Mientras comíamos mis padres me preguntaron cómo me había ido en el día, y después mi mamá me pidió que la acompañara al supermercado.
De camino ahí puse un disco de los Beatles que me regaló una amiga en Navidad.
Cuando llegamos le dije a mi madre que iría a ver unos discos, ella dijo que nos viéramos en el estacionamiento en 30 minutos; la tienda estaba un poco llena pero creí ver a Kurt así que le toqué el hombro.
-Hola Kurt- dije sonriendo
-Hola- se veía un poco molesto, pensé en preguntarle pero no me atreví.
-¿Qué disco comprarás?- fue lo único que se me ocurrió decir.
-Oye, ¿crees qué puedas llevarme a casa?- preguntó y asentí algo enojada de que cambiara el tema.-Mamá, Kurt me dijo si lo podemos llevar a su casa.
- Claro, hola Kurt.- dijo mi mamá dándole una palmadita la espalda.
-Kurt, ¿quiéres que quite el disco?
-No, me gustan mucho los Beatles.Cuando llegamos a su casa nos dio las gracias pero notamos algo extraño. Había unas maletas en la puerta y su madre salió diciendo que lo mandaría con sus abuelos mientras arreglaba unas cosas con su padre.