Comenzar II.

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Vaya, estás aquí. Eso es perfecto.
Aquí comenzará tu historia, aunque no lo creas, tu harás que esta historia cobre vida.
Quiero que en cada renglón imagines cada detalle, cada sentimiento, cada forma de ver el universo.
Sienta té, relájate y disfruta.

526 días antes.
Ahí va tu protagonista, la verdad es que Demetrio nunca había sido de entrevistas, pero ese día se dirigía a una. ¿curioso? ¿no?
Su suave pelo color marrón suave le rozaba la cara, al ritmo en el que las hojas columpiaban.
En la segunda cuadra partiendo de su casa, en la calle Wetland, se encontró con Susy, una tierna empleada que trabajaba barriendo hojas que dejaba el árbol de enfrente en ¡Cookies, se imaginaran lo que era la tienda.
Demetrio se paró y la saludó, como todas las mañanas desde hace 3 meses.
-¿Cómo esta señorita? Dijo, dándole un beso en su mano derecha.
-Pues le diré, he escuchado al director de la empresa decir que hará cambios de empleados, la verdad me aterra saber que yo sea una de ellas.
Demetrio se le quedo viendo, con una sonrisa fingida.
-No te preocupes, eres la persona que más se esfuerza en su trabajo, no te despedirán.
-Muchísimas gracias señor, por cierto, esto es para usted.
La señora le entrego un pequeño dije, con forma de llama.
-¿para qué me ha entregado eso?
-Es de buena suerte, mi madre me lo entregó después de que falleciera, se lo entrego a usted, ya que soy viuda y ni un hijo que ruegue por mi tengo, cuidelo.
La señora, con lágrimas en los ojos entró a la empresa, sin ninguna palabra que decir.

Interior De FuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora