CAPÍTULO 9

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Ya por la tarde y con los bailes ya terminados empiezo a despedirme de toda esa gente a la que no volveré a ver en mucho tiempo. Uno a uno me voy despidiendo y conteniendo las lágrimas, soy de esas personas que detestan despedirse de los seres queridos, soy esa clase de personas que prefiere dejarlo en un simple "hasta pronto".
Cuando acabo con alumnos y profesores agarro del brazo a mi amiga y nos vamos a la playa. Como somos tan inteligentes y no llevamos puestos los bañadores tenemos que ponérnoslos en el coche. Pasando de nuestro cociente intelectual, que al parecer no es muy alto, llegamos a la playa y nos metemos en el agua con los demás. Ellos jugaban con un balón y nosotras se los intentamos robar, lo intentamos todo, nos tiramos a por ella, nos tiramos encima de ellos y les agarramos los brazos pero no lo conseguimos. Al salir nos secamos y empezaron a marcharse lo que me volvió a poner triste pero sabía que, a la mayoría, los vería en verano.
Nos marchamos a casa todos, yo algo triste, me di una ducha y me fui a la cama derrotada deseando despertarme mañana y que sea verano.
Al día siguiente me levanto y sentí una gran tranquilidad, desayuné y me dirigí al sofá y miré el móvil, no pensaba hacer nada ese día. 

¿Karma o destino?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora