Mi Verdadero Amor [#3]

Capitulo 31

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  Su larga melena rubia había desaparecido, pero no del todo, su cabello estaba ahí, tan rubio como siempre, pero corto, como quien no tuvo el valor para raparlo del todo y continuar con la mentira.

-Tu no eres mi madre- Susurro retrocediendo.

-Zoe el cabello vuelve a crecer-Se justifica.

-¡Pero si estas en pleno tratamiento!-Grito tirando el pañuelo al piso. –Tu no eres mi madre.

-Zoe déjame explicártelo...

-¡TU NO ERES MI MADRE!

-Pero Zoe...

-Dejaste de serlo cuando fuiste a mi casa con esta mentira-Sentencio antes de marcharme.

Salgo de aquella casa con lagrimas en los ojos. Estoy completamente enojada con mi mama. Con Alicia. ¿Como la persona que se hace llamar mi madre puede hacerme algo así? Nunca lo sabré. Ella eligió la mentira pero yo no, nunca mas. El vacío me invade, es como si no supiera en donde estoy parada, como si toda mi vida hubiera sido planeada, desde que nací para que mi abuela me amara, que creciera sana junto a ella ganándome su confianza y el odio del resto de la familia y finalmente madurar, ser mayor de edad para que en el momento preciso me casaran por pura conveniencia. Pero con lo que no contaba mi mama es que yo misma iba a poder usar mi cabeza teniendo pensamientos propios, no dejándome influenciar y tomando mis propias decisiones, ella creyó que iba a poder controlar mi vida pero no es así. Pero ya no mas, y ese testamento ya no me interesa. Un leve escalofrío invade mi cuerpo entero. El testamento era solo por mi madre y ella no esta enferma... esto quiere decir... Tengo que arreglar las cosas. Debería agradecerle principalmente a Nicole, ella fue la que abrió mis ojos. Tomo mi celular y marco aquel numero que jamás pensé que iba a utilizar.

-Buenas tardes, oficina del abogado Lawrence- Dice una voz del otro lado.

-Hola, ¿Podría hablar con él? Soy Zoe, dígale que hablo por el testamento de Antonia Martin- Digo sin quitar la mirada del frente.

-Espere un momento- Dice dejando música de fondo. Pasaron una pocos segundos y otra voz apareció.

-Hola Zoe, ¿A que se debe esta llamada?

-Quiero divorciarme- Anuncio sin rodeos.

-¿Esta consiente de que si se divorcia el sesenta por ciento de la fortuna será para su tío Josh y su esposa?-Comenta el abogado con voz serena.

-Si lo sé- Afirmo.

-Muy bien, entonces el lunes convocare a una reunión, para que el resto de la familia este al tanto de todo.

-Esta bien, otra consulta, ¿El divorcio tardara mucho?-Pregunto preocupada, mayormente los divorcios tardan meces.

-Señorita Evans debo informarle que este fue un casamiento obligado por un testamento, solo se requiera la firma de ambos. - Austin-Pense. Él no va a querer firmar. A menos que...

-Esta bien-Digo finalmente. -¿Puede hacerme un favor? Quisiera mantener en secreto el porque de la reunión, eso ¿Podría ser?-Pregunto cruzando los dedos.

-No le encuentro ningún inconveniente a eso señorita Evans.

-Muchas gracias.

-Que tenga un buen dia.

Tiro mi celular nuevamente en mi cartera, y se siente fantástico. Es genial poder, por fin, arreglar todas las cosas, por que a partir de este momento, se que voy a volver a recuperar mi vida, sin mentiras, sin testamentos, sin engaños. Tal y como era antes, bueno, quizás no del todo... Pero bueno, hasta el lunes voy a tener que fingir que no sucedió nada, porque si Austin se entera que tengo un as bajo la manga se arruinara todo. Así que voy al departamento, el juicio ya abra terminado, ya son las tres de la tarde. Mi estomago ruge. Creo que será mejor comer algo antes de tener que ver la cara de Austin. Me estaciono en un McDonals que queda de camino al departamento. Me tomo mi tiempo, si lo hago. Es genial poder respirar, esta sensación de liviandad que estoy sintiendo en este momento es único. Me encantaría poder contárselo a Ian, pero no quiere ni verme. Debería hablar con Noa, quizás cuando vea que estoy comenzando a arreglar todas las cosas no este tan enojada conmigo.