el chico de al lado › yoonkook.

III. La ventana.

No sé qué diablos pasó. No entiendo... ¿Habré errado en algo? ¿Será que lo espanté? No sé qué ocurre... Un día entero ya pasó, es de noche. ¿No se suponía que hoy planificaríamos desde la ventana nuestra siguiente salida? Quizá sólo me lo dijo para que lo dejara en paz. Me vio la cara de imbécil... Seguramente debe de estar burlándose ahora del baboso de su vecino. Joder, no puedo comprender cómo es que un niño me trae así de loco por él. He estado todo el día esperando. No literalmente junto a la ventana, pero sí he estado al pendiente. Y nada. Joder, ¡nada! Lo he visto hoy, estuvo gran parte del día en casa y ni un ''hola'' vino a decirme. ¿Se olvidó de mí? No entiendo qué hice mal...

Me siento derrotado, totalmente. Es de noche, pero aún no es del todo tarde. Parece que Jungkook está solo en casa ya que recién vi un vehículo salir del lugar, creo que era su madre. Sé que parezco todo un psicópata, pero no lo puedo evitar. 10:30 pm, Jungkook está en su cuarto, sin hablarme. Su ventana está abierta, igual que la mía y nuestras cortinas. Él está echado sobre su cama, al igual que yo. Él juega vídeojuegos y yo veo televisión, más bien, tengo prendido el televisor. Debo pensar en algo pronto...

Rayos, ¿qué sucedió? Necesitaba de un milagro y eso acaba de ocurrir, creo. Ya no hay electricidad. Pareciera que toda la ciudad estaba así, a oscuras. Ya que era de noche, no se podía ver nada. Joder, no estoy preparado para algo así... No, sí lo estoy. Saqué la linterna de mi velador y la encendí. ¿Jungkook necesitaría de mi ayuda? ¿Debería acercarme a la ventana? No... Él debía venir por mí, debo tener algo de dignidad... No me resistí, lo sé, soy un idiota. Ahora estoy apoyado en el marco de mi ventana y alumbré el cuarto de Jungkook con mi linterna. No quería parecer un psicópata, sólo buscaba ayudarlo.

— Hey... ¿Jungkook, estás ahí? —Sé que lo estaba, debía fingir—. ¿Necesitas ayuda?

— ¿Yoongi hyung? —cuestionó de pronto mientras que, envuelto completamente en una manta de Iron Man, se aproximó temeroso hacia la ventana; cómo puede ser tan jodidamente adorable—. ¿Qué... Qué ha ocurrido?

— No lo sé, bebé... No estés asustado. ¿Quieres que hablemos de algo mientras esperamos?

— ¿Hablar sobre qué?

— Sobre nuestra futura cita, ¿te parece? Por cierto, hoy me has plantado.

— ¿Y-yo? Claro que no... No pensé que debía ser precisamente hoy cuando lo planeáramos...

— ¿Estabas evitándome?

— Tal vez... —Me dolió escucharlo.

— ¿Se puede saber por qué?

— No lo conozco, no debería de hablar con usted... Además, me resulta intimidante.

— ¿Yo? ¿Intimidante? Mmh... Eso de no conocernos tiene solución. Salgamos mañana para conocernos y se acabará el problema.

— Está bien, está bien. Pero... En vez de ir al cine a ver la película, ¿por qué no mejor vemos una en su casa? En realidad, no me gusta mucho el cine. No se puede poner pausa y hay que estar callado. Llevaré comida si quiere... ¿Le parece?

— Mmh... Vale, todavía mejor. Entonces... ¿Me dirás por qué te resulto tan intimidante?

— La forma en que me mira... Tiene una mirada muy profunda, ¿sabía? Cohíbe.

— No puedo evitar mirarte de esta manera...

Y de pronto hubo un silencio. Tal vez incómodo para él, más no para mí. Estábamos a oscuras, sin nada más que la luz de mi linterna, pero no alumbraba mucho en realidad. Sólo nos mirábamos. Él con su carita de niño inocente y sus rosadas mejillas. Creo que nunca antes lo había visto tan hermoso, y sé que lo digo seguido. Sus ojos brillaban tanto que parecían ser la única luz que en ese momento había. De pronto algo me dejó totalmente paralizado, una sonrisa al fin. No imaginan lo mucho que amo esa sonrisa, esos dientes tan pequeños y cuadraditos; era adorable, perfecto. ¿Por qué sonreía? ¿Sonreía especialmente para mí? O quizá se burlaba de la cara de idiota que tenía en ese momento, pero no lo podía evitar, era demasiada belleza junta. ¿El rubor en sus mejillas aumentó? Creo que es un producto de mi imaginación, ¿por qué se sonrojaría? ¿Por qué sonreiría? Él sólo estaba ahí, mirándome con esa sonrisa tan suya y apoyado en el marco de la ventana. De pronto vi sus labios moverse, ¿qué es lo que dijo? Debo despertar de mi trance.