Sábado, 23 de enero de 2016
Desperté a las 8 am, ya que la familia de mi novio me había invitado a la playa y me pasarían a buscar a las 9, me arreglé estando lista a las 8.45 y a esa hora le pregunté a mi novio cuánto les faltaba y dijo que estaban tomando desayuno, bueno al final llegaron a buscarme a las 10 de la mañana. Ya en la playa, notando que el sol estaba fuertísimo, recordé que no me había hechado protector solar y cómo soy muuuuuy blanca, debía hacerlo con urgencia, le pedí a mi novio que me hechara en la espalda ya que yo no alcanzaba, pero había un problema: debía sacarme la polera; en ese momento, solo pensaba en que todos se fijarían en la gran ballena que estaba frente a sus ojos, que cómo podía dejarme ver de esa manera y obviamente no podrían dejar de notar mis miles de rollos de grasa que están por todas partes de mi asqueroso cuerpo, en fin mi novio me hechó protector y rápidamente volví a ponerme la polera, me sentía muy incómoda viendo a todas esas chicas hermosas que pasaban frente a mí, sin ni siquiera un poco de grasa de más, con sus piernas delgadísimas, abdomen plano, huesos asomados...y luego estaba yo con mi gordura y mi 0% de posibilidades de ser algún día como ellas. Llegó el momento más difícil de cada ida a la playa: sacarme la ropa y quedar en traje de baño, exponiendo mi horrible "figura", si es que asi se le puede llamar a mi deformidad de cuerpo, y caminando a la vista de todos para meterme al mar. Ya dentro del agua, donde nadie podía notar mi obesidad, nadé y nadé por mucho tiempo con mi novio y su hermano, luego decidieron subirse a la balsa, y yo otra vez incómoda debido a que la gente nuevamente era capaz de observarme, arriba de ésta, me encontré con unos amigos y nos quedamos conversando hasta que decidimos volver a la orilla. Ya en ella mi novio y mi amigo estaban tiritando de frío, y yo dije: "por qué los hombres son siempre tan friolentos", a lo que mi novio respondió: "no creo que es cosa de hombres, sino que como él y yo no tenemos nada de grasa en nuestro cuerpo..." y antes de que él pudiera terminar su frase dije: "ya me quedó claro que soy una gorda llena de grasa, gracias amor"; el intentó disculparse por lo que había dicho, pero ya la había cagado, definitivamente fue un comentario indebido. Con esa frase recorriéndome la cabeza, mientras escuchaba sus "perdón amor, no me refería a eso; lo siento, no hablaba de ese tipo de grasa; sabes que eres hermosa", solo quería que pasara rápido el tiempo para irme de ese lugar.
Al llegar a su casa, me duché, pues estaba llena de arena y sentía asqueroso mi pelo, y al rato llaman a almorzar, y de la nada se me hace un nudo en el estómago, bajo las escaleras, llego al comedor y veo una grasosa pizza en medio de la mesa, confieso que quería salir corriendo de ahí, y al sentarme escucho: "son dos rebanadas para cada uno, y cuando todos se coman sus trozos correspondientes traeré la otra pizza para el que quiera más", con asco y lentitud me comí mi porción, sin evitar sentirme culpable con cada mordisco y a la vez con ganas de vomitar todo lo que estaba ingiriendo.
Al pasar ese mal rato, subimos a la pieza de mi novio y tomamos una siesta, ya que la playa nos había dejado muy agotados. Al despertar, recordamos que debíamos ir a comprarle un regalo a su primita que viajaba mañana, pero nos habíamos comprometido a jugar con ella al despertar, entonces le dijimos que jugaríamos twister con ella unas pocas veces y que luego saldríamos porque teníamos algo importante que hacer.Fuimos al centro y le compramos una mochila muy linda, y cuando llegamos a la casa y se la entregamos, se puso tan feliz porque le había encantado. Por la hora, tuve que tomar once allá, y me sentía la persona mas obesa del mundo, pues me daban y me daban más cosas para comer y aunque decía que no quería, aparecían en mi plato de pan mágicamente y todos con los ojos en mí para ver si me gustaba lo que me daban; les diré algo: "FUE HORRIBLE". Solo quería pararme de ahí e ir a vomitar, pero no podía...lamentablemente, pasó el rato y me fueron a buscar. Al llegar a mi casa, me tiré en la cama a llorar por todo lo que había comido, y literalmente: "lloré hasta quedarme dormida", tal cual cómo cuando era pequeña.
- Fin del día 3 -
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Palabras de una suicida más.
Teen FictionMi cabeza atormentada está llena de pensamientos que piden a gritos ser escuchados, y por fin han encontrado la manera de ser libres de su prisión, pero ¿cuándo yo podré liberarme de mis ataduras? ... Mis pensamientos. Mis palabras. Mis problemas. É...