Ir a la escuela. ¿Qué persona normal quiere ir a la escuela después de dos meses de vacaciones?
Iba a matar a todo el mundo.
Ya eran las seis y media de la mañana y aún no había desayunado. ¿Llegar tarde el primer día? Mi vida era un desastre.
Después de comer rápido. Decidí llamar a mi mejor amiga, la cual si era responsable y se había ganado un carro con su esfuerzo, para que me llevara a ese terrible lugar llamado 'Colegio'.
Al tercer timbre Elizabeth respondió y acepto llevarme sin pretextos.
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Al llegar al colegio vi pequeños cambios, nada fuera de lo común.
Cuando estaba pasando por las canchas de básquet vi al chico más engreído del instituto.
¿Cómo es que alguien puede ser su amigo? ¡Oh ya se porque! ¡Él si es guapo!
Okay Emma contrólate. Ya no había pensado en eso hace mucho tiempo.
Elizabeth me vio mirándole a ese tal Colin, y sonrió despiadadamente.
Esto sí que iba a ser un año difícil.
Al llegar a mi taquilla (bueno ni siquiera alcance a llegar), me choque con alguien y caí inmediatamente. Ese alguien me ayudo a levantarme; mientras mi querida amiga se mataba de la risa por lo distraída que era.
Ya en pie me di cuenta que ese 'alguien' era el mismísimo Colin. ¿La vida era cruel? ¿O soy solo yo? Le agradecí lo más rápido que pude y regresé con mi amiga.
Eli me regreso a ver y volvió a sonreír.
-Creo que es tu destino- me dijo al llegar al aula y sentarnos.
-Ya quisieras- respondí con mi mejor cara de enojo.
-Ya lo veras- me insistió.
El profesor llego y nos dio una bienvenida, nos presentó a los alumnos nuevos: Blake Wright y Dan Black.
Regrese a ver a mi amiga quien parecía que iba a mojar su cuaderno por la baba que le causó Dan. En realidad no estaba tan mal.
Después de dos horas por fin el primer bloque de clases se acabó.
Al salir sentí que una mano toco mi hombro...
