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''¡Annie!, ¡Annie!'' la chillona voz de mi mejor amiga me saca de mis pensamientos repentinamente. Voy a matarla. Sin pensarlo ni un segundo, la arrastro hacia la entrada de la lujosa casa de Marlon.

- Svetlana. - digo firme.

- Uh... ¿qué? - dice enrollando un mechón de cabello en sus dedos.

- ¿Por qué no me dijiste que él estaba aquí?

- Te dije que había invitado a todos.

Mierda. Tiene razón.

- Dios, Harry Styles está en la misma fiesta que yo ¿te das cuenta de eso?

- ¡Obvio si! te miró de pies a cabeza y tu ahí congelada, deja de ser tan obvia, Gray.

Tiene razón, de nuevo. No puedo dejar de disfrutar esto porque el está aquí, digo, de todas maneras estoy bien vestida y se supone que el es un invitado más de aquí. Doy un suspiro largo y Dakie me arrastra para finalmente adentrarnos en la fiesta. Harry está en la entrada, en toda la jodida entrada cruzado de brazos, mirándome. Tenía planeado no saludarlo y pasar como si nada.

- ¿No piensas saludarme? - dice lentamente mientras le da un sorbo a lo que sea que esté bebiendo con una media sonrisa. Ésa media sonrisa.

Dakie me guiña un ojo y me deja sola.

- Uh, si. Hola. - bajo la mirada mientras sonrío tímidamente.

Harry eleva su mano delicadamente hasta mi mentón para hacer que nuestras miradas conecten, siento el calor subir por mis mejilllas. Me extiende la mano sin apartar su mirada de la mía, sin dudarlo estrecho la mía para juntarla con la suya. Pensé que sería un estrechón de manos común, pero justo cuando mi mano recién toca la suya me jala con fuerza hacia el y hace que nuestras mejillas se junten para luego darme un pequeño beso. No puedo estar más ruborizada porque las leyes de la naturaleza humana no lo permiten. Yo me quedé en silencio y sus pupilas seguían fijas en mi.

- ¿Pasamos? - dije amablemente.

- Bueno. - hizo un ademán para que yo pasara primero que el.

Al cruzar la puerta, el olor a alcohol penetró inmediatamente nuestra narices, la música estaba a todo volumen, yo no estaba acostumbrada a ésto, me quedé parada ahí solamente viendo como todos bailaban al ritmo de la música mientras bebían como si no hubiese un mañana. En eso siento como una mano se posa en mi espalda baja y un aliento recorre mi cuello.

- ¿Estás bien? - dice en tono alto, no era Harry.

¿De quién era esta voz? se suponía que Harry estaría atrás de mi para acompañarme a entrar a la fiesta; me dio un poco de miedo, aquí habían muchas personas que no había visto jamás en mi vida. Volteé para ver de quién se trataba, era un chico bastante alto, ojos grandes y tan azules como los míos o hasta más, cabello castaño muy oscuro y una sonrisa muy amplia y encantadora.

- Uh sí, no te preocupes. - dije con una muy amable sonrisa, el me la devolvió.

- Soy Marlon Johnson, mucho gusto.

- ¡Ah si! yo soy Annie Gray, soy... la mejor amiga de Dakota. - vaya que Marlon era lindo.

- ¡Lo sé! ¿vamos afuera para hablar mejor? - debido al alto volumen de la música.

Yo solo asentí y lo seguí hasta afuera.

Estuvimos hablando un buen rato mientras bebíamos, yo opté por un cóctel de frutas que estaba muy delicioso. Marlon es un chico muy simpático y divertido, en eso llegan dos chicas extremadamente altas y delgadas, parecían dos edificios con piernas de pollo y senos un poco » demasiado « falsos.

- Hey Marlon, ¿vienes con nosotras? - dijo la primera coqueteandole notable y exageradamente.

- Uh, yo estaba hablando con ella, pero puedo ir con ustedes mas tard...

- ¡Oh vamos! la pista de baile está que arde, no te quedes aquí afuera tu solo. - dijo como si no notaran que yo estaba aquí escuchándolo todo mientras pasaba una de sus manos por el pecho de Marlon sensualmente.

¿Qué demonios con esas dos? en cualquier momento podría buscar un alfiler y explotarles las dos burbujas que tienen en el pecho, es como si ISIS les hubiese metido unas de sus bombas nucleares en los senos.

- Hey Annie ¿te molesta si yo...?

- Tranquilo, yo también entraré.

A decir verdad, estaba cansada de ver a esas cabezas huecas interrumpir, era una fiesta.

Me topé con Dakota, quien tenía dos gigantescos vasos con alguna bebida alcohólica desconocida. Me ofreció uno y yo sin dudarlo lo tomé.

- ¿Hablaste con Marlon? ¿es lindo eh? - dijo sonriendo mientras meneaba sus caderas al ritmo de la música.

- Si, es muy simpático - dije alzando los hombros.

El resto de la fiesta nos la pasamos bebiendo, bailando y saltando descontroladamente. Dakie se había besado con varios chicos mientras yo seguía bebiendo. Estábamos locas. Yo mientras, era una Annie eufórica con buenas vibras por doquier, gritaba cosas sin sentido y traía a más gente a la pista de baile. Llegó un momento en el que le bajaron el volumen a la música y no sé como, cuando o por qué me encontraba subida a uno de los mostradores de la cocina. Tenía un vaso en la mano y estaba bailando sobre éste. Escuchaba risas por todos lados ¿qué era tan gracioso? yo también quiero saber el chiste.

- ¡Hey! ¿de qué se ríen? - dije dificultosamente debido al efecto del alcohol sobre mí. Escuché que decían cosas como ''¡está ebria!'', ''contrólate chica o te cogeré'' , ''¡borracha!''

Pero ni las risas ni los comentarios que no entendía me detuieron a seguir bailando encima del pequeño mostrador. Veía todo borroso y de colores pero podía distinguir algunas caras.

Rápidamente veo como una sombra ancha y masculina se acerca a mi, mas no sabía de quién se trataba.

- ¡Bueno no tienen nada que ver aquí! - dijo una voz muy grave y ronca mientras me hacía señas con la mano para que fuese con el.

- Annie ven, estás ebria.

- ¡No estoy ebria idiota! ¡la vida es una sola y hay que celebrarla!

- Que vengas te dije.

Alcanzó mis caderas y firmemente me bajó del mostrador en el que me encontraba para luego colocarme en sus brazos.

- ¡Bájame pedófilo violador del bosque! - dije forcejeando entre risas.

- ¿Quieres callarte un segundo? estoy tratando de protegerte.

Deduje que habíamos salido de donde sea que hayamos estado y que ahora nos encontrábamos en un jardín. A lo lejos visualicé una banca de madera y nos dirigíamos a ella, en ningún momento paré de forcejear hasta llegar a dicha banca. El chico que me había cargado hasta acá afuera se sentó y no soltó mi cuerpo en ningún momento. Yo tenía sueño. Me acomodé en su pecho y me fundí en ese olor tan familiar y exquisito que aún no podría reconocer. Él soltó una carcajada ronca. Pude escuchar que marcó un número en su celular y llamó. No recuerdo más nada sino la misma voz diciendo:

''Me das asco insecto, pero te quedarás conmigo ésta noche''.


Heeeeey, ¡la enana fea les escribe y les manda unos saluditos a todos! Discuuulpen por tardarme tanto en subir capítulo, ya saben que el colegio y la vida es una mierda. ¿Vieron lo de "pedófilo violador del bosque"? JÉ. Si saben de donde saqué eso, tienen un pequeño lugarcito en mi heart♥

 Espero y les guste mucho, ya sé que les dije que esto iba a ponerse bueno pero... paciencia pls just pls, aaa.

Me despido, no quiero aburrirlos.

Ana xx.

















Inseparables.  »  hs.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora