"En el Momento Oportuno" ~Sichul~

~Primera Parte~

El cuento de hadas se había acabado, nunca en su vida pensó que su novio le fuera a ser infiel, pero había sucedido.

¿Cómo pudo ser tan estúpido? ¿Cómo no pudo darse cuenta de su infidelidad?, se preguntaba una y otra vez, hasta ahora no podía entender como la persona que dijo amarlo tanto lo había traicionado tan vilmente con su mejor amigo.

¿Qué clase de personas tenía él a su alrededor? ¿Cómo era posible que las dos personas en las que más confiaba le hubieran jugado sucio de esa manera?

Él había confiado y creído en Jaejoong, le había contado cada uno de sus problemas y recibido sus consejos con alegría, como se había reído Jaejoong de él a sus espaldas, al darse cuenta que el estúpido de Heechul venia hacia él en sus momentos de incertidumbre. Él había creído que Jaejoong era un buen amigo, cuando en realidad era todo lo contrario, mientras el había estado triste por haber tratado mal a su novio, Jaejoong y Yunho se habían estado revolcando feliz de la vida uno con el otro.

Pero eso no importaba en este momento, ya que por fin se sentía contento y feliz después de tiempo; la música un poco estridente inundaba sus oídos, y él tenía ganas de bailar, se levantó del taburete en el que se encontraba sentado, pero sus pasos fueron un tanto descoordinados ya que la abundante cantidad de alcohol que había ingerido estaba comenzando a hacer efecto en él, pero aun así se dirigió hacia la pista de baile, y comenzó a mover las caderas al compás de una música lenta. 

Su cuerpo se balanceaba de un lado hacia el otro con total sensualidad, llamando la atención de muchos de los presentes, pero él ni cuenta se daba ya que con los ojos cerrados seguía moviendo su cuerpo sin que nada ni nadie le importara, quería olvidar y bailar para él, esa era la mejor manera de dejar todo atrás.

Heechul bailaba ajeno a todo cuando sintió unas manos posarse en sus caderas, esta persona lo atrajo hacia sí y comenzó a frotar su cuerpo contra el suyo, a él en ese momento no le importo y siguió bailando hasta que sintió que era jalado fuera de la pista de baile, y esto ya no le empezó a agradar, así que intento soltarse y alejarse del tipo, pero este no lo dejaba ir. Heechul se comenzó a asustar al ver que había sido sacado del club y estaba siendo arrastrado hacia un callejón oscuro y solitario, intento gritar pero su boca fue tapada por una mano grande y fuerte, mientras que con la otra intentaba desabrocharle los pantalones.

No, esto no podía estar pasando, por lo visto iba a ser violado en plena calle por un desconocido y todo por haber bebido más de la cuenta. Heechul negó y lágrimas acudieron a sus ojos, intento forcejear contra el tipo, pero no obtuvo nada, ya que el otro hombre era más alto y grande que él. El tipo logro abrir sus pantalones, así que lo jalo de los pelos y le dio la vuelta, y Heechul pensó que este era el fin, ya no podría hacer nada.

Pero no estaba dispuesto a darse por vencido así que forcejeo un vez más, logrando morder la mano que tapaba su boca, cuando esto sucedió Heechul empezó a gritar pidiendo ayuda, pero sus gritos fueron acallados cuando sintió un fuerte puño incrustarse en su mandíbula, dejándolo aturdido.

El tipo maldijo, jalándolo con fuerza, para luego empujarlo contra la pared y pegar su cuerpo al suyo, luego sus pantalones y bóxer fueron bajados, mientras manos frías tocaron su cuerpo desnudo. Unas fuertes arqueadas sacudieron a Heechul al escuchar el zíper del pantalón del otro hombre, lo cual indicaba su fatal destino.

Heechul inclino la cabeza derrotado e impotente, sin poder creer que esto le fuera a suceder, y todo era su culpa, si no hubiera bebido de esa manera se hubiera dado cuenta del peligro inminente al que se estaba dirigiendo, pero por culpa de su estupidez, iba a terminar violado y dejado tirado en un sucio callejón, donde no pasaba ni un alma dispuesta a ayudarlo.

Lagrimas inundaron sus ojos y se derramaron por sus mejillas, estas estaban llenas de amargura hacia el tipo que le estaba haciendo esto, pero sobre todo hacia sí mismo, que se había metido solito en todo esto dirigiéndose hacia un final atroz.

Heechul cerró los ojos con fuerza, sin poder soportar lo que iba a suceder, pero de repente sintió que el peso del hombre que lo tenía sujeto se había ido, sin poder entender nada se dio la vuelta y vio que su captor estaba peleando con otro tipo, el cual le dio unos cuantos golpes y lo dejo tirado sin sentido.

Heechul se encontraba desconcertado y aun no entendía todo lo que acababa de pasar, había sido salvado, rescatado en el último momento, justo cundo creía que su suerte había sido echada, había aparecido este hombre, de quien sabe dónde y lo había rescatado.

Heechul agacho la cabeza y entonces se dio cuenta que tenía los pantalones y bóxer a media pierna, y un fuerte rubor cubrió su rostro, se levantó estos rápidamente, tratando de acomodar su ropa, sin atreverse a mirar al hombre que lo había rescatado, ya que se encontraba muy avergonzado.

En eso sintió una mano posarse sobre su hombro, y él salto sorprendido y asustado, levanto el rostro y se encontró con unos ojos oscuros como la noche los cuales lo miraban con preocupación.

—¿Te encuentras bien? — le pregunto el hombre, Heechul se disponía a responder, pero unas fuertes arqueadas le sobrevinieron, evitando que pudiera contestar. Lo único que pudo hacer fue inclinarse hacia un costado antes comenzar a devolver todo lo que había ingerido.

Mientras el vomitaba sin control, su salvador froto su espalda gentilmente, diciéndole que "todo estaba bien". Cuando pareció que su estómago había devuelto todo lo que le hacía daño, se irguió con la respiración agitada por el esfuerzo, un pañuelo le fue ofrecido y él lo cogió agradecido, limpiándose la boca y secando el sudor de su frente con este, después de eso se sentía un poco mejor, así que se giró hacia su salvador y le dijo:

—Muchas gracias... si tú no hubieras llegado... no sé qué hubiera pasado...

Su salvador asintió muy serio.

—No es nada, estoy contento de haber llegado a tiempo y poder ayudarte... por cierto, mi nombre es Choi Siwon — dijo extendiendo la mano, y dando una sonrisa que lo dejo sin aliento.