Capitulo 3

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-No es que ya la odie, pero el chico salió del baño con aires superiores y cuando me vio seguramente pensó "oh de seguro es una de mis fans, voy a odiarla" - bebí un sorbo de agua para tranquilizarme -¡Te recuerdo Sheeran que me guiñaste un ojo en tu recital! -

-Creo que deberías tranquilizarte, tienes una gran vena en la frente - respondió Diego, el hombre que vendía bebidas en la plaza que se encontraba en frente del hotel donde nos encontrábamos hospedados.

Toque mi frente suavemente y luego bebí el ultimo sorbo del agua que quedaba en la botella.

Eran las diez de la mañana y yo me encontraba despierta desde las seis, me había colocado mi ropa deportiva y había salido a correr unas vueltas. Estaba acostumbrada a hacer ejercicios todas las mañanas.

Mi comunicador comenzó a vibrar indicándome que me había llegado un mensaje. Lo saque del bolsillo de mi pantalón y lo abrí. Era de Stuart.

"¿Dónde estás? Tenemos que hablar"

-Me tengo que ir. El deber me llama - dije luego de haber respondido el mensaje - Fue un placer conocerte - agregue para comenzar a caminar.

-Igualmente - respondió Diego y yo me gire para sonreírle.

Cruce la calle, traspase las puertas del hotel y recorrí el vestíbulo para tomar el ascensor y dirigirme a mi habitación. Cuando llegue me di una ducha, para quitarme la transpiración y me coloque mi típica ropa negra.

Stuart me esperaba en el cuarto piso, donde se encontraban las salas de reuniones.

Toque la puerta y espere que me diera la orden para pasar.

-!Adelante! -

-Permiso - dije mientras la abría.

-Buenos Días Sky - saludo Stuart que se encontraba sentado en una de las sillas que había dispuestas alrededor de la gran mesa - ¿Cómo has dormido? -

-Bien, pensé que me costaría por que el día de ayer fue un día muy movido, pero descanse bien por suerte - respondí.

-Genial, ahora por favor toma asiento. Necesitamos hablar de tú paga -

Hice lo que me dijo y me senté en frente suyo.

-En cuanto a tu paga, será de treinta y cinco mil euros por mes -

Mis ojos se abrieron de par en par.

¿Treinta y cinco mil euros? - repetí -¿No es un poco...mucho? -

-No - contesto seriamente - Has sido contrata para ser la guardaespaldas Ed, tú vida está en riesgo. No podríamos pagarte menos que eso -

-Pero...- trate de decir.

-Nada de peros - me interrumpió el.

¿Treinta y cinco mil euros? ¿Qué iba hacer con tanta plata?

-Esta es tú tarjeta de débito - dijo Stuart sacándome de mis pensamientos y extendiéndola hacia mí - Tú plata será depositada en una cuenta de banco que está a tú nombre y podrás retírala cuando quieras -

-Stuart - intente decir pero otra vez fui interrumpida.

La puerta se abrió dando paso a un pelirrojo con cara de pocos amigos.

-Iré a desayunar a Shepard's. Estoy cansado de la comida de este hotel y si voy a estar un año viajando por el mundo y comiendo comida de hoteles, quiero disfrutar por última vez la comida de verdad - dijo molesto.

-¿Tus padres no te enseñaron modales? - cuestiono Stuart.

-No - respondió y se dio la vuelta dispuesto a irse.

La Guardaespaldas (Ed Sheeran)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora