellos rosados -Hace tanto no nos veíamos.
Por alguna razón ese tipo no le agradaba, parecía de esas personas que sólo hablaría contigo si tienes un lugar en donde pueda meterla, y no dejaría que una chica tan bella como lo era Bonnibel cayera en su trampa.
-Bonnibel ¿Quién es él?- Preguntó insegura la pelinegra.
-Hola, soy Flame, un gusto- Habló el chico alto que usaba un chaleco de jean sobre una chaqueta de cuero.
-Marceline- Respondió tomando la mano extendida de Flame.
-Marceline, él es...- La chica de ojos violetas fué interrumpida por la voz de su hermano menor Gumball.
-¡Flame!- Llegó corriendo directamente a los brazos del peli naranja.
-Gumball, te extrañé tanto- Abrazó al menor sonriente.
-Marcy, Flame es el prometido de mi hermano.- Terminó la hermosa chica que vestía de rosa.
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¡Sorpresa! He vuelto :D me sentí algo mal después de ver que este fanfic tenía tantos leídos, votos y comentarios y sólo dos capítulos así que aquí traigo otro! C: uh uh! Ya llegamos al 1k! xD gracias a todos los que leen comentan y votan por eso C': me siento alagado, muchas gracias! >w<
Vale, este capítulo tal vez quedó algo corto pero espero hacer uno más largo para la próxima.
No lo revisé muy bien así que perdón por si tiene errores ;n;
Creo que ya no hay mas que decir, los quiero mucho! Muchas gracias por seguir esta historia C': uh uh! Al final me decidí por hacer fionna x princess flame, o era flame princess? xD meh creo que ya saben a quien me refiero, bueno, los quiero mucho, espero que nos encontremos en otro capítulo, adiós y gracias por leer! >w<
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Una nueva etapa. (Gumlee - Bubbline)
FanficLa universidad es un paso muy importante para cualquier persona. Para algunos es una etapa de estudios y esfuerzos con la meta de ser alguien en la vida, a veces no son muy buenos en ello pero lo intentan y eso cuenta. Sin embargo, para otros, no es...