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Cuando desperté me di cuenta que me había dormido muy rápido y que había dormido como un bebé lo cual no esperaba, cuando mire al lado de mi cama vi a Adam ahí, dormido en el sofá, se veía tan tranquilo y nunca pensé que lo diría pero se veía muy lindo cuando dormía.

La enfermera me saco de mis pensamientos al entrar en la habitación, me aplicó la medicina y me dijo que pronto podría volver a mi casa, pero yo no quería pues ya no había lugar al cuál volver.... la enfermera se fue y yo ni cuenta me di, solo hasta cuando Adam hablo para una vez más sacarme de mis pensamientos.

-Hola guapa- dijo con cara de tipo sexy de revista y me dio una medio sonrisa.
-Hola idiota- le dije sin ponerle mucha atención pues no tenia ánimos de nada.
-hey que agresividad muestras esta mañana princesa- me dijo algo preocupado.
-No me digas princesa y siempre te hablo así, no te quejes- le dije dándole una sonrisa falsa.
-hey Kat, se que no es momento y se que no nos llevamos muy bien pero me gustaría que buscaramos un apartamento donde vivir y lo pagamos entre los dos, creo que yo más que nadie entiende por lo que estás pasando y pues te quiero ayudar- me dijo mirándome directo a los ojos.
-.... no se que decir Adam, es muy lindo de tu parte que me digas eso pero aun no se que va a pasar con mi vida después de que le cuente a mi padre lo que pasó.... pero sí,
al parecer eres el único que me entiende y el único que ha venido a verme a parte de Will....- le dije con voz melancólica y rompí a llorar.
-No digas eso kat, no dejaré que te lleven lejos de aquí así tenga que hacer lo que sea necesario para ello- me dijo mientras se acomodaba a mi lado y me abrazaba.
-gracias Adam- le dije y trate de tranquilizarme, no me había dado cuenta lo cálidos que eran los brazos de Adam el logro por fin entrar a ser parte de mis amigos, era un buen amigo.

Adam se fue a la hora del almuerzo y me dijo que vendría en la noche a acompañarme aunque me negué sabía que el llegaría pues era demasiado terco como para hacerme caso.

A eso de las 2 de la tarde decidí volver a llamar a mi padre y ésta vez si me contestó.

-Hola cariño ¿como estas?
-Hola papá, no muy bien, estoy en el hospital.
-¿que te paso? Llame a tu madre pero no me contestó- cuando dijo eso se me aguaron los ojos pero tenía que ser fuerte.
-hay algo que tienes que saber - le dije reuniendo todo el valor que pude- a mamá la mataron hace ya dos días, te estuve llamando ayer para contarte pero no contestaste, yo casi muero pero llegaron a tiempo para rescatarme, ya dentro de poco me darán salida y quería que supieras lo ocurrido.
-............. a bueno, ahí te mando plata para que rentes un apartamento, yo no puedo ir porque no puedo dejar el trabajo, te cuidas pequeña y pronto te llamaré de nuevo- dijo eso y colgó.

No podía creerlo, no le afecto en lo más mínimo, se que mi madre y padre no terminaron en Buenas condiciones pero no creí que le fuera a dar igual la muerte de su ex esposa.

No sabia si sentía tristeza, desepcion o ira con mi padre, pero yo no podía hacer nada así que lo mejor era aceptar lo que Adam me había propuesto porque el más que nadie entendía lo que me estaba pasando y quien sabe Hasta podría ser una buena compañía.

.....

Dure un mes en el hospital, fue eterno y más porque los únicos que me visitaban eran Will y Adam.

Al salir del hospital Will me llevo hasta el apartamento donde iba a vivir con Adam, fue lindo de su parte, creo que Will cada vez me agradaba más, me dijo que estaríamos hablando para salir a jugar o al cine y yo le dije que si.

Cuando entré en el apartamento que habíamos rentado me di cuenta que era demasiado grande pero eso estaría bien ya que así no tendría que ver a Adam tan seguido.

En fin, acomodé mis cosas en mi habitación y salí un rato a caminar, no quería saber de nadie en esos momentos, pero cuando uno no quiere encontrarse con alguien resulta que de casualidad pasa algún conocido por ahí, me encontré con Jack, era al que menos quería encontrarme, estaba muy dolida con el porque no fue capaz de ir al hospital ni estar ahí cuando más lo necesitaba.
-Hola Kate- yo hice como que no lo escuché.
-No me ignores, tengo que explicarte algo- pero yo no quería oír sus estúpidas explicaciones.
-Déjame en paz, no quiero oír nada que tenga que ver con que no pudiste ir a visitarme es mas ya ni me importa, largate y no me busques más- le dije y me fui de vuelta a casa

La Chica De Los PilotosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora