Histeria

Capítulo lll: ¿Qué ha pasado?

CAPÍTULO III

Al punto de las 7:00 P.M. todos comienzan a llegar, a los primeros que recibo son a Stacy y a Lenny, ambos presentables y sonrientes.

-Pasen, chicos. Ella es Pauline, una vieja amiga.-

-Mucho gusto, Pauline. Soy Lenny.- Dijo Lenny en tono muy caballeroso.

-Hola, Pauline. Me llamo Stacy.

-Mucho gusto, chicos. Veo que son buenos amigos de Jamie, me da gusto. Contestó Pauline en un tono muy amable y elegante.

-¿Quiénes son esos dos que cubren tu puerta, Jamie?- Preguntó Stacy.

-Son los guaruras que mi esposo contrató para nuestra seguridad.- Responde Pauline, sin darme oportunidad a responder.

-¡WOW!, ¿Guarda espaldas?, ¿Cómo en las películas?- Gritó Lenny. Es muy raro el chico, es un tanto inmaduro y tiene mentalidad aún de niño.

-Algo así, pero bueno, basta de preguntas y…- En ese momento suenan el timbre interrumpiendo a Pauline. Creo que es Jason.

Al abrir la puerta veo a un Jason diferente, sin ese traje rojo del edificio. Tiene puestos unos vaqueros azules y unas zapatillas deportivas, se ve espectacular, me ha dejado boquiabierta.

-Jason.- Dije entre tartamudeos. –Pasa.-

-Hola Jamie.- Dijo él, mientras me saluda besando mi mejilla. No puedo evitar ruborizarme.

Detrás de él, veo las siluetas de Nick y Karol, solo me sonríen con mirada de burla. –Pasen, chicos.- Les dije intentando disimular mi pena. Ya todos adentro, la anfitriona empieza a charlar con todos y en seguida se ha socializado ya con todos. Esto va para largo, pienso yo.

Entre tragos y charlas se nos han dado las 10:00 P.M. y Pauline sigue fresca, pareciese que el alcohol no le hace nada a pesar de que se ha acabado una botella sola. Es una experta.

Lenny y Stacy no se separan para nada, beben juntos, todo juntos… No me extrañaría que fueran al baño juntos, pero bueno es de esperarse. A quienes veo muy cariñosos por ahora son a Nick y a Karol, esos tragos encima les ha despertado sentimientos. Diablos, son tiernos, ambos con pareja… Yo como siempre, solitaria.

Jason está ahí, parece que está algo tímido. Es extraño. De la nada se levanta y se dirige a mí, creo que ya se ha tomado el trago del valor. Mientras el IPod suena al ritmo de “So this is love” de Van Halen, él se acerca cada vez más a mí. ¿Qué querrá?

-Jamie, has estado muy seria.

-¿Seria yo?, Tú eres quien se ve serio y decaído, ¿Pasa algo?

-Dios, no te me acercaba porqué pensaba que eras tú la extraña.

-Para nada, estaba viendo solo a las dos parejas y tu hermana intentando embriagarse cada vez más sin efecto alguno, ¿Cómo lo hace?

-Lo mismo me pregunto, es extraña. Jamás la había visto tomar.

-Pues es un privilegio, pero bueno. Cuéntame, ¿Algún corazón te ronda?

-Pues, una chica muy linda y atractiva, de bellos sentimientos. Está muy cerca.

Dios mío, mi rubor se marca instantáneamente, más rápido que un chasquido de dedos, ¿Se refiere a mí?.. Mi corazón bombea fuerte y comienzo a temblar.

-¡WOW! Jason Hush enamorado, valla sorpresa, ¿Y quién es?

En ese momento, sin aviso previo el me arrebata la palabra de la boca con un tierno y ligero beso en los labios. Mi corazón se ha detenido. Mis sentidos se exaltan por los cielos. –Tú Jamie, tú.- Me susurra Jason muy ligeramente en el oído. Sin poder evitarlo, le sigo el juego y me prendo de sus labios, no sabía que decir así que mejor lo beso, ¿Por qué no?

En ese instante llega Pauline y se escuchan un par de aplausos.

-Valla, valla. ¡HASTA QUE POR FIN! Creí que ambos se morirían vírgenes.-

En seguida salto, no puedo creer que esas palabras hayan salido de la boca de Pauline, creo que en realidad si le ha hecho efecto el alcohol. Volteo a ver a Jason, y entre rubor y sonrisas me dice: -Me atreví.-

-Pauline, que cosas dices, ¿Has tomado demasiado, no crees?- Dije yo apenada.

-A penas he empezado, y luego no puedo perder la oportunidad. Hay que celebrar que ustedes, mis dos angelitos al fin se unen en amor.

-Venga Jamie, tomemos un poco, he agarrado valor y te quiero pedir… ¿Serías tú mi novia?

Mi corazón ya no existe, solo queda el musculo paralizado… Sus latidos o han desaparecido, o son tan rápidos que ni se notan.

-Sí Jason, ¡Sí!- Contesté un poco nerviosa pero alegré.

-Pues a celebrar, corazones.- Dijo la hermana inoportuna.

Comenzamos a tomar poco a poco nosotros tres, en seguida se nos unen los otros chicos. Como si la nada, en un instante nos hemos terminado un par de botellas, Nick y Stacy son los primeros en caer rendidos y terminar tendidos en un profundo sueño de ebriedad sobre la alfombra. A la que veo igual desde que empezó es a Pauline, es una mujer sorprendente.

El sueño me está ganando la batalla y la cabeza me da vueltas. En un instante siento que mi cuerpo se desprende y solo cierro los ojos mientras doy un vistazo a el resto, solo Lenny, Pauline y Jason de pie. Por mi oído se escabulle un ligero: -Duerme, amor.-

Escucho un estruendo muy fuerte, me despiertan de mi sueño, al abrir los ojos veo una escena perturbadora, veo sangre en la alfombra, estoy sola en el sofá. En seguida me pongo de pie y veo en una esquina a Lenny ensangrentado, el pánico me inunda instantáneamente, ¿Qué jodidos ha pasado? Abro la puerta para buscar a los gorilas y lo primero que veo es a ambos muertos al pie de la puerta, me ahogo en llanto y desesperación, solo veo cadáveres. Me dirijo al cuerpo de Lenny, noté un ligero movimiento, no estaba muerto, le queda un aliento, un ligero sollozo que apenas me alcanza a decir: -Corre, Jamie.-  En seguida, pierdo el conocimiento.