Diez

50 5 1
                                    

Ella sorbió un suspiro y vaciló.

―Ok ―dijo finalmente.

Su rostro se iluminó pero después se recordó por qué estaba ahí.

―Quiero contarte lo que pasó en realidad.

Y se lo contó.

―Besé a Kat solo porque me estaba chantajeando. A decir verdad, no la besé en realidad ahora que lo pienso. Ella me besó. Me dijo que si no la besaba, le diría a todos lo que le pasó a Dita ―dijo refiriéndose a Afrodita con su sobrenombre―. Quería encontrar otra forma de que ella no le contara a nadie, porque no podía soportar perderte, pero ella dijo que solo iba a ser un pico*.

Paige habló: ―Pero no puedes confiar en ella, lo sabes.

―Lo sé, traté de detenerla pero aun así ella me besó y fue ahí cuando llegaste.

―Así que es eso. Trataste de proteger a Dita porque sabías que ella no quería que nadie supiera que ella padecía de cáncer. Pero, ¿por qué no me dijiste eso antes?

―Porque cada vez que me acercaba a ti, salías corriendo ―Spencer estaba nervioso. No había practicado lo que iba a decir.

―Spence, hice eso porque me asustaba que me lastimaras de nuevo ―eso rompió su corazón.

―Lo siento. Ese fue el mayor error que pude cometer y me odio por eso. Pude haberle preguntado a Kat una mejor manera en lugar de besarla... Me odio demasiado.

Las siguientes palabras sorprendieron a ambos.

―Te perdono ―Spencer levantó su mirada.

―Espera, ¿qué?

―T-te perdono.

Escuchó esas palabras claramente. Te perdono. Te perdono. Esas dos palabras lo hicieron feliz.

―Entonces, ¿podemos volver a ser mejores amigos? ―preguntó esperanzado.

―Me gustaría, pero ya tengo suficientes mejores amigos para molestar ―tan pronto como Spencer escuchó esto, sintió que su corazón se partía. Miró a Paige. Ella reía burlonamente.

―Pero, me gustaría tener un novio ―dijo tímidamente.

Estaba confundido. ¿Qué había de ese tal Hunter? Además, creía que ella quería tomar las cosas con calma.

―¿Qué hay de Hunter?

―Oh, él. Él es mi mejor amigo gay ―dijo riendo.

―Oh ―fue todo lo que pudo decir antes de sentir sus mejillas calentarse.

―Entonces, ¿quieres tomar las cosas con calma? O qu...

―Con calma ―dijo sonriendo mientras se acercaba a abrazarla.

―Espera, ¿eso significa que estamos juntos? O...

La besó. Tan pronto como sus labios se juntaron con lo de ella, la besó con mucha pasión. Extrañaba el sabor de sus labios. Sabían a ese té de vainilla que siempre solía beber en la mañana. Sonrió contra sus labios y sintió que ella también sonreía. Finalmente, después de lo que parecía para siempre, se separaron.

―¿Eso responde a tu pregunta? ―preguntó sonriendo.

―Nope ―sonrió burlonamente.

―¿Qué? Q-qu... Oh. Paige, ¿volverías a ser mi novia? O ¿q-quieres tomar las cosas con calma? ―ella le sonrió.

―Con calma.

Y en un segundo, ya estaban el uno al lado del otro, abrazándose, besándose y acurrucándose, porque sabían que el amor verdadero nunca muere.

Y todo sucedió por un estúpido proyecto y una nota con solo cuatro palabras: Encontrémonos en el café.


~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.

Eso es todo (:

Gracias por haber leído la historia de Paige y Spencer. Espero que les haya gustado tanto como Text Me.

Y ya sabes, si te gustó, dale clic a la estrellita (:


P.D: Si te gustara que traduzca alguna historia del inglés al español, no dudes en pedírmelo :D.


Encontrémonos en el CaféDonde viven las historias. Descúbrelo ahora