Hoy son ya 5 días después de aquella noche tan extraña en el bar con Richard y me sorprende que poco después halla tenido esa misteriosa pesadilla, si es que le puedo llamar así. ¿A caso la aparición de Richard habrá tenido algún nexo con el sueño?, ¿Y si mi inconsciente tratase de decirme algo?
Mientras mi cabeza trata de procesar todo eso, la puerta del departamento es golpeada.
-Hola Jamie, ¿Cómo va todo?- Se escucha desde el otro lado de la puerta.
Joder, es Jason, el departamento está hecho un desorden.
Rápidamente empujo con los pies hacia debajo de la cama mis bragas que están en el suelo. Debo deshacerme de ese hábito de dejar mi ropa interior por doquier.-¡Amor!- Exclamo al abrir la puerta mientras Jason me abraza.
-He vuelto, ¿Me has extrañado?- Tan gracioso él, hace esa pregunta tan estúpida sabiendo que me dejó 3 días sola.
-Vamos, por supuesto que te he extrañado, ¿Qué tal se encuentra tu madre en Kansas?
-Es una mujer muy especial, pero es mi madre, ¿Qué hago? La pasé agradable a pesar de eso... Por cierto, te ha mandado esto.- Dice Jason mientras suelta una de mis manos por meter la suya en su abrigo.-¿Jamie?, ¿Qué pasa? Tu mano se puso fría y tu rostro empalideció.
-¿Eso... es lo que me manda tu madre?- Digo entre dientes mientras observo una caja idéntica a la que nos da tanta intriga a Pauline y a mi.
-Sí, ¿Qué sucede?-Debo guardar la calma, quizá son bromas que juega conmigo mi cerebro, se pueden parecer millones de cajas en este mundo, además, ¿Porqué tendría la señora Hush la misma caja que Pauline se llevo hace algunas semanas?
Mientras me preocupo por volver a ni color nuevamente, recibo con una sonrisa aquel objeto que me ha mandado por obsequio mi suegra. No hay que despreciar regalo alguno.
-No es nada Jason, sólo vino a mi mente un sueño que tuve hace poco.
-¿Otra de tus pesadillas? Esto no puede continuar, temo que enfermes. No es bueno tener terrores todas las noches.
-Tú tranquilo cariño, no fue un terror.- (O al menos eso creo.)
-Aún así, apenas y me ponga al corriente con los pendientes del edificio y te agendo una cita con el Dr. Ripper.Demonios, apenas y escucho ese nombre y me pongo inquieta, ¿Cómo puedo confiar en un doctor cuyo apellido es Ripper? Cualquiera que conozca sobre "Jack fue ripper" creo que sufriría lo mismo que yo.
-Vamos, estoy bien, J.- Reniego aún sabiendo que estoy mintiendo.
-Sin pretextos, Srta. Romo.-Uau, hacía ya tiempo que alguien no se refería a mi por ni apellido. Eso me pone tierna. No por que me llamen por mi apellido, sino porque J le da un tono amable y sexy. No queda otra más que ceder.
-Ven conmigo, aún tengo el día libre. Te invito a comer.- Dijo Jason.
-Claro, sería magnifico. Pero dame tiempo de arreglarme.
-Así te ves perfecta, así eres por naturaleza.
-Al menos deja me sujeto el cabello.- Contesté yo mientras inevitablemente el rubor me invadía. Es muy tierno.Mientras me sujetaba el cabello y me miraba en el espejo de mi tocador, podía ver por medio del reflejo la caja con su llave sobre el armario que tengo frente a la puerta. Más tarde haré por ver que es el contenido de el regalito.
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Histeria
Mystery / ThrillerJamie, es una estudiante de leyes en Portland, su vida pareciese tan normal como la de sus amigos, diversión y estudio... Pero ella oculta algo más allá de su persona, algo que solo ella sabe. Anímate a descubrirlo.