La mañana que cambio mi vida. {Niall y tu} {Terminada}

Capitulo 40 "Amistad"

Rodé sobre la cama y choque contra alguien, me asuste mucho, estaba a punto de gritar cuando me di cuenta que era Niall, reí para mis adentros, había olvidado que estaba en su casa.
Lo admire por unos segundos y después me acerque a el, quedando a pocos centímetros, comencé a besar su mandíbula, después sus mejillas y Niall soltaba unas risitas y después deje repetidos besos en sus labios hasta que despertó

-Buenos días amor-le sonreí

-Buenos días princesa-me beso-. Esta sí que es una gran manera de despertar, no como cuando me hiciste la broma de que Simon ya estaba en tu casa

-Fue la primero que se me ocurrió, ¿qué tal dormiste?

-Excelente, ¿cómo te fue ayer?

-Bien, nada importante

-¿Qué hicieron?-levanto un ceja

-Fuimos a un auto cine, la película estuvo divertida

-¿Simon sabe que el ya regreso?

-Si, de hecho Kendall le pidió permiso para salir conmigo y el acepto

-Oh-se limitó a decir

-Ya hablamos mucho de el, deberíamos bajar de desayunar-me senté

-Ok, maravillosa idea-salió de la cama

-Sabes-salí de la cama-. Te comprare más pijamas para dejes de dormir en bóxers-solté una carcajada

-¿Qué acaso no te gusta como me veo?-levanto su brazos y se dio una vuelta haciéndome sonrojar

-No-mentí

Espere a que Niall se pusiera un short y una camisa y bajamos tomados de la mano, escuchamos que los chicos ya estaban despiertos ya que el televisor estaba encendido

-Buenos días tórtolos- Harry nos saludo a ambos sin pararse del sillón

-Buenos días-respondí

En la sala sólo estaba Harry, Louis y Zayn, al parecer Liam estaba haciendo el desayuno.

-¿Tuvieron mucha acción anoche?-Louis pregunto con descaro, yo me sonroje fuertemente y abrace a Niall para que no siguieran viéndome

-No, aún no-respondió Niall en tono gracioso haciéndome morir aún más de la vergüenza

-Apuesto lo que quieras a que no se esperarán a la luna de miel

Todos estallaron en risas y mientras tanto moría de la vergüenza

-Me largo de aquí- me separe de Niall-. Bola de pervertidos-dije en tono divertido provocando que rieran aún más

Fui directo a la cocina con Liam, al entrar tenía toda la razón, tenía toda la estufa ocupada por sartenes.

-¿Te ayudo en algo?

-¡____!-se sobresaltó-. Casi me matas de un susto mujer

-Lo siento, no era mi intención-me senté sobre la barra

-No te preocupes-me sonrió y volvió su vista para seguir cocinando-. Por el momento estoy bien, gracias-hizo una pausa-. Aunque podrías ayudarme a poner la mesa

-Ja-dije sarcástica-. Como la primera vez que estuve aquí

Saqué todo lo que Liam me dijo y fui a acomodarlo para poder desayunar

-Sabes-entré a la cocina-. Hoy mi día estuvo a punto empezar como la primera vez que desperté en esta casa

-¿Te caíste de la cama?-pregunto divertido