Hace varios capítulos que no dejo mensajes, primero quiero agradecer a las bellas personas que lean esta historia. En verdad estoy disfrutando el escribirla y espero de igual forma ustedes lo hagan.
Les deseo una bonita noche, madrugada, mañana, tarde, no importa el horario. Les deseo un buen día a todos y denle amor a "Love letter".
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—Escuchen atentamente, no deben decirle a Baek que me vieron aquí pero lo que sí deben decirle es que no hace mucho me vieron con Jongin ¿De acuerdo?
Jongin aceptó, a pesar de que estaba siendo usado no podía negarse a Soo, Baek era alguien vengativo y sus jugadas dolían bastante, lo supo de mala manera cuando eran niños y no podía ni siquiera predecir el nivel al que ahora era capaz de llegar.
—Él es alguien demasiado bueno, pero cuando algo no le gusta sus acciones no son las esperadas de alguien como él. Lo amo de todas formas, no quiero herirlo más pero tampoco quiero que lastime a alguien inocente. —dijo sin apartar la mirada de las palmas de sus manos.
Con ese pensamiento en mente Jongdae y Suho regresaron con Chanyeol y Baekhyun que esperaban la llegada de Luhan.
—Hey Baek —comenzó Jongdae quien aparentemente ya era más cercano al pequeño castaño —No he dejado de pensar en esto y no puedo seguir ocultándolo. Hace no mucho vimos a Kyungsoo.
Los ojos de Baek brillaron en cuanto escucharon la mención, aunque de inmediato intentó ocultarlo.
« — ¿Quieres regresar con él? —preguntó Jongdae lleno de miedo a la respuesta.
—No, lo amo como a nadie en el mundo pero no es justo. Él debe seguir sin mí y yo sin él. Es simple. —explicó Kyung »
—Le preguntamos si había encontrado a alguien más y bueno... no quiso decirnos pero... —puso en práctica sus dotes de actor.
— ¡Ya dime Chen Chen! —Suho siguió el juego —Estaba con éste chico que llegó cuando cenamos por primera vez... ¿Kai? ¡Ah! Jongin.
Ahora la expresión de chica enamorada se había marchado por completo.
—Estaba equivocado... No era Chanyeol —susurró pero los chicos frente a él lo escucharon todo.
¿Cómo no lo habían notado? Aquel que Kyungsoo quería proteger era Chanyeol, pero... ¿Por qué él?
— ¿Pensaste que era Yeollie? Es imposible que Kyungsoo se enamore de él, digo... no es su tipo, además nuestro Chanyeol es muy heterosexual, lo conozco desde que tengo memoria. —Expresó Suho para calmar los pensamientos de Baek — no es como tú, no creo que por algún momento se le haya pasado en la cabeza dejarte por él.
Jongdae le dio un codazo, detrás de ellos estaba el gigante escuchando todo con cara triste. Porque para él, tenían razón. Kyungsoo jamás se enamoraría de él.
Caminó lejos porque no podía disfrutar del momento con ese ánimo, entonces vio al pequeño rompecorazones con dos muchachos altos que reconoció inmediatamente. Jongin y Sehun.
Los tres aguardaban en la fila para ingresar a la casa del terror. Kyungsoo se reía de alguno de los chistes de sus amigos, Chanyeol sólo observaba. Como siempre.
Creyó que su destino siempre sería mirarlo desde lejos, como un espectador, viendo como el chico al que quería, vivía su vida sin él.
Las palabras de Suho resonaban en sus pensamientos por lo que se encaminó y entró a la atracción tras ellos.
En total silencio aguardó, mirando como los tres jóvenes entre gritaban y reían. En un descuido debido a un gran susto, los dos más altos terminaron dejando atrás a Kyungsoo y como si fuera cuestión de suerte, Chanyeol lo detuvo en medio de la oscuridad, reteniéndolo con todas sus fuerzas entre sus brazos.
—Quie... quién... ¿Quién eres? —preguntó tartamudeando.
Kyungsoo jamás pudo sentir más pánico en su vida, quizás moriría, quizás algún depravado abusaría de él.
Chanyeol con lágrimas en las mejillas lo hizo dar la vuelta para así quedar frente a frente. Podía ver el brillo de sus ojos, de sus labios humedecidos por las lágrimas de terror.
El más alto acarició de forma tranquilizadora la mejilla del pequeño, deslizándose hasta su barbilla, que más adelante sujetó con dulzura para así acercar sus labios a los suyos. Sellando por fin aquel espacio infinito que se interponía entre ambos.
Kyungsoo dejó de sentir pánico. Estaba siendo rodeado por un mar de sentimientos encontrados, no sabía quién era la persona que no besaba pero una parte enferma y retorcida dentro de su cabeza, le permitió imaginarse a Chanyeol, al gigante que tanto echaba de menos.
Supo que no era Sehun, porque sus besos eran apasionados. Tampoco podía ser Jongin, porque sus besos eran desesperados.
Era un beso tranquilo, lleno de calma y dulzura, repleto de sentimientos y emociones que no podían ser expresadas con palabras.
Chanyeol dejó de retener al pequeño y lo miró en medio de la oscuridad, él mantenía los ojos cerrados, esperando que el beso jamás terminara pero Yeol sabía que debía detenerse, huyó lejos, dejándolo completamente solo en ese sombrío lugar lleno de telarañas falsas y gritos grabados.
