The Other Part Of Me

Capítulo 1

Miro la habitacion que me rodea y no puedo evitar disgustarme. Cuando me dijeron que me mudaria a Mexico por una temporada me imaginaba un hermoso departamento con vista a una hermosa playa de agua cristalina. Pues resultó ser que no era asi. Mi nuevo apartamento <<si es que se puede llamar apartamento>> se encontraba en medio del centro y el ruido era insoportable. Mi cuarto en la casa de mis padres en Los Angeles era el doble de grande que esta posilga.

La pintura blanca sucia de la habitacion, en la cual se encontraban la cama, una pequeña cocina y una puerta que llevaba al baño, se estaba cuarteando por todas partes.
Pero bueno, se podria decir que me merecia eso y mas. Con todo lo que había hecho deberia estar en la cárcel pero el dinero de mis padres me salvo de eso y ahora aquí estoy. Mis padres practicamente me habian hechado lejos de casa,ya habia manchado la reputacion de nuestra familia y no querian que lo empeorará mas de lo que ya estaba. Nunca habia mantenido una buena relacion con ellos, pero ahora estaba segura de que me odiaban.

Mis amigos devuelta en casa deberian estar igual de felices que ellos de que me halla ido, o tal vez ni siquiera se hallan dado cuenfa. Despues de lo que le paso a Brook todo se fue al carajo. Y aunque la pequeña perra egoísta dentro de mi quiere que las cosas vuelvan a ser como antes del accidente, se que me meresco cada gramo de sufrimiento.

Comencé a desempacar pero unos golpes contra la pared que compartia con mi vecino me detuvieron. Luego de unos momentos los gritos y gemidos le siguieron. <<oh dios, lo que faltaba, gente follando en la habitacion de al lado>> las cosas no podian ir mejor.

Tome mis auriculares y puse la musica al maximo para no escucharlos.

El calor en la habitacion comenzó a tornarse insoportable y decidí abrir la unica ventana que daba a la calle. Y eso fue lo peor (literalmente lo peor) que podria haber hecho. Debí de haber empujado la ventana hacia afuera demasiado fuerte porque esta chocó contra la ventana de mis vecinos, destrozandola. <<A quien se le ocurre poner dos ventanas tan pegadas?!>>

- Mierda!

<<Talvez no lo noten verdad? Estaban gritando tanto que no se deben haber dado cuenta>>

Rapidamente me quite los auriculares para comprobar que mis vecinos no habian frenado la función a pesar de la ventana que había roto. Suerte la mía.

Había terminado de organizar todas mis cosas y me fui a dormir. Pero quince minutos despues unos golpes en la puerta me despertaron. Bueno quien quiera que estuviera fuera romperia mi puerta si seguía así. Antes de abrir la puerta ya tenia un mal presentimiento pero nada me podría preparar par lo que iba a suceder.

En el umbral de mi puerta se encontraba un chico. Y joder, nunca dejaría que ningun hombre me pasara por ensima, pero por este haría cualquier cosa. Sus hombros eran anchos y su estomago plano y marcado y una pequeña hilera de vello iba desde debajo de su ombligo y desaparecía dentro de sus pantalones deportivos grises que le colgaban de esa pronunciada v en su cadera que llevaba a su... Esperen, no llevaba camiseta?! <<como si me gustaría que fuera de otra forma..>> llevaba su pelo castaño claro despeinado, como si recien se hubiese despertado, sus ojos color verde azulado estaban enmarcados por unas cejas gruesas me miraban con enojo y diversión, y su barbilla cuadrada y con apenas rastro de barba me daba ganas de llenarsela de besos.

- Asi que tu eres la nueva inquilina?- pregunto con una sonrisa de superioridad que me daba ganas de sacarsela de un golpe y al mismo tiempo besarla. Hablaba ingles, por lo tanto no era la unica extranjera en el edificio.

- pues...esto...- <<dios, estoy tartamudeando?>> - si, lo soy- << Vale, y ahora estas coqueteando? Que te pasa Sav?>>

- Bien, porque me has roto la ventana y espero tenerla arreglada para mañana.- ahora estoy segura de que solo quiero golpearlo.

- Disculpa?- dije indignada.

- Ya me has oído. Mañana estan pronosticadas tormentas y no pienso cambiar mi piso de madera porque este se arruinó, a menos que tu estes dispuesta a hacerlo claro.

- Pero quien te crees!?-

El simplemente se encogió de hombros- Trabajo hasta las 4 y saldré a las 9 asi que puedes mandar a alguien para que la arregle a las 6.

Estaba a punto de soltar todas las palabrotas que mi viejo yo hubiera soltado cuando me interrumpió- oh, y bonita pijama- <<mierda, mierda, mierda!>> había olvidado que solo llevaba unos shorts de lycra y una camiseta sin mangas que le permitia a mis chicas salir y decir "hola" - no hace tanto frío sabes- dijo señalando a mis pechos con los pesones frunzidos mientras que entraba a su apartamento.

- Y tu deberías dejar de hacer tanto ruido!-

- Ya quisieras-Y solo así cerró la puerta de su apartamento dejandome terriblemente enojada y... Caliente? Pero si era un imbecil! Claro que no estaba caliente...