ARIES: Destaca en el humor físico, sobre todo en las imitaciones graciosas de otras personas. Aunque ingenio le sobra para hacerte reír sin hacer parodias de otros.
TAURO: Muchas veces es gracioso sin pretenderlo. Cuando ve que los demás están riéndose alrededor por algún suceso que ha protagonizado, se arranca también a reír.
GÉMINIS: Cuenta los chistes como nadie. También es un experto en hacer bromas para burlarse de alguien (no para hacerle sentir mal). Le encanta reír y hacer reír. Cualquier insignificante excusa es buena para ello.
CÁNCER: Su fuerte son las muecas. Sabe poner cara de despistado, de sorprendido, de mega-enfadado... Y justo en el momento en el que hace más gracia.
LEO: Su especialidad humorística es la exageración. Leo lo exagera todo para mayor deleite y carcajeo de su público, que suele pedirle más y más. Por supuesto, leo sigue exagerando hasta que les duela la mandíbula de reír.
VIRGO: Bromea sobre las contrariedades de la vida. Es un maestro haciendo de la queja un chiste y disparando críticas afiladas e ingeniosas.
LIBRA: Como buen maestro de la conversación, libra intercala la hilaridad en cada historia que cuenta. Así, con frescura y naturalidad, para proseguir después con el hilo del tema.
ESCORPIO: No hay ni que decirlo. Su humor es sarcástico y corrosivo, ¡no para teletubbies! A veces bordea con gusto la mala educación, pero no puedes evitar llorar de la risa cuando él/ella se propone que lo hagas.
SAGITARIO: Este signo lo quiere convertir todo en una experiencia divertida. Combina todas las "especialidades" atribuidas a los distintos signos.
CAPRICORNIO: Tiene cara seria, de "yo no fui", pero las mata callando. No te das cuenta de que se está quedando contigo hasta que comienza a reírse sonoramente y tú le sigues.
ACUARIO: No puede evitar ser gracioso. Le sale de manera natural y, en ocasiones, se sorprende de que todos se estén muriendo de la risa gracias a sus ocurrencias. Es que tiene cada una...
PISCIS: Es un especialista en hacerte reír contando historias, tanto de buen gusto, como ñoñas, como auténticas guarrerías. ¿Guarrerías? Ufff... No sabes tú hasta dónde llega su creatividad.