Capítulo 4

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Chanyeol se despertó con la sensación de haber tenido un sueño maravilloso y reparador. No quería aún abrir los ojos, sabía que en cuanto lo hiciera el sueño se acabaría y su subconsciente se negaba aún a decirle adiós. Había soñado que su mascota de 'Virtual Pet' salía de la aplicación para vivir con él en el mundo real. Uno de los sueños más vívidos que había tenido, y la verdad es que, pensó aún semi dormido y sonriente, había sido un sueño fantástico.

Aún intentando no despertarse y con los ojos firmemente cerrados, se pegó inconscientemente a la fuente de calor entre sus brazos y acarició algo suave, como pelo, que le hacía cosquillitas en la nariz. Era curioso lo que podía hacer un buen peluche cuando dormías con él. Solo que Chanyeol no dormía con peluches (o al menos no tan grandes).

Abrió los ojos para descubrir a un Baekhyun muy real acurrucado contra su pecho, sus puños agarrando la pechera de su camiseta y su respiración pausada, signo de que aún dormía. Se mordió el labio inferior para ahogar el gritito que luchaba por salir de su garganta, primero porque no iba a servir de nada y segundo porque no quería despertar a su mascota, por imbécil que pareciera. Lo miró dormir durante un buen rato, debatiéndose internamente si debía o no tocar aquellas mejillas que parecían tan reales y suaves, acercando su mano tentativamente y alejándola cuando se arrepentía.

Acercó su mano al pelo de Baekhyun finalmente, decidiendo que siempre podía poner la excusa de que le estaba apartando los mechones de la frente o algo así si se despertaba. El pelo era suave al tacto, casi le recordaba al algodón de azúcar por su color, pudiendo deslizar sus dedos sin problemas entre los mechones. Estuvo así un buen rato, hasta que bien por cansancio o bien inconscientemente, su mano rozó el pómulo de Baekhyun.

Fue un toque suave y sutil, pero la piel allí era tan suave que Chanyeol se encontró mandándose al infierno cuando no pudo resistirlo y bajó la mano para acariciar las mejillas de Baekhyun.

Las suaves mejillas estaban ligeramente coloreadas de rojo, seguramente por el calor de dormir dos hombres adultos en la misma cama enana de apenas un metro de ancho y estar tapados con un edredón nórdico. No pudo evitar que su mirada cayera de las mejillas de Baekhyun a su boca, con los labios rosas ligeramente entreabiertos y tentadores, y Chanyeol tuvo que cerrar los ojos y apartar su mano porque NO, no iba a besar a su mascota y menos la iba besar dormida.

- ¿Chanyeol? -la voz de Baekhyun lo hizo abrir los ojos y mirarlo, arrepintiéndose casi al segundo porque tuvo que contenerse para no gritar de lo adorable que estaba Baekhyun recién levantado y frotándose los ojos, somnoliento- ¿Pasa algo?

- No, Baekhyun -respondió cuando pudo calmarse- Es sólo que... no me gusta madrugar.

- ¿Tienes que madrugar? ¿Qué hora es?


Chanyeol no tenía ni idea de la hora y era completamente inútil intentar mirar el reloj de lejos sin sus gafas, así que alargó el brazo por encima de Baekhyun para coger el móvil y pegárselo a la cara para ver la hora, gruñendo cuando los números brillantes le anunciaron que le quedaban cinco minutos para que sonara la alarma.

- Son casi las siete de la mañana y la alarma va a sonar en nada... Me tengo que levantar -hizo ademán de levantarse, pero unos brazos rodearon su torso y lo hicieron caer de nuevo.

- No te vayas aún, espera a que suene -había escondido la cara en su pecho, pero Chanyeol pudo ver las orejas rojas de Baekhyun.


Sonriendo, Chanyeol aceptó silenciosamente, rodeando a Baekhyun con sus brazos y moviendo sus dedos distraídamente, acariciándolo de forma inconsciente. Estuvieron así un rato, hasta que la condenada alarma sonó y Chanyeol tuvo que levantarse a darse la ducha que necesitaba, pensando que se había vuelto una nenaza desde que se descargó aquella app.


- ¿Hoy no juegas con la cosa gay esa?

Chanyeol levantó los ojos de sus apuntes de Metodología de la Música para dedicarle a Sehun su mejor mirada de escepticismo.

- Mira quién fue a hablar de cosas gays. Como si no dejaras que Luhan te empotrara contra la pared de los baños de la segunda planta.

- Eso es irrelevante y no contesta a mi pregunta -le respondió el otro sin pestañear. Chanyeol bufó.

- Se me ha roto la aplicación, no funciona -le espetó, volviendo a sus apuntes y procurando que el hecho de que su mascota ahora fuera de carne y hueso y viviera con él en su piso no fuera mencionado.

- No jodas, ¿en serio? -Sehun soltó una carcajada- Hasta tu mascota se ha cansado de ti y ha preferido que la aplicación reventara.

- Lo único que va a reventar es tu cara como no te calles, Sehun.

- Bueno, bueno -levantó las manos en son de paz, aún sonriendo- Jongdae viene ahora después, si quieres puedes pedirle que le eche un vistazo.


Chanyeol asintió distraídamente. Puede que hacer que Jongdae mirara su teléfono no fuera tan mala idea. No es que quisiera que Baekhyun volviera al juego, pero sí que quería saber si Jongdae podía encontrar algo raro o extraño, ya que su mascota estaba ahora viva y en su casa.

Cuando llegó Jongdae, sin embargo, tuvo que reprimir las ganas de partirle la cara cuando le dijo que la aplicación que se le había roto era 'Virtual Pet' y el bajo le dedicó una sonrisa socarrona.

- ¿'Virtual Pet'? ¿En serio?

- Espero que tus futuros clientes te demanden cuando les digas eso mismo al llevar sus aparatos a tu tienda a que los arregles -le espetó Chanyeol, intentando arrancarle el móvil de las manos, pero Jongdae fue más rápido.

- Eh, calma, tío grande -apartó el aparato para que Chanyeol no se lo quitara-. Sólo me hizo gracia porque el creador vino a darnos una charla junto con su equipo hace un par de meses.


Chanyeol bufó, lo que hizo que la sonrisa de Jongdae se intensificara, pero empezó a trastear con el aparato, enchufándolo al rato a su propio portátil que sacó de la mochila que llevaba a la espalda. Chanyeol lo miraba expectante, buscando algún gesto que le dijera qué estaba pasando por la mente del bajo, mientras Sehun los ignoraba y chateaba presumiblemente con su novio.

Tras una media hora, Jongdae suspiró, desenchufando el móvil del ordenador para devolvérselo a Chanyeol, la sonrisa de antes borrada de su cara y sustituida por un gesto de confusión y seriedad.

- No he podido encontrar a ciencia cierta la causa de que esa sea la única aplicación de tu teléfono que no funciona, pero tiene pinta de que alguien la ha hackeado desde dentro y ha hecho que deje de funcionar.

- ¿Hackeado?

- Si, es lo que aparenta -le puso el teléfono en las manos, intacto como si no lo hubiera trasteado durante una hora-. Pero no podría decirlo con seguridad, y mucho menos quién. Sea lo que sea, desde luego, ha sido desde dentro. Alguien que sabe cómo funciona.


Jongdae se levantó entonces, guardando el portátil en la mochila y despidiéndose de ellos. Sehun dejó por fin su teléfono a un lado y miró a Chanyeol.

- No ha servido para nada, ¿no?

- Más o menos.


Chanyeol también se levantó, guardándose el móvil en el bolsillo y comenzando a creer que realmente Baekhyun había roto la aplicación de alguna manera para poder vivir con él. Tuvo que salir corriendo con una excusa barata cuando Sehun le preguntó por qué sonreía como un idiota cuando su teléfono estaba roto.  


Virtual Pet (Chanbaek/Baekyeol)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora