La sangre del pasado y futuro

Diez: Disturbios en Sanguinem

- Ahora podemos aprovechar para escapar de aquí – dijo Ayumu a su familia que estaban aún en su casa, mirando toda la revuelta desde el segundo piso.

- Y si escapamos de aquí ¿Qué haríamos fuera? – dijo Saki -. No hay nada para nosotros allí, solo muerte, quien sabe... quizá lo que nos mantiene vivos es que vivimos dentro de la ciudad vampírica.

- ¿Podríamos intentar? – propuso Misaki -. Yo también he olvidado como se siente el sol, si pudiéramos salir ¿No sería lo mejor? Además quizá encontremos a Natsuki.

- Hay que concentrarse en escapar ¿Entendieron?

- Si – dijeron los otros cuatro a coro, Saki suspiro "¿Estaría tomando la decisión correcta?"

Se internaron en la multitud intentando buscar algún espacio que los vampiros hubieran olvidado.

Entonces los vampiros comenzaron a ser más agresivos, en menos de un segundo todos los que estaban adelante cayeron muertos, con las gargantas cortadas, eso causo pánico en todos los que allí estaban, Saki y sus amigos tuvieron que meterse en un callejón para no ser aplastados por la multitud que ahora corría despavorida de vuelta a la ciudad.

Una mano toco el hombro de Saki haciendo que esta gritase y cayera al suelo.

- ¿Estas bien? – pregunto Natsuki mirándola con una ceja levantada.

- ¡Natsuki! – gritaron sus amigos casi a coro y corrieron a abrazarla.

El reencuentro fue muy emotivo hasta que Serika noto la ropa que traía puesta Natsuki.

- ¿Por qué estas usando el uniforme de los vampiros? – pregunto y los demás se alejaron para examinar mejor a Natsuki, sus ojos no eran rojos ¿Así que no era un vampiro verdad?

- Es una larga historia – dijo Natsuki llevándose la mano detrás de la cabeza y frotándose el cabello -. ¿Estabais pensando en escapar?

- Si – contesto Saki algo cautelosa y desconfiada, lo que le resulto más doloroso a Natsuki de lo que hubiera creído posible.

- Les ayudare – dijo "¿Qué estás haciendo?" se preguntó "¿Seria mejor para ellos llevarlos a alguna ciudad humana?" Natsuki no estaba segura de su decisión pero después de la revuelta no sabía si los vampiros cambiarían el trato hacia los humanos, además Krul parecía preocupada por algo.

Se escabulleron por pasadizos que muy pocos humanos conocían y llegaron al fin fuera de la ciudad, el viento frió les hizo temblar pero todos miraron asombrados al sol que en ese momento se escondía.

Natsuki se debatió entre si era buena idea dejarlos solos, se decidió por guiarles, habían demasiados peligros... después de esto no podría volver nunca a Sanginem, pero eran su familia.

- ¿Cómo te convertiste en vampiro? – pregunto esa noche Saki, Natsuki negó con la cabeza.

- No lo recuerdo.

- ¿No recuerdas absolutamente nada? – pregunto Hideki, Natsuki intento recordar y cerro sus ojos.

La noche cuando fue convertida estaba regresando a su casa por el camino más largo para pasear un poco...

- Unos vampiros me atacaron, y entonces todo se puso negro – dijo Natsuki abriendo sus ojos de repente, como era algo normal en la ciudad vampírica, ninguno de sus amigos hizo más preguntas, pero había más ella había escuchado sobre que algunos vampiros estaban planeando algo contra Krul, entonces había llegado la reina y luego de arrancarles la cabeza a sus subordinados se acercó a una malherida Natsuki para darle de beber su sangre.