I Will F♡llow You Into the Dark

Me Adentrare contigo en la Oscuridad.

(Alexander)
Miraba al cielo a través del cristal, gotas gordas y frías resbalaban por la ventana.
Que día tan más deprimente.
Es noviembre, y las hojas de los árboles comienzan a caer suaves por el pavimento.
A través de mi escondite vi pasar a una pareja de novios brincando por los charcos alegremente.
-¿Sabes, cariño? Esos pudimos ser tu y yo.
Dije para mi solo.
Saqué una segunda botella de vino blanco que John Cooper me regaló en mi cumpleaños, saqué el corcho sin cuidado y accidentalmente tiré un cofre, pequeño de porcelana.
Un poco ebrio y malhumorado fui a recoger los pedazos.
Adentro de lo que quedaba encontré una nota.
~Recuerda:
16 de Noviembre en Hyde Park. No llegues tarde. Te espero con gusto. TIHM.~
-¿Como es que llegó eso hasta este lugar? No recuerdo tener ese cofre antes.
Ya pasaron 2 años, desde la muerte de Theresa.
Solo me quedé con una chamarra de piel negra, un par de cuadros pintados en óleo y unas partituras para piano.
El resto de sus pertenencias están en Inglaterra.
Al año y medio de quedarme solo (literal) tome todo lo que necesitaba, o mas bien, creí necesitar, subí al primer vuelo directo a Francia y no regresé.
Obviamente dejé el trabajo, dejé todo lo que me ataba a Londres. Comencé a trabajar para una empresa local, traía buenas referencias no me costó trabajo ganarme el puesto de Director.
Si antes me consideraba bueno para compartir mis ideas, ahora soy un completo huraño fuera del trabajo. Salgo muy poco. No hablo con nadie, excepto con el portero del edificio y uno que otro vecino.  Estoy en casa prácticamente todo el tiempo.
Ayer una vecina me dijo que me consiguiera una mascota, ella dijo:
-¿Porque no prueba con un gato? Esos animales son muy cariñosos, le caera muy bien, se lo aseguro.
Y simplemente dejó el edificio. 
Pero eso no es lo que alberga mi mente ahora.
Yo no compré ese cofre, nisiquiera me lo regalaron, me sorprende que esté frente al retrato de Isabelle.
Lo leí una ves más y miré el calendario.
Hoy es 6 de Noviembre, tengo la sensación de saber que ella me espera, ¿Pero porque?
Fue cuando recordé las últimas fraces en su carta.
- Sentirás mi presencia constantemente, no te asustes amado mío ... siempre estaré contigo. -
Todavía un poco mareado gracias al vino, fui a la ducha y me bañe con agua fría. Logré despejar mi mente.
Pero siento un terrible cansancio.
Al día siguiente, fui al trabajo a hablar con un amigo de la  Universidad, a ver si podía ayudarme con la terrible confusión que tengo.
Le explique el problema, y el solo me dijo.
-Si tienes tanta curiosidad de saber que es lo que verás en Inglaterra, ve.
Yo no te puedo decir más.
El amor no se entiende con ciencia, eso solamente lo entiende quien lo siente.
Le di mil y un vueltas al asunto, y al final del día, compré un vuelo de regreso a Reino Unido.
Una maleta, un portafolio y un abrigo de lana azul es lo único que me acompaña.
Llegando al aeropuerto pedí un taxi a Baker Street. Me alojare en mi antigua casa.
Claro que pensaba pedirle posada a mi hermana Diana ... pero prefería estar solo como siempre.
Así pasaron los siguientes días: caminaba por Picadilly Circus, comía en algún restaurante barato y decidía a vagar por las calles.
El 16 fue diferente: me arreglé desde muy temprano, un bonito traje de gala que encontré en el closet de mi padre. Antes de ir a Hyde Park caminé por las calles con las que recordaba caminar con Isabelle, hace 12 años. Todavía tengo vivo su recuerdo. Podía recordar a una niña de 17 años, inocente, inteligente, talentosa. Pero también recordaba a la mujer de 27, tan frágil, astuta, simpática y cariñosa.
Un dolor profundo cruzó mi corazón.
Si me hubiera casado con ella ... ¿Ahora como sería mi vida?
¿Hubiera cambiado en algo?
Caminé por las calles que acostumbraba, teniendo en el corazón una esperanza de encontrarla.
Las recorrí todas de arriba a abajo, metiendome en los callejones, con la ilusión de encontrar aquella belleza.
Fracase.
Y es cuando me di cuenta de que ella no está. Que jamás la vería de nuevo.
El sol comenzó a ponerse, compré un gran ramo de frescas rosas rojas y me dirigí a Hyde Park.
La gente me miraba con curiosidad: un perfecto caballero sentado en una banca con rosas en las manos.
Estuve una hora y media, y cuando el astro rey se ocultó por completo ... vi la silueta de una mujer ... alta, delgada ... una mujer bella.
No sabía si mis ojos me engañaban. Pero juraría que es Isabelle.
-Gracias por venir ... preciosa. TE AMO.
Fui al cementerio y deje aquel presente en su lápida, dando un beso en el mármol.
-Te recuerdo vivamente. Recuerdo todo de ti. Ningún detalle fuera. Te amo tan desesperadamente que estuve a punto de suicidarme.
Pero no lo hice. Tu dijiste que viviera como si del último día de mi vida se trate. Pues bien, amada mía. He viajado mucho, mi trabajo es increíble, vivo generalmente en Francia. Pero si hay algo que no hice ... fue enamorarme de nuevo. En mi corazón siempre estarás tú.
TE AMO THERESA ISABELLE HOLMES MEMINGUER.
Espero ansioso el día en que me encuentre contigo de nuevo ...
Con lágrimas en los ojos dejé el campo santo.
Fui a casa, prendi un fuego en la chimenea.

Puse un acetato de Vivaldi en el antiguo aparato. Y dejé que las notas penetraran mi interior.
De momento escuché unos suaves pasos en la cocina, por un momento creí que era mi hermana Diana.
-Diana ... ¿Eres tú?
Nadie respondió.
-¿Diana? 
De momento escuché el solo de un violín, sonaba más que el disco.
-Isabelle. Querida, tanto tiempo sin escucharte.
El violín siguió tocando.
-Te quiero.
-Gracias por llamarme a través de la música.-escuché su voz en un susurro.
-Vivaldi siempre fue tu compositor favorito. Recuerdo escuchar su música en tu casa ...
-Ven conmigo. Creo que estás listo para acompañarme. Porque no resisto la idea de verte en una eternidad.-el susurro se hizo mas fuerte.
-A donde tu vallas ... yo iré ... donde tu mueras ... yo moriré, y ahí seré sepultado ...-pronuncie con lágrimas en los ojos; no me asusta la idea de morir.
Y así deje por fín que la oscuridad viniera a mi y me abrazara.
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BUEN DÍA LECTORES.
ÚLTIMO CAPÍTULO.
Gracias por leerme.
Espero pronto sorprenderlos con nuevo proyecto.
Espero este escrito sea de su agrado.
Gracias por su apoyo y cariño. 
Pronto publicare de nuevo esta novela, ya editada, quitando todas las falta de horro grafía... añadiendo unos cuantos detalles. Espero que no demore mucho.
~Estefany Hernández.