Capitulo 26

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  -Eres una mierda ¿Sabias?-Le digo con los ojos completamente llorosos.

-Si me lo has dicho varias veces-Contesta pero no sonríe, como habitualmente lo ha estado haciendo. –Solo quiero que cocines ¿Si? Realmente me gusta lo que haces- Lo observo por un momento mas con total desprecio. Tomo una escoba y comenzó a correr todos los pedazos de vidrio que había en la parte donde debería estar si cocinara. –Tu brazo sangra Zo- Observo mi brazo y si era verdad, hasta en las manos tenia algunas cortaduras. Saca una venda de uno de los cajones y se acerca a mi.

-Que ni se te ocurra-Le grito.

-Es solo un poco de hospitalidad-Contesta mirándome.

-Si, lo dice la persona que me amenaza con terminar el tratamiento de mi madre- Finalizo. No dice mas nada, pero frunce el ceño, deja la venda sobre la mesa y se va nuevamente a la habitación dando un portazo.

-Quiero mi cena a las nueve-Grita desde adentro.


Termino preparando la cena. Quería que esto termine lo antes posible, y si es posible sin mas cortadas. Tengo mi muñeca y un poco de mi brazo vendado, supongo que un vidrio abra saltado cuando lo tire. A las nueve en punto Austin salió de la habitación. La mesa estaba "preparada" solo estaban los cubiertos y el plato con espagueti y salsa a la boloñesa. Yo ya había comenzado a comer, él se sentó donde estaba su plato y mucho antes de lo que imaginaba ya había terminado.


-Mañana ordenaras esto, es hora de dormir-Dice levantándose nuevamente.

-Bien-Me quedo en mi lugar observándolo.

-¿No vienes?-Pregunta parado abajo del marco de la puerta.

-Estas muy equivocado si crees que compartiré la cama con vos-

-Lo has hecho durante dos semanas-Dice entrando en la habitación pero se detiene y vuelve. –Excepto anoche, que fuiste a dormir con tu amante- Abrí los ojos como platos y lo observe ¿Cómo lo supo? -¿Ese era tu plan? Creíste que iba a dejarte el camino libre para irte con él ¿no? Ahora me pregunto ¿Él sabe que vos estas acá? ¿Y que tu plan no funciono? Seria una lastima que se enterara... por mi-Finaliza con expresión victoriosa, se que es a causa de la hermosa cara de culo que tengo yo. –Te espero en la cama amada esposa.


Observe como se iba mientras su extorsión crecía. Tengo miedo. Me armo de valor y voy hasta la habitación. Él ya estaba acostado, lo observo con desprecio, me acerco al armario y tomo un frazada, luego una almohada de la cama y los tire en el piso junto a la cama.


-¿Qué haces?-Me pregunta.

-Ayer dijiste que iba a dormir aca, pero en ningún momento dijiste donde.


No pude pegar un ojo en toda la noche. Cada vez que mis ojos comenzaban a cerrarse Austin se movía, parecía apropósito. Fue la noche mas larga de mi vida. Y creo que también lo son mis ojeras, parezco un zombi. Salgo del baño y el despertador de Austin comienza a sonar. Lo apaga y me observa.


-Excelente, te despertaste antes, una buena esposa le prepararía el desayuno a su querido marido-Dice sonriente, ¿Cómo puede ser tan desagradable y arrogante desde la mañana temprano?

-Eres despreciable-Admito mirándolo con odio.

-O quizás podría salir de acá y pasar por el departamento de Ian, queda solo a dos edificios, pero claro q eso vos ya lo sabias- Rodeo los ojos y voy a la cocina, preparo café y tuesto pan, lo dej todo arriba de la mesa, cuando finalmente sale de la habitación entro en ella y me quedo ahí hasta que escucho la puerta cerrarse.


Es demasiado temprano o yo tengo demasiado sueño. Cuando por fin decidí salir de la habitación para arreglar todo ya eran las nueve de la mañana, agarro la escoba para barrer pero cuando estaba a punto de empezar alguien golpea la puerta interrumpiéndome. Vuelvo a dejar la escoba y me acerco a la puerta para abrirla.



-¿Qué haces aquí?-Fueron las únicas palabras que salieron de mi boca cuando vi a Ian del otro lado de la puerta. Él me observa sin creerlo. Rasca su nuca con una media sonrisa.

-Me estoy preguntando exactamente lo mismo-Comenta, chista y luego vuelve a sonreír. –Sabes, fui a tu casa, y me atendió tu papa le pregunte por ti, le dije ¿Zo esta mejor? ¿Puedo pasar a verla? Y me pregunto que te había pasado- Comenta y una pequeña risa sale de sus labios. –Entonces le comente que te dolía la cabeza y me dijiste que ibas a tu casa, y como no me avisaste si te sentías mejor o que, decidí venir a verte.

-Ian...-Intento detenerlo pero mi voz es solo un susurro.

-No, no, espera viene la mejor parte- Dice como si estuviera contándome sobre una película. –Te digo textual lo que me dijo, Pero Zo no vive aquí, hace dos semanas que no vive aquí- Me observa un momento. Y ahí estaba nuevamente la decepción en sus ojos.

-Puedo explicártelo-Intento agarrándome la cabeza.

-No quiero que me expliques nada-Me detiene masajeándose la frente. –Estoy cansado de todo esto-Admite, suelta un suspiro y luego se va hacia el ascensor.

-¡IAN!-Grito. –Déjame explicártelo.

-Explicarme ¿Qué?-Pregunta mientras voltea enojado. –Todo el tiempo, lo único que me dices son mentiras ¿POR QUE?

-Lo siento, es que se me fue de las manos, yo crei...

-Basta Zo, ya me canse de las excusas-Dice llamando al ascensor.

-¡No son excusas! – Grito desesperada. Él niega con la cabeza y entra al ascensor. -IAN, esta extorsionándome- Admito. Sale del ascensor y me observa.

-¿Extorsionándote? –Pregunta sin creerlo. – ¿Con que?

-Él quiere el dinero de la herencia y si lo dejo llevara el acta de divorcio a un abogado, falsifico mi firma. Y...

-Basta, Zoe- Me interrumpe. Su ceño esta fruncido y sus ojos furiosos. -¿Sabes?... Ya no se si creerte o no, siempre dices un millón de mentiras y... Basta.

-Pero Ian... es la verdad-Grito con los ojos cristalizados, él me observa una ultima vez y luego entra en el ascensor.


Entro nuevamente en el departamento y agarro mi celular, tengo cinco llamadas perdidas de mi papa. Cierro la puerta y me siento en el piso apoyándome en ella, ya que el resto del departamento esta lleno de vidrio. Llamo a mi papa y luego de todo el sermón le comento de la confusión de Ian, otra mentira, y dejo de preocuparse. Ahora si puedo decirlo sin ningún problema, esto es una mierda. Mi celular vuelve a sonar, es Nicole.


-¿Hola?

-Zo... ¿Cómo estas? Disculpa que te moleste pero podrías pasar mañana por casa, me gustaría hablar con vos.

-Claro, luego del curso voy.

-Muy bien, te espero, por favor no faltes, es importante.

-Ok, hasta mañana.

-Nos vemos mañana.


¿Y ahora que? Necesito un minuto de paz, en realidad necesitaría ser otra persona, me odio a mi misma, odio las estupideces que hago. Y lo peor de todo es que perdí la confianza de Ian, otra vez.   


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Bueno espero que estén pasando un lindo sábado y que hayan pasado una excelente navidad :3 No se olviden de dejar sus comentarios y si leyeron el capitulo no se olviden de votar :D Saludos 


Mi Verdadero Amor [#3]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora