Capítulo 17: La verdad libera

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La sonrisa tierna que siempre tuvo ahora era remplazada por una asquerosa sonrisa repulsiva de un loco asesino

-Una universitaria prostituta y un huérfano de otro país que nadie extrañaría, fueron las victimas ideales, y ahora todos dudaban de la honestidad de tu amado primo

-¿Qué hiciste con su cuerpo?

-¡Qué más da! ¡Da igual!

-¡Yo quiero saber!

-¡Jamás! -me gritó- Ni siquiera tendrás ese consuelo, ni siquiera una tumba para llorarlo

-¡Estás loco Yong Hwa! –dijo y eso lo altero

-¡Si estoy loco! ¡De rabia! ¡De odio! ¡De venganza!

-¿Y de que te sirvió tanto odio? Has sido infeliz todos estos años por nada

-Confieso que me equivoque –dijo retomando una aparente calma- Creí que si mataba a ese perro sarnoso tú volverías conmigo en un futuro, pero no. Preferiste a ese fiscal sobre de mí. Pero tranquila que a esta hora ya debe ser historia también

-¡¿Qué?! –Acaso había matado también a Gong Yoo- ¿Le hiciste algo? –Yong Hwa sonrió, eso era un mal presagió

-Solo tenías que volver a mí –dijo

-Yo solo seguí con mi vida –dije y su mirada de odio se acentuó más

-Y te olvidaste de la mía. Creo que llego la hora de cobrar viejas deudas –dijo y me asuste ¿Que quería de mi ahora?

-¿Qué es lo que quieres? –retrocedí unos pasas mas

-Quiero que sufras lo que yo sufrí por tu culpa y la de él

-¡Ya lo mataste, me mataste en vida! ¿Qué más debo sufrir?

-En verdad crees que está muerto... -dijo con la sonrisa de asesino que se le había dibujado en el rostro

-¿Qué? –acaso quería decir...

-¿Y qué pasaría si te digo que está vivo? –saco de pronto un arma detrás de su espalda- Pero nunca lo veras de nuevo

-Estas mintiendo –le dije para ganar tiempo. Y ni siquiera sabía para qué.

-¿Es lo que quisieras oír verdad?... Que está vivo.

-Estas enfermo –le dije con repudio

-Quizás un poco –levanto el arma hacia mí y cuando me dispararía el timbre de la puerta del edifico repico, alguien estaba abajo. Aproveche y le arroje un florero y me agache al oír el disparo que se le escapó al salir volando el arma de su mano donde lo había golpeado el objeto que le lance. Brinco sobre mi cuando intente llegar hasta la puerta donde apenas la pude abrir. Forcejeamos pero era obvio que él tenía más fuerza, levante la rodilla y lo golpee fuerte, chillo de dolor y me soltó momentáneamente pero al querer ponerme en pie sujeto mi tobillo y me jalo tan fuerte que mi cabeza golpeo duro el suelo y sentí algo caliente en mi frente escurriendo por mi rostro.

Era sangre. Mi propia sangre, por unos segundos me atonte cuando de nuevo fui consciente de lo que pasaba él había recuperado el arma, mi final estaba cerca.

-Si me hubieras amado como yo te amé. Podríamos haber sido tan felices –oí sus palabras llenas de rabia mezclada con amor

-Jamás habría podido ser feliz con un monstro como tú –su odio se acrecentó más, Oí la voz de Joon seguido de un disparo en la puerta que se abrió de golpe. Mi primo Kim Joon entro de pronto presenciando la escena. Se oyó un disparo de nuevo cuando cerré los ojos al abrirlos note los ojos abiertos de Yong Hwa y una enorme mancha de color carmesí en su pecho, el arma cayo de sus manos y él de rodillas después. Me miro un segundo antes de desplomarse sobre la alfombra de mi sala

LAZOS DE SANGRE (TERMINADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora