Capítulo 11

3.1K 82 26
                                    



—Me colgó después decir que vendrá en la noche a buscarte. Está en el trabajo— ¡No! ¡Cómo pudo matarme ese inexperto! —gritó al juego ¿En el trabajo? ¿Cómo se enteró que estoy acá? Mmm... A menos que siempre llame para verificar donde estoy. Maldito lunático. Aun me pregunto porque no le devolvió los golpes a mi hermano. Debe ser un milagro del cielo.

...

—¡Nick!— escuchamos a Denise alzar la voz emocionada mientras el señor Jonas, Frankie y yo tomábamos un té con pastel— No te esperaba —agregó. No podía verlos pero podía sentir el abrazo que Denise le estaba dando.

—Mamá... ¿Que? ¿Frank no te avisó? —escuché su voz algo bajo. Estábamos en silencio comiendo.

—No, pero no importa. Ven. Estamos merendando —escuché sus pasos. Están llegando.

— ¿___, mas pastel? —preguntó Frankie a mi lado.

—No gracias —dije sonriéndole cordialmente al igual que él.

—Buenas tardes —la voz única de Nicholas se hizo presente para nosotros tres. Pero justo pude palpar la ironía de su saludo.

—Hijo, siéntate —ofreció el señor Jonas luego de masticar.

—Solo he venido por ___. Ya saben, el departamento está vigilado por paparazzi —dijo y con solo girar la cabeza a un lado podía verlo— ___ —llamó lo mas cordial pero hipócritamente que podía. Asentí y terminé mi té.

Me despedí del señor Jonas y Frankie. Denise nos acompañó hasta la salida y se despidió de nosotros de manera maternal. Sonreí para ella aunque sé que ahora comenzará un gran sermón de parte de Nicholas. Un nuevo chofer que no había visto antes nos abrió la puerta de pasajero a ambos ¡No! ¡No quiero tener a Nicholas a mi lado! ¡No ahora! O mejor nunca.

— ¿Así que decidiste por tu cuenta salir del departamento sin avisar, comprar quien sabe que en el mercado de la esquina, tomar un taxi y venir hasta acá sola? —mi mente quedó en blanco ¿Cómo lo sabe? ¿O es que solo improvisa que pudo haber sucedido eso? Mil veces mierda.

—Si —contesté sin mas ¿Debo preguntar cómo se enteró? Escucho su risita irónica mientras arranca el auto. Nicholas y yo no nos miramos en ningún momento.

— ¿Se puede saber en qué demonios piensas cuando actúas? —susurró escalofriantemente.

—En que no soy un animal al que puedes tener encerrado —contesto tranquila, evadiendo su carácter.

— ¿Olvidas el segundo contrato? Soy prácticamente tu dueño —habló con superioridad. Voltee a mirarlo y él también me miró.

— ¿Y qué harás? ¿Denunciarme? —pregunté indignada. Sus ojos me evaluaron de forma seria. Es una pregunta que he estado haciéndome toda la semana.

—Puedo hacerlo si quiero. No sabes en que te estás metiendo, ___ —amenazó de nuevo mirándome de forma dominante.

— ¿Y cómo será tu denuncia? ¿Por salir del departamento sin permiso del dueño? — fruncí el ceño sin dejar de mirar sus, para mi, fríos ojos. Sonrió de forma hipócrita.

—Por no cumplir un contrato. No sabes el dinero que puedo sacar de eso —murmuró.

—Tu no necesitas dinero —dije sin entender su oscuro comentario.

—Yo no. Tu familia si —me calló instantáneamente. Miré al frente a la carretera sin decir nada solo molesta con esta situación. Él sabe cómo callarme, él sabe todo— Si vas a salir, avísame —agregó sorpresivamente ¿Está dejándome salir? Oh, esto es nuevo.

Más que un matrimonio a la fuerza (Nick Jonas y tú) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora